Amor Digital.

Capítulo 77

Mi cerebro estaba teniendo dificultades para procesar la bomba que Rena me lanzo a la jeta.

—Vamos a hacer un bebé ahora Arthur.

El que me lo diga mientras me acecha me asusta, porque me hace recordar, que Rena aun en esa forma tiene mucha más fuerza que yo, por lo que literalmente ella podría violarme si quisiera.

— ¡L-Linda aguarda, ya habíamos hablado de esto! —trate de reprochar ya bastante nervioso.

—Así es y dijimos que cuando estuviéramos listos, ¿y qué crees? Ya lo estoy. Así que es momento de que metas un bebé en mi útero Cariño.

Rena me acorralo contra la puerta mientras me miraba con sus profundos y un poco atemorizantes ojos.

— ¿O es que acaso no quieres que yo sea la Madre de tus hijos? ¿Es eso verdad? —Pregunto con algo de preocupación.

— ¿Qué? No, por supuesto que no. Tú eres la mujer con la que me case y quiero pasar el resto de mi vida, y lo sabes muy bien.

— ¿Entonces por qué no quieres?, sabes que estamos listos, solo buscas como retrasar esto Arthur, no creas que no me he dado cuenta, siempre me cambias el tema cuando hablo de esto, y tratas de hablar lo menos posible de eso...

—Es que...

— ¿Arthur qué pasa? cada vez que hablamos sobre esto te pones muy tenso... ¿es que hay algo que me has ocultado o no me has dicho?, ¿hay algo malo con nosotros?

Ya me tenía acorralado, creo que era el mejor momento para decirle todo lo que sentía al respecto.

—Tengo miedo Rena, me da mucho miedo, me da terror el solo pensar en ser Papá...

— ¿Miedo?

—No quiero que a ti te pase lo que le paso a mi Mamá. —Aclare al poner mis manos en sus hombros. —Si te pasa algo a ti o al bebé, no podría perdonármelo jamás... te amo demasiado Rena y si te perdiera mi vida se quedaría vacía... simplemente no quiero que eso pase, no quiero pasar por el riesgo de perderte.

—Oye...

Con sus manos levanto mi cara para verme a los ojos y sonreírme.

—Estoy perfectamente bien y lista para esto. Lo que le paso a tu Mamá fue un caso, pero eso no me ocurrirá a mí. Soy muy fuerte y lo sabes, tampoco te dejaría solo. Te amo tanto más de lo que tú me amas, y no quiero que nada nos separe. —Calmo al darme un beso en la frente. —Sé que da miedo, yo también tengo algo de miedo. Es una gran responsabilidad, pero estamos listos para esto. Sé que serás un gran Padre, me lo has demostrado con todo lo que has hecho, ese bebé va a tener al mejor Padre del mundo, estoy segura de eso.

—Linda...

—Somos tú y yo contra el mundo, ¿recuerdas?

—Sí, es cierto. Tienes razón Linda, solo estaba buscando retrasar esto porque tenía miedo que algo pudiera pasarte, pero ya no tengo dudas, y estamos listos para tener a un nuevo integrante en la familia.

— ¿No me vas a decir nada de mi lencería...?

Ante eso solo pude sonreír para verla.

—Te queda muy sexy.

—Pero parece que no te hace mucho efecto...

— ¿Crees que no?

La tome de la cintura y la pegue a mi cuerpo para darle un tierno beso, pero al terminar ese beso algo paso. Nos vimos a los ojos por unos segundos y empezamos a besarnos otra vez, pero esta vez con un gran deseo y lujuria por parte de cada uno, nos queríamos devorar con ese beso, es como si alguien simplemente fuera cortado nuestras amarras de autocontrol.