El chico que amo -HEDRIC (2)

64.(C) muy afortunado

CEDRIC

CXLIII

Rompió el encantamiento cuando emergió en la superficie.

Aire, bendito aire limpio en sus pulmones.

La luz del sol le cegó un momento, y Malcolm continuaba inmóvil.

Harry lucía pálido y mostraba dificultades para sostener ambos cuerpos.

Aunque nadó hacia él, uno de los profesores le sacó del agua primero.

Las tribunas estallaron en aplausos y quien más fuerte gritó fue Fleur, que recibió a Harry en la orilla. Una toalla cubría sus hombros y abrazó a su hermana menor, que comenzaba a despertar, y a Harry.

La profesora Sprout le ayudó a colocar a Malcolm en terreno firme.

Justo a tiempo, porque abrió sus ojos marrones y miró para todos lados.

Se le estrujo el alma al verle así, tan alarmado y perdido.

— Mal. Mal, soy yo. Estás bien —le tocó la rodilla, aún desde el agua hasta que su mejor amigo reparó en él y se tranquilizó. Con esfuerzo, Cedric se subió al muelle—. Lamento mucho que tuvieras que pasar por esto por mi culpa.

Malcolm suspiró, quitándose un rulo húmedo de su frente.

—Las cosas —tembló del frío— que uno hace por sus amigos. Te dije que —le volvieron a castañear los dientes— que me tiraría al agua.

—No creo que esto fuese lo que tenías en mente.

—N-no —rió y sus hombros se sacudieron.

Cedric movió sus palmas contra la piel helada de sus brazos en un intento de brindarle calor, echando la cabeza hacia atrás para encontrarse con que la profesora regresaba con toallas cálidas.

Les secó con magia y ayudó a que se levantaran del suelo.

Divisó el cabello rubio de Tam, que les hacía señas a unos metros, en donde un profesor parecía estarles prohibiendo el paso. Se dirigieron en su dirección de inmediato, y Cedric buscaba a...

Tam y Will les abrazaron fuerte a los dos.

—Estábamos muy preocupadas por ti, Malcolm.

—Podrías haber avisado, ¿eh? Que estarías en el fondo del mar —chistó Fred, yendo directo a besar a su novio en frente de todos.

Cedric miró hacia un lado, todavía tratando de...

—Está en la enfermería —murmuró Tam—. Recién se lo llevaron.

Había visto a Harry sano y a salvo unos pocos minutos atrás, cuando Fleur le abrazaba y besaba su mejilla. Entonces ¿por qué...?

La profesora Sprout les recordó que debían ir a chequearse a la carpa.

Permitió que sus amigos les acompañaran.

—Mientras los campeones estaban bajo el agua nos contaron de qué se trataba la prueba... —contaba Will, sujetando el brazo de Tam, quien a su vez tomaba el de Cedric— Ahí es cuando caímos de dónde estarías...

—¿Dónde más podría haber estado? —se rió Malcolm, caminando por delante de la mano de Fred— No me habría perdido la segunda prueba de Ced.

Fred se giró y compartió una especie de mirada cómplice con Will y Tam.

—Surgieron un montón de apuestas en ese momento —agregó sonriente, posando sus ojos sobre Cedric por un instante—. Algunas de lo más curiosas, que hicieron que George y yo nos debatieramos el bien y el mal, lo ético y lo que no lo es. Pero la gente era muy insistente...