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-De acuerdo, procederemos de la siguiente manera- escuchó al doctor decir luego de unos cuantos minutos de preguntas sin respuesta que se había planteado en su mente, las cuales lo había tenido alejado de la realidad el último tramo de la conversación.

Para cuando Guillermo logró que su cabeza dejase de recrear la imagen de Samuel de adolescente, Amelia y José estaban con lágrimas en sus ojos y la mirada fija en el profesional frente a ellos, quien había escrito más de dos hojas que se esparcían sobre el escritorio. Miró a sus compañeros y, al ver lo heridos que se mostraban, tomó una gran bocanada de aire y devolvió la vista al que hablaba, consciente de que lo que diría sería de vital importancia para lo que vendría ahora.

Debía mantenerse fuerte ya no solo por Samuel sino también por sus suegros.

-Primero hablaré con el doctor Mars y, si todos sus valores son adecuados, trasladaremos al paciente a una habitación normal para comenzar con el tratamiento en un lugar tranquilo y acorde. Teniendo en cuenta lo que me contaron, puede que pasen un par de días antes de que quiera hablar conmigo o con cualquier profesional, pero aun así no atrasaré su tratamiento. Comenzaremos con los antidepresivos inmediatamente y controlaremos sus efectos de manera constante- los tres asintieron, aunque el menor tardó un par de segundos más en hacerlo –lo mismo con los ansiolíticos. Seguiremos con la línea que mencionaron ustedes y las mismas dosis para estabilizarlo e iremos aumentando o disminuyendo el grado de las pastillas según progresemos- releyó sus anotaciones y continuó –Por ahora, no tendrá permitido recibir visitas a menos que él lo solicite, ¿de acuerdo?- los tres repitieron sus movimientos –Dejaré sentado que cualquiera de ustedes puede ingresar a la habitación en cualquier momento del día si el paciente lo solicita y con ellos descartaremos el asunto del horario de visita. Por último...- revisó superficialmente las hojas del escritorio y asintió, confirmando sus próximas palabras –les sugiero que evalúen la posibilidad de internarlo en un hospital psiquiátrico- Guillermo abrió los ojos con sorpresa –Sé que no es una situación sencilla ni agradable para nadie, pero Samuel realmente necesitará todo el apoyo y contención profesional que se le pueda otorgar cuando salga de aquí.

Deathbeds [Wigetta]Where stories live. Discover now