Cuarenta y dos

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Recordad que la chica de la foto no se supone que sea Kora Seasse. Solo os tenéis que fijar en el traje y en los zapatos, no en la cara. Diseñado por: Krikor Jabotian Temporada: spring 2014

Crénada me conduce por los pasillos hasta el vestíbulo del Centro de Entrenamiento. Todo está vacío a excepción de los guardias. Después tomamos el ascensor y subimos hasta la cuarta planta. Allí me recibe el resto del equipo de preparación listas para entrar en ataque. 

Primero me reciben con una comida decente. Atún bañado en una salsa de nueces. Está delicioso. 

Después de esto volvemos a mi habitación asignada, pensar que Oceanus no está ocupando también la suya me provoca una punzada de dolor. El equipo de preparación se pone manos a la obra y comienzan a arreglarme. 

Una de las mujeres examina mi costado mientras permanezco desnuda en medio de la habitación como si fuese una bella estatua. 

- Wow, ni siquiera te ha quedado cicatriz- comenta asombrada mientras pasa los dedos por encima de la piel de mis costillas. 

Me miro en el espejo de la habitación. La misma chica de antes, con el mismo cuerpo... pero hay algo distinto. Lo noto en mis ojos, esa forma en la que me miro a mi misma, como si no me reconociera... como si fuese incapaz de mirarme a la cara por todo lo que he hecho. 

Estoy más delgada, pero no demasiado, sigo teniendo un aspecto saludable. 

El equipo de preparación habla mientras me ducho, habla mientras me peinan, habla mientras me arreglan las uñas... creo que es lo que mejor se les da en este mundo: hablar. 

Solo mencionan cosas como... ¿Y cuándo Kora hizo aquello...? ¿Y qué hay de cuando Kora mató a...? En ese momento pensé... 

Tonterías. 

En el distrito cuatro se habla también durante semanas sobre los Juegos. Muchos niños pequeños comentan que sobre el vencedor y sobre cómo se quieren parecer a él o ella. Los entrenadores utilizan los Juegos como ejemplo en las lecciones y los pescadores lo usan como tema de conversación para distraerse de su duro trabajo. Cada uno le da un uso diferente, pero todos hablan. 

Crénada entra y aleja al equipo de preparación. Las tres se colocan en fila justo a mi lado y esperan a que Crénada me ponga el traje. 

Es precioso... ¿más precioso que los otros tres...? Igual. Todos son diferentes y no me gusta comparar. Cada uno es único. 

El vestido es increíble, jamás he visto algo que refleje tanta fuerza. Tiene un montón de bordados por todas partes de color dorado. 

- Es hilo de oro- comenta Crénada mientras paso unos dedos por encima. No sabía que el oro también podía estar en un hilo... debe de costar una fortuna, lo suficiente como para comprar toda una calle en el distrito cuatro, o una casa en... no sé si una casa en el Capitolio. 

El vestido es muy corto y ajustado, pero después lleva una especie de capa encima, parecido al del paseo en carro... pero diferente mucho más elegante, pesada y sin transparencias, nada de transparencias esta vez. Este vestido refleja fuerza y poder... 

Han dejado mi ahora suave y brillante pelo cayendo por mi espalda, no en cascada porque mi pelo está cortado recto, pero si ondulado... al natural. 

El traje es corto y mis piernas aparecen por debajo del traje hasta terminar dentro de unos zapatos de tacones de raso color... dorado, pero sin llegar a ser dorados 

- Es increíble... ahora sí que parezco una vencedora- le digo mientras me llevo las manos al traje una vez más. No puedo dejar de tocarlo, es como una adicción. Tener algo tan bonito que envuelva tu cuerpo... 

73º Juegos del Hambre (Todos los libros) TERMINADAWhere stories live. Discover now