Abro mi casillero para poder guardar mi libro de algebra, y saco el de mi siguiente clase que es el de química. Cierro la puerta de este y me sobre salto a verla a ella recostada aun lado viéndome sonriente.
—Ya te dijeron que te ves esplendida con esos jeans — su comentario me hace reír.
—No, pero gracias amor
—¿Cuánto falta para tu siguiente clase? — pregunta atrayéndome en un abrazo.
—Mmm unos veinte minutos — contesto.
—Eso es suficiente
No entiendo enseguida a lo que se refiere hasta que soy estampada a los casilleros y ella me aprisiona en un feroz beso. Hablándome sin palabras las inmensas ganas que tiene. No desperdicio el momento y le correspondo tomando su cabello intensificando el beso disfrutando de la sensación con ella.
—Yo también quiero un poco — la voz de Liam llega a interrumpirnos
Malia lo ve como estorbo a lo que le regala una hermosa vista de sus dedo de corazón.
—Ve a olerle el culo a Hayden mejor — le espeta ella.
Mi chica siempre sabe hacerme reír. Miro a Liam con burla.
—Lo siento guapo, tal vez la próxima.
—Oh mejor nunca — me corta Malia a la vez que gruñe hacia él.
Lo siguiente que me doy cuenta es que ella me esta cargando hacia el cuarto de limpieza que esta al lado donde nos encerramos siento torpes botando varias cosas hasta que ella vuelve a apresarme entre una pared y ella.
Sus manos pasan por mis pechos apretando acariciando mi cintura levantando la blusa un poco para poder tocar un poco de mi piel y baja para masajear entre mis piernas encima del jean,
—No estoy segura si quitártelo o no, te ves demasiado bien con él.
Sonrió y la vuelvo a besar.
Gimo ante la sensación de sus dedos jugando por mi clítoris por encima de la tela del pantalón. Ella siempre encuentra mi clítoris que logra enloquecerme.
—Tendré que cambiarme los pantis — confieso.
Eso a ella le encanta por que hace que enrolle mis piernas alrededor de ella sin interrumpir el beso en ningún momento.
Pasan los minutos supongo por que no sentí el pasar del tiempo. Ambas tocándonos una a la otra robándonos uno que otro gemido. Pero por un momento tengo que ver a mi reloj y al poner atención a la hora ya casi es hora para mi siguiente clase. Detengo sus besos en mi cuello y le hago saber que ya no hay tiempo. Ella hace un puchero.
—Supongo necesito mas de veinte minutos a solas contigo — dice dándome un ultimo beso.
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Y ahí el capítulo. ¿Les gusto? Espero no haber decepcionado.
Bien personitas chulas la pregunta del día y me voy.
