Capítulo 3.31

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Damien

Los trabajos del corporativo me consumían, razón por la que tuve que viajar a Moscú para reuniones y asuntos administrativos, llevaba toda la mañana revisando documentos y dando las disposiciones finales.

— Estos balances están mal – le anuncié al ayudante mientras le entregaba el documento, pero este no me lo recibía.

Despegue mis ojos de los documentos para mirarlo duramente, pero él muy imbécil se encontraba concentrado mirando a mi niña hermosa, quien parecía una alucinación de la naturaleza acostada sobre la alfombra de mi despacho moviendo sus piernas de forma delicada mientras leía animadamente su libro y ponía notas de colores en él. Ella tenía un short de mezclilla y un buzo blanco y unas zapatillas de tacón que se había quitado para andar descalza por la oficina.

— Smith – lo llamé por su nombre y él solo siguió mirándola, lo cual incremento mi furia – SMITH —le volví a decir ya con mi genio por las nubes.

— Lo siento, señor – dijo mientras tomaba de forma precipitada los documentos.

— Está despedido – anuncié y él solo me miro agrandando los ojos con sorpresa.

— Señor, yo...— dijo intentándose excusar.

— Largo que no lo quiero ver – dije mientras me ponía de pie.

El muchacho solo asintió y salió de forma rápida de mi oficina, mientras que yo me comunique con el grupo de recursos humanos para que despidieran al inepto que se había atrevido a mirar a mi niña hermosa. El que no fuera un lobo me impidió lastimarlo porque de lo contrario le hubiera arrancado los ojos.

Por suerte Leilani se encontraba sumergida en la lectura y no se dio cuentas del incidente, así que avance hacia donde estaba y termine de acostarme en el suelo con ella mientras pasaba mi brazo por su espalda y dejaba un beso en su coronilla.

— ¿Qué lees? – le pregunté curioso, pues había comprado 9 libros de colores pasteles.

— La saga de los Bridgerton – dijo con emoción mientras me volteaba a ver – la sacaron en Netflix y quiero leerlos antes de verme la serie – dijo feliz.

— ¿De qué trata? – le pregunté curioso.

— Romance de época, es hermoso hombre guapo, hay Duques, Vizcondes entreotros – dijo feliz —. ¿Vas a verte la serie conmigo? – preguntó con ilusión.

— Sí – dije mientras dejaba un beso en sus labios y no dude en profundizar.

— Me voy dos años al Himalaya y como cambian las cosas aquí – anuncio Charles mientras ingresaba a mi oficina como si fuera de él.

— Al parecer es común que los miembros de esta familia olviden los modales de tocar la puerta – dije serio mientras me ponía de pie y le daba la mano Leilani para que se levantara.

— No seas gruñón, ya te pareces a tu hermano mayor— dijo relajado mientras detallaba a Leilani - ¿Tú debes ser mi nueva sobrina?

— ¿Y tú debes ser el tío de Damien? – le dijo ella con una sonrisa.

— El mismo – dijo feliz mientras le tendía la mano – mucho gusto, mi nombre es Charles Manrique, no había tenido el gusto de conocerte.

— Mucho gusto, Leilani O'Brien – dijo ella mientras le recibía la mano, yo solo me ubique a su espalda dejando un beso en su marca.

— Leilani Manrique, recuerda que nos casamos – dije mientras la abrazaba.

— Cierto – me dijo con una sonrisa de disculpa y después volteo a mirar a mi tío – Leilani Manrique – se volvió a presentar.

2. El alfa sombríoWhere stories live. Discover now