2. El alfa sombrío

Capítulo 3.42

Alex

Que Indira estuviera embarazada no me tomo por sorpresa, la verdad lo esperaba desde que ella era una adolescente y jamás me imagine que con su comportamiento narcisista y maniático encontrara a alguien. Pero bueno, por lo menos encontró a alguien más loco que ella porque la aguanta y antes sonríe ante sus ataques de histeria.

Por otra parte, mi pequeña Leilani embarazada, eso sí que no me lo esperaba, así que ahora me encontraba viajando hacia Yakutsk para organizar todo y asegurarme de que en mi ausencia mi pequeña se encontrara bien. Sabía todo lo que tenía que hacer adecuación del lugar y una estricta alimentación, la cual ya tenía escrita para cada día de los seis meses que faltaban.

— Eres super bienvenido – me dijo mi pequeña con emoción mientras me acompañaba a la habitación que siempre disponía para mí.

— Gracias mi pequeña – dije mientras la abrazaba.

— Te dejo porque el viaje me dejo rendida y tengo mucho sueño – dijo con sus ojitos empijamados.

Yo solo le di un suave beso en su frente mientras me acomoda. Yo también necesitaba descansar un poco. Ya tenía claridad sobre lo que tenía y solo tenía que empezar a desarrollar todo.

— Buenos días – salude a todos los presente en la mesa.

Damien solo asintió y los demás también, la única persona que me había sonreído era Camil, la amiga de Damien a la cual Leilani nos había prohibido acercarnos.

— ¿La pequeña se encuentra bien? – pregunté cuando me senté.

— Sí, solo sigue dormida – dijo seco, así que solo asentí mientras esperaba que me sirvieran la comida.

Menos mal vine a este lugar primero porque la comida que preparaban aquí no era la más adecuada para la dieta de mi pequeña. Indira era caso aparte, así que ya sabía la pelea que se me avecinaba con sus caprichos por la comida. Pero mi pequeña no, ella era más tranquila y relajada en esos aspectos, así que esta gente le podría dar comida infestada de grasa como la que tenía justo enfrente ahora y ella igual se la comería.

— Buenos días – saludé a las mujeres y hombres que se encontraban en la cocina.

— Buenos días – me dijo una mujer de edad con una sonrisa, los demás solo asintieron.

— ¿Quién es la persona encargada de la cocina? – les pregunté.

— Soy yo – dijo una mujer bastante mayor mientras se aproximaba.

— Bien – dije mientras sacaba la lista – mucho gusto, mi nombre es Alexandre O'Brien – dije mientras le tendí la mano y ella solo asintió.

— Marieta Popov – dijo mientras se presentaba.

— Soy el hermano de Leilani – ella solo asintió mientras se acomodaba —. Vengo a supervisar su alimentación. Así que le voy a entregar una lista con los menús – le dije, pero ella solo se puso seria y no me recibió el papel.

— Aquí se hace un tipo de comidas para todos, el que quiera comer bien y el que no, pues simplemente que no coma – dijo tosca.

— Mire señora, usted está realizando un trabajo y esto solo hace parte de ese trabajo.

— Mi trabajo es hacer un solo tipo de comida – dijo seria.

— Miré, señora Popov – dije colmando de la paciencia.

— Yo puedo hacerlo, yo le puedo hacer la comida a la luna – dijo la única mujer que me había sonreído en ese lugar. Así que deje de perforar a la inepta de Marieta y voltee a mirar a la mujer.