73º Juegos del Hambre (Todos los libros) TERMINADA

Setenta

El tiempo acaba pasando. Nos hemos llevado todas las horas muertas dentro del compartimento de la familia de Gale y hemos tratado de hacer que el tiempo pase más rápido hablando de cosas sin mucho sentido o importancia. 

Pero al final es el momento de descubrir que es eso a lo que llaman "reflexión familia" Cuando llegamos allí todos miramos nuestro brazo, lo próximo que tenemos es a las 18:30 cena. ¡Bien! Al menos eso sé lo que significa.

La familia de Gale entra y toman una mesa. Me despido de Gale con la mano y me quedo de pie junto a una de las paredes de hormigón tratando de camuflarme con el fondo. No tengo mucha suerte, la verdad. Una mujer del Distrito trece se acerca a mi. 

- Voy a llevarte a ver a Finnick- me explica la mujer mientras salimos del comedor dejando a todas las familias dentro con la otra representante del trece.- A partir de ahora pasarás tu tiempo de reflexión en familia con él- Asiento con la cabeza con desgana-. Ah, se me olvidava- dice estirando el brazo hacia mi.- Plutarch quería que te entregase esto. Te lo dejaste en el aerodeslizador. 

- Gracias- digo mientras tomo mi libreta y el bolígrafo que está enganchada a ella. Es la libreta que me dio Gala para tomar todas las notas durante el Vasallaje. La abro y me encuentro todas las notas dentro. La vuelvo a cerrar y fijo la mirada al frente. 

- Está sedado- explica la médica mientras me deja entrar en la habitación del hospital de Finnick. Al menos él no tiene que compartir con nadie de momento... pero a qué precio. 

Me siento en una silla entre la cama y la pared del fondo y observo durante unos minutos como gotea la morflina por la intravenosa. Plof, plof, plof... hacen las gotitas mientras caen. En la mano derecha Finnick sujeta con fuerza un trozo de cuerda. Suficiente para hacer nudos. 

La representante del Distrito trece vuelve cuando pasa casi la media hora y me escolta de nuevo hasta el comedor. Donde tiene lugar la cena. Hago cola y paso mi antebrazo derecho por un sensor como nos dijeron. Más adelante tenemos que esperar que una especie de ventana se abra a nosotros para coger la bandeja con comida y agua. Después camino hacia la mesa donde está sentado Gale con su familia... porque no conozco a nadie más en el lugar. Junto a ellos también están sentadas la madre y la hermana de Katniss... Prim, creo. 

- ¿Dónde te han llevado a ti?- pregunta Gale cuando me siento a su lado. 

- A ver a Finnick. Bueno, a verlo sedado en una cama- explico.- ¿Y vosotros? ¿Cómo ha sido? 

- La representante del trece ha ido de familia en familia preguntando qué hacíamos antes en el doce- comenta. 

- Van a asignarnos trabajos- se adelanta a decir Prim. Aunque no la conozco ella me explica de todas formas. Asiento en entendimiento mientras me meto la cena en la boca sin preguntar. No se puede tomar doble ración, tampoco puedes compartir tu comida. No puedes llevarte la comida fuera del comedor, ni puedes guardártela para después.  Es ahora o nunca. 

- Han dicho que mañana nos pondrán en nuestro horario del brazo que debemos hacer cada uno- comenta Hazelle. 

- A mi no me han preguntado nada...- digo extrañada. ¿Pretenden tenerme todo el día encerrada en mi compartimento? ¿O todo el día sentada junto a Finnick? 

- Mañana lo averiguaremos- dice Gale. 

Algunas personas han tenido problemas durante la comida porque han estado compartiendo. A mi eso no me parece que esté mal, pero como ya nos han dicho es ilegal... aunque eso no impide que algunos lo intenten. Después de la cena nos tocan las duchas. El baño de hombres está al lado del de mujeres. Gale y yo nos pasamos antes por el compartimento para coger los neceseres y podernos lavar los dientes. 

Dentro del baño una mujer me explica amablemente que primero tengo que pasar mi horario, que lleva incorporado algún tipo de código, por un sensor para que me de una toalla. Después tengo que ducharme en una de las pequeñas duchas con paredes de plástico. Solo disponemos de diez minutos de agua caliente para ducharnos, dentro de la ducha hay dispensadores de jabón, y como hoy es el primer día tardo más y para enjuagarme el jabón del pelo necesito seguir con el agua helada que hace que me castañeen los dientes. En estos momentos no sé si tener el pelo tan largo merece la pena. Después de la ducha tengo que echar la ropa de antes por una especie de tolva que la hace caer hasta las lavandería. Y pasar mi código por otro sensor para que este una ventana como la del comedor me entregue ropa limpia. Obviamente las botas las tengo que conservar. Cuando me pongo la ropa limpia tengo que tirar la toalla por otro tolva diferente. Y por fin, puedo ir a los lavabos para lavarme los dientes, obteniendo la pasta de dientes de otro expendedor junto al espejo. 

Cuando llego al compartimento de nuevo estoy bastante harta ya de todo el proceso de ducha. Vale está en el interior. 

- ¿Había mucha gente?- pregunta Gale cuando entro por la puerta. 

- Eh... no, pero he necesitado más de diez minutos para lavarme el pelo... el agua estaba helada- explico. Él suelta una carcajada y es contagiosa por lo que también me río. 

- Estoy seguro de que la próxima vez lo harás más rápido- dice cuando se calma. 

- No lo dudes- aseguro con una sonrisa-. Estoy dispuesta a no repetir el episodio de hoy en las duchas. 

- Voy a esperar fuera mientras te pones el pijama está vez- dice levantándose de la silla. Me hago a un lado y lo dejo pasar. 

Guardo la ropa limpia en el segundo cajón de mi cómoda junto con el neceser y la libreta que dejé a la vuelta de la cena. También está, por supuesto, la ropa y los zapatos del Capitolio. El camisón es gris y muy suelto. De hecho me queda un poco grande... o tal vez es así de ancho, no lo sé. Después le toca el turno a Gale y en el pasillo pego la espalda a la pared para dejar paso a la gente. Todos me miran, seguramente preguntándose qué hago fuera de mi compartimento en camisón de dormir.