Asiento mientras el me toca la frente, revisando mi temperatura. Parece irritado al confirmar que no ha bajado mucho.
—No me mientas amor.
—Pero no miento — le confirmo sonriéndole — me siento mejor de lo que me he sentido durante este par de meses, ya no me siento sola, siento que la calidad volvió a mi vida porque tú has vuelto.
Tomo su rostro mientras me mira a los ojos, parece que un destello de tristeza aparece en su mirada.
—Amor, no sabes cómo lo siento
—No hay que lamentar nada — le aseguro —Lo que paso entre nosotros tenia que pasar, para que llegáramos a esto.
—Pero, pasamos por mucho dolor — me acaricia el cabello —no sabes lo doloroso que es obligarme a alejarme de ti. Simplemente pensé que era lo mejor
—Lo era, necesitábamos estar separados.
—Pero eso no volverá a ocurrir. Nunca mas
Le sonrió.
—Nunca mas
Me besa pasando sus manos por mi cuerpo encendiendo otra vez llama, besos húmedos y siento que quiero explotar y lanzarme a el de nuevo como fierra en celo pero Derek no lo permite.
—Amor
—¿Amor que?
—Tienes fiebre, primero me encargare de eso
—Solo un par de meses y ya te volviste aguafiestas
—Sigo teniendo la necesidades de castigarte así que si no quieres azotes cuando estes mejor compórtate para mí.
—¿Es amenaza o premio?
El ríe
—Veo muchos castigos en tu futuro
—¿Muchos?
—Muchos — asegura
—Que bueno que tendremos mucho tiempo juntos
—Toda la vida.
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