Sesenta y tres

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- Ven- dice Finnick cuando llegan de nuevo al Centro de Entrenamiento. Alarga la mano y toma la mía. Entrecierro los ojos con sospecha.- Quiero presentarte a alguien... 

Mags se queda junto al carro con Gala y los estilistas. Pobre mujer... Finnick me lleva por en medio de los demás estilistas, escoltas, mentores y tributos. Finnick me arrastra hasta los tributos del Distrito siete y distingo a Johanna Mason que lleva un traje... como de bosque, supongo, y el pelo recogido en un moño muy grande. ¿No tenía el pelo corto? ¿Le han puesto más pelo en la cabeza? 

- Finnick- digo tirando hacia otro lado.- De verdad que no... 

- ¡Johanna!- me corta la frase a la mitad y se pone a llamarla. ¿Pero que mierda le pasa a Finnick? Johanna se da la vuelta y sonríe de esa forma tan... "te voy a cortar el cuello con mi hacha".- Quiero presentarte a... 

- Ya nos conocemos- lo corta Johanna. Finnick me mira preguntándome con los ojos si es verdad. Me encojo de hombros queriendo decir... "a mi no me mires, yo soy novata en esto".

- No lo sabía- dice Finnick.- Bueno, en ese caso... 

- Sí, bueno... siento estropearte la fiesta. Tengo que ir a coger un ascensor- dice antes de alejarse de nosotros caminando con ese traje verde ajustado y con corsé. 

Finnick se queda un poco pasmado y después se gira hacia mi. 

- ¿Por qué no me dijiste nada?- pregunta.

- Eh... ¿Porque no pensé que debía contarte mi vida?- propongo como respuesta.-En realidad, yo no diría que nos conocemos... Ella se sentó frente a mi en un sillón los pasados Juegos. Me hablo sobre seguir haciendo lo que Snow quiere y... fin de la conversación. 

- Está bien. Vamos al ascensor... tengo ganas de quitarme este traje...- dice mientras pasa un brazo por encima de mis hombros y caminamos junto a los demás. 

- Diras que quieres ponerte algo, ¿no? Porque quitarte más ropa es imposible...- digo con una sonrisa en los labios. Finnick niega con la cabeza mientras sonríe. 

- Créeme si te digo que da igual lo que yo lleve. Soy sexy de todos modos...- Mags mira hacia otro lado y suspira, como las madres que están hartas de las cosas que dicen sus hijos. 

- Eso nadie te lo puede negar- digo posando una mano sobre su pecho. Todo los demás tributos miran de vez en cuando a su alrededor y más de uno nos capta. También las cámaras. Espero estar molestando a los "amantes" de Finnick. Si muere en la arena ninguno de ellos o ellas van a volver a tenerlo. 

Es increíble la confianza que existe entre nosotros. También es cierto que hemos pasado un montón de tiempo juntos estos últimos meses. Pero esta facilidad que tenemos para tontear el uno con el otro sin que sea nada serio... de broma... poca gente lo interpreta como lo que es en realidad. 

Subimos en el ascensor con los tributos del uno. Los hermanos esos tan famosos. Cashmere y Gloss. Son guapos pero... no de la forma en la que lo es Finnick. 

- Tranquila, tú eres más guapa que ellos- dice Finnick cuando salen del ascensor en la primera planta. 

Me rio a carcajadas. 

- No los estaba mirando por eso...- digo mientras paro un segundo y vuelvo a reír.- No era porque me sintiese intimidada... solo los estaba observando. ¡Dios, Finnick! 

Me limpio las lágrimas inexistentes con las manos por la línea inferior de pestañas del ojo. Llegamos a nuestra planta y enseguida todo el mundo se dispersa para cambiarse a algo más cómodo. Me pongo la ropa más simple que encuentro y me reúno en el salón para estar con Gala hasta la hora de la cena. 

Finnick y Mags aparecen a la hora de la cena cuando Gala va a buscarlos. Mags me abraza y pasa una mano por mi pelo, supongo que es una forma de decir que es una pena que todos estemos pasando por esto. 

Dos avox nos sirven la cena. Todos conversan sobre algo... no estoy segura de que. Pero creo que son los estilistas los que más hablan y como no conozco a ninguno de ellos no me meto en la conversación. Me mantengo al margen hasta que uno de los avox tropieza con el traje de Gala y se rompe uno de los platos. Haciéndose añicos y cortándole la mano. 

- ¡Ay, Dios!- digo levantandome de un salto de la silla. La sangre del chico corre por su mano y ca en forma de gotitas individuales hasta el suelo. Tomo la servilleta blanca de mi lado y me acerco a él corriendo. 

- ¡Podrías tener cuidado!- grita Gala histérica mientras mueve la tela de la parte baja de su vestido que ahora está empapado en salsa de verduras.

- ¡Ha sido por tu culpa!- le grito girandome un segundo hacia Gala antes de tomar la mano del chico y poner la servilleta blanco sobre la herida. Él da un paso atrás pero le sujeto la mano.- ¿Estás bien?- le pregunto. Él asiente en respuesta. Normal, el pobre no puede hablar con la lengua cortada. ¿Qué habrá hecho para que se la corten?- Si no dejases la cola de tu traje tirada por medio del comedor... 

- Kora- me advierte Finnick levantando la vista hacia mi y lanzándome una mirada de advertencia. 

Suspiro. Estoy harta de esto. El chico me da una mirada y dejo ir su mano. Él sujeta la servilleta sobre la herida mientras se va y llegan nuevos avox para recoger las cosas. 

- Los avox solo reciben ordenes- me recuerda Gala. 

- Son personas- respondo enfurecida mientras abandono el comedor.- Algunas mejores que tú- murmuro entre dientes. 

Me pierdo la repetición de la ceremonia de apertura. No tengo ni pizca de ganas de volver a estar en la misma habitación que Gala. Ni siquiera quiero dirigirle la palabra. Todos los avox son mejor que ella. 

Sí, amigo... hay un pequeño guiño a lo que pasa entre Katniss y Darius (agente de la paz convertido en avox) En el Capitulo en el que Katniss ayuda a Darius a recoger guisantes. Kora ayuda a este chico avox con su herida. Básicamente es una forma de hacer una referencia a que Katniss y Kora no son tan diferentes, aunque así lo sea a primera vista... y a segunda. 

¿Os hábeis dado cuenta? Katniss y Kora.... "K" No me había dado cuenta y realmente que no lo he hecho a posta y no significa nada. Simple coincidencia. 

73º Juegos del Hambre (Todos los libros) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora