Un capitulo en martes en la mañana porque se me salió de los huevos...(básicamente me olvide de subir este y recién me di cuenta)
Mas vale tarde que nunca.
Besos<3
***
—¡Así los quería encontrar mocosos!
Alan entró a la cabaña encontrando una visión deplorable.
La cabaña parecía totalmente destruida en su interior. Isaac se encontraba dormido en las escaleras en una posición muy incómoda. Chad se encontraba desmayado sobre el comedor roto. Había pedazos de vidrio y el techo esparcidas por el suelo. Algunas paredes tenían hoyos y un mueble estaba partido a la mitad.
Alan negó con la cabeza.
—¡Por la diosa luna! —Lucy entró a la cabaña junto a su esposo—. ¿Están muertos?
—Están tan borrachos que han perdido el conocimiento —gruño Alan—, nuestros hijos deben estar tirados por ahí, en algún lado de la cabaña.
—¿Tal vez debería hacerles sopa? —dijo Lucy apenada.
Alan alzó una ceja.
—Amor es su cumpleaños, seguramente han estado festejando un poco...
—Lucy, el futuro alfa turco está desnudo en el techo —Alan miró a su mujer enojado—, esto sobrepasa los límites.
—Bien, esperaré afuera —hablo resignada Lucy—, no seas muy duro cariño, intentaré bajar a ese muchacho, porque puede insolarse.
Alan miró todo el desastre y de pronto cayó una pizza que había estado pegada al techo.
Se concentró e hizo aparecer varios de sus espectros que buscaron a los demás. Todo se llenó de gritos y lamentaciones. Isaac y Chad fueron los primeros en despertar y darse cuenta de que era lo que pasaba.
Los demás jóvenes fueron arrastrados por los espectros en forma de lobo. Uno a uno fueron apareciendo.
Firulais cargaba dócilmente a Gabriela en su lomo.
—Papi —dijo Gabriela bostezando—. ¿Qué haces aquí tan temprano?
—¿Temprano? —a Alan le dio un tic en el ojo—. ¡Es más de medio día!
Todos los jóvenes taparon sus oídos por el alto volumen en la voz de Alan.
—¡Hay varios alfas en la oficina a medio construir de Oliver reclamando por sus hijos! —siguió Alan—. ¡Casi nadie sabía dónde estaban! ¡Se fueron sin avisar a nadie! ¡Pudieron estar muertos por ahí sin que nos diéramos cuenta!
