Capítulo 1.11

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Me desperté y empecé a desperezarme en la cama, creí que Damien se había ido ya, pero escuché como salía del armario, y se quedaba mirándome. Tenía un pantalón de Jean con un buzo azul oscuro y unas zapatillas, no podía dejar de contemplar su belleza y frialdad que me atraía. Él parecía un gas noble con su capa de valencia completa, lo que lo convertía en alguien inalcanzable, donde todos quieren parecerse a él, pero él es indiferente con todos porque no necesita reaccionar con nadie.

— Anoche te dormiste otra vez – me dijo con reclamo.

— Estaba cansada de tanto leer, así que cuando toque la almohada me quede dormida – le dije con simpleza mientras empezaba a desperezarme.

Permaneció un rato en silencio, así que fui hasta el baño para lavarme los dientes y la cara, cuando salí creí que ya se había ido, pero se encontraba sentado en el borde de la cama revisando su reloj.

— Hoy va a haber un baile – dijo eso cuando me vio.

— ¿Qué especie de baile? ¿Cómo los bailes reales y de princesas? – pregunté con emoción, si eran así, entonces quería ir, siempre quise mi baile de princesa.

— No sé cómo sean esos bailes, pero tienes que vestir con un vestido pomposo y elegante, si eso contesta tu pregunta – dijo viéndome.

— Sí, qué emoción – empecé a dar saltitos de alegría, después recordé que no había comprado un vestido elegante, toda mi ropa era casual.

— ¿Qué paso todo bien? – pregunto desconcertado ante mi cambio de estado.

— Sí, solo que no tengo un vestido, ¿puedo salir a la ciudad a comprarlo? – le pregunte esperanzada.

— Sí, le diré a dos de mis hombres que te acompañen – dijo seguro.

— Súper, gracias – le respondí con una sonrisa – ¿Por qué hacen este baile? – pregunté la razón.

— Inicio de luna llena de fertilidad y amor – dijo con desinterés.

— ¿Cada fase de la luna representa algo en la manada? – pregunté con duda.

— Sí.

— Dime quiero saber sobre eso – tal vez esa era una de las piezas que me faltaban para romper la unión, los lobos eras seres mágicos de la luna, ella podría tener mis respuestas.

— Si me esperas despierta esta noche te lo diré – dijo con su típica cara seria.

— Entonces es un trato – dije mientras le tendía mi mano. Me interesaba saber más de ese tema.

— Es un trato – dijo recibiendo mi mano con media sonrisa y después se despidió.

Damien abandono la habitación, así que me dispuse a arreglarme para salir de compras, le mandé un mensaje a Anastasia para que me acompañara, no quería ir sola, así que cuando me dirigí hacia la salida ella ya me estaba esperando en la camioneta Honda Ridgeline, me subí y emprendimos camino hacia un centro comercial.

— Sabes Akim, me invito esta noche al baile – dijo Anastasia mientras nos mediamos vestidos de coctel.

— ¿Cuál es Akim? – no recordaba ese nombre.

— El omega que va a veces por el pequeño Iván a la escuela – dijo con burla. Anastasia a veces era tan rara.

— ¿El hermano de Iván? – dije por qué si recordaba a todos mis pequeños.

— Si – dijo con desagrado.

— Es lindo, me imagino que le dijiste que si – porque sería una tonta si le decía que no el hermano de Iván era uno de los pocos agradables de esa manada.

2. El alfa sombríoWhere stories live. Discover now