—Lo sé, pero esta es una gran oportunidad en mi vida entiende
—No te vayas, no me dejes corazón
Sus dos manos toman mi rostro pidiéndome a ruegos con sus ojos.
—Solo será cuatro años
Lo veo cerrar los ojos con fuerza, cuando los ojos azulados de mi novio me vuelven a ver hay enojo vibrando a todo poder.
—Esto no es justo, eres muy egoísta
—¿Qué?
—¡Joder!
Mi cuerpo se pone rígido mientras veo como el con un golpee rompe la mesa del comedor.
—¡Bien vete! A nadie le importa lo que hagas o no por mi esta bien no volver a verte.
Camina tomando su chaqueta
—No quieres decir eso — digo recordándome a mi misma que en este momento esta furioso.
—Oh claro que lo digo enserio, mi error fue querer enamorarme por primera vez cuando te vi, pero ahora que te largas se soluciona el problema.
Cuando veo sus intenciones de ir a la puerta le grito.
—¡Peter! — se detiene en seco —Si cruzas esa puerta la abras cagado todo, así que por favor no te vayas en este momento.
Lo oigo chistear dándome una mirada por el hombro hasta que se dirige decido saliendo y cerrando de un portazo.
Quedo parada en medio de la casa Hale digiriendo lo que acaba de pasar, la mesa rota, el saliendo mientras decía cada palabra hiriente que aniquilaba como cuchillos y su terquedad por tenerme aquí aun que eso significa renunciar a mi sueño.
Rompo a llorar con toda las fuerzas. El jamás me había gritado, jamás me había dicho nada parecido que fuera herirme de alguna manera. La manera que actuó hoy no tiene sentido.
Supongo que no todo lo bueno dura para siempre.
Luego de un rato derramando lagrimas me levanto y me obligo a salir de aquí, tomo con las manos temblorosas y los ojos llorosos las llaves y voy hacia mi carro, tengo que regresar a casa.
Al subirme el auto y arrancar comienza a llover, pasan varios minutos cuando mi teléfono suena en el asiento al lado, pero no me atrevo a mirarlo. Tengo la esperanza que sea el pero lo muy probablemente es que no.
Sigo conduciendo, las imágenes y sus palabras se repiten en mi mente y eso causa que lagrimas sigan cayendo por mis mejillas.
¿Fui egoísta? El sabe que esa universidad es la que siempre e querido. ¿Por qué debe ser egoísta?
Mi teléfono vuelve a sonar esta vez veo la pantalla, pero la llamada no es de Peter es mi madre. No le contesto y vuelvo la vista a la carretera. Apenas logro ver dos puntos de luz brillantes cuando siento el choque y todo comienza a dar vueltas y a doler.
De repente todo se apaga
.
.
.
Cuando vuelvo a despertar estoy de cabeza, el carro volteado y siento un inmenso dolor en mi abdomen. Miro hacia abajo temblorosa y vidrios están insertados en mí, reprimo un gemido de dolor. Veo el teléfono celular justo arriba de mi a lo que estiro el brazo para alcanzarlo. Cuando lo tomo llamo de inmediato a una ambulancia que logran averiguar mi localización. Solo me mantienen en espera y me repiten que no me duerma.
La verdad no creo que lleguen a tiempo... así que debo llamar a alguien mas primero.
Marco su numero y espero unos segundos cuando contesta.
—Hola ¿Ahora que pasa?
—Peter — mi voz sale en un sollozo lo que supongo lo altera.
—¿Qué pasa? — ahora su voz deja estar a la defensiva y se pone atento.
—Peter — repito su nombre disfrutando el sonido de su voz.
—Amor... ¿me estoy asustando que pasa?
—Un... accidente... de auto.
—¡¿Un qué?!
—Yo. quiero oír tu voz.
—Mierda ¡Amor dime donde estas!
—Amm... no se
—¿Cómo no nena necesito que te concentres okay? Dime que ves voy para allá.
—Ya llamé a una ambulancia
—¿Enserio? Que bueno bebe esa es mi chica ahora mantente despierta para mi y dime donde estas debo llegar a ti.
—Yo... solo quiero escuchar tu voz — me cuesta trabajo respirar.
—Está bien, está bien, hablemos, pero por favor dime donde estas necesito llegar a ti.
Mi cabeza duele, comienzo a escuchar un sonido molesto.
—Hey no te quedas callada nena, sigue hablándome.
—¿Peter Hale esta nervioso? — quiero reírme, pero duele mucho solo intentarlo.
—Si joder claro que, si estoy como loco, por favor quédate conmigo.
—No puedo
—Claro que puedes, te apoyare en ese viaje iré contigo maldita sea, me iré contigo esos cuatro años, pero no te vayas a un lugar donde no pueda alcanzarte ahora mismo.
Siento tibio mi corazón a la vez que duele, sonrió aun que se que él no puede ver.
—Peter
—Dime amor
—Te amo
—Yo te amo mas
—Cuídate mucho
—No te despidas de mi te lo prohibido
—Tan amoroso como siempre.
El dolor de cabeza vuelve y empiezo a ver puntos negros.
—¿T/N? ¡T/N! Amor si ves una luz blanca huye a otro lado ¿entiendes? No puedo vivir sin ti en este mundo.
—Yo...
El celular resbala de mis manos y cae al techo de auto. Puedo escuchar el sonido de una ambulancia y los gritos de mi novio por el celular.
—¡¡Amor!! ¡Háblame por favor!
Quiero moverme, quiero poder decir algo. Pero todo se vuelve cada vez mas negro. No tengo otra salida que dejarme abrazar por la muerte.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
