Capítulo 62

1.7K 152 35
                                    

La suspensión aguanto los sentones de Rena, y vaya que fueron unos sentones poderoso, y créanme cuando les digo que una novia Renamon, muy horny y sin control no mide su fuerza, si no es por lo cambiada que esta mi fortaleza, de allí fuéramos ido al hospital.

La adrenalina y la emoción de todo fueron más de lo que ella logro aguantar o a lo que realmente estaba acostumbrada, en nuestra a veces muy tranquila vida, por eso esa noche la quise sacar a pasear y enseñarle un mundo que yo conocía.

Aun cuando terminamos, ella seguía caliente, por lo que al llegar a casa seguimos otro rato y tuve ese trasero a mi alcance por un buen rato mientras mi Linda Digimon mordía una almohada para no gemir.

Creo que nos quedamos dormidos haciéndolo por el cansancio, solo se que la mañana siguiente nos levantamos muy tarde.

—Mmmm... que hora es... —Quejo mi bola de pelos. —Arhur... Arthur amor despierta.

—Mmmm que pasa?

—Creo que nos quedamos dormidos.

—Que importa. —Queje al abrazarla fuerte. —Anoche nos desvelamos mucho quedémonos así un rato.

—De cucharita?

—Si, de cucharita, pero una cucharita con melones muy suaves. —Bromee al sujetar uno de sus pechos.

—Tehehehe eres como un bebé...

Felices por el momento de pareja, ambos se nos olvidó que el teléfono de Rena estaba apagado porque casi se petaba la noche anterior, pero con todo lo que paso lo pasamos por alto y ella lo encendió por reflejo y apenas esa cosa se conectó al wifi, madre mía Willy la que se armó.

Rena tenía como diez mil likes en Twitter y quien sabe cuántos comentarios y Retwits.

El teléfono por poco explota, eso fue aterrador, tuvimos que apagarlo otra vez porque de otro modo, el pobre teléfono peta de una. Pero ya después de eso nos tocó ver que tanto alboroto causo esa foro y al revisar su cuenta por la computadora nos dimos cuenta de lo mucho que a todo mundo le encanto esa foto.

—Uff Pelusa tienes a los furros lamiéndote las patas y a los que no son furros también.

—No crei que fuera a haber tanto alboroto.

—Eres muy hermosa siempre te lo he dicho, también por lo que estoy viendo y leyendo, eres como una heroína para muchas Digimon que aún les da pena este tipo de cosas.

—Espero no lo tomen como un mar ejemplo.

—Son más listas que eso, y por lo que estoy viendo aquí, estas siendo tendencia.

—Que!?

—Sí, parece que ya estás en la boca de muchos pelusa, y no solo por esa foto, parece que también por lo de anoche en la salida.

Había un video de ella cuando bailo en la tarima, tenía muchas reproducciones.

—Uhh yo que tú me mantengo en el anonimato un rato hasta que esta gente se calme, o usar tus otras formas un rato.

—Creo que es lo mejor.

Los días avanzaron pero la cosa tardo en calmarse, lo bueno es que no se enteraron las chicas porque si no quien las fuera aguantado.

Rena y Mamá siguieron planificando todo. Por mi lado, Papá y yo nos encargamos de lo del seguro de coche, para cualquier cosa que pudiera surgir, hasta que finalmente llegó un desgraciado lunes y con eso, mi regreso al trabajo, cosa que mi cuerpo no tomo muy bien.

—Cariño, ya debes irte a trabajar.

—No quiero...

—Vamos no seas flojo, sino, no te besare por una semana.

Amor Digital.Where stories live. Discover now