Love is More Than a Word // Traducción Español

8. Los viejos y nuevos odios (66)

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Lao Tao y Tao Mo condujeron hasta el río.

Hao Guo Zi y Sang Xiaotu caminaban a lo largo del río con aire decaído, cuando vieron el carruaje, se sorprendieron al principio y luego vitorearon.

Lao Tao detuvo el carruaje.

Tao Mo esperó a que se acercaran y dijo con voz llena de disculpas: "Han esperado mucho tiempo".

Hao Guozi dijo con impaciencia: "¡Joven maestro! ¿Dónde han ido Gu She y tú? Los buscamos tanto, que pensamos que les había pasado algo".

Sang Xiaotu le siguió, y aunque no dijo nada, su cara estaba llena de preocupación.

Lao Tao agitó la mano: "Algo pasó, hablemos de ello cuando volvamos".

Hao Guozi miró la cara de Tao Mo y Lao Tao parecían preocupados, sin atreverse a hacer más preguntas tiró de Sang Xiaotu hacia el carruaje.

Con Hao Guozi y Sang Xiaotu conduciendo, Tao Mo y Lao Tao volvieron naturalmente al carruaje.

En el camino, Tao Mo ya le había contado a Lao Tao sobre el ataque originalmente, pero en ese momento tenía prisa y no tuvo tiempo de pensar en ello, pero sólo ahora Lao Tao tuvo tiempo de recapacitar sobre el asunto: "¿De qué iba vestido el asesino?"

Tao Mo pensó por un momento: "Usando ropa ordinaria, su rostro estaba cubierto con tela".

Lao Tao: "Fue a plena luz día, así que no creo que lleve ropa de noche".

Tao Mo: "Ah, todavía no sé quién es ese hombre que salió y nos salvó, ¿cómo estará ahora?"

Los ojos del Lao Tao parpadearon y dijo sin entusiasmo: "Ese hombre, tal vez, sea uno de mis hombres".

Tao Mo lo miró aturdido. El aspecto de Lao Tao no había cambiado, pero desde que había llegado al condado vecino, sentía que se volvía cada vez más extraño. Ya sea el arte marcial de romper un cuenco con una palma, o los hombres de los que hablaba.

Cuando Lao Tao vio tal expresión en su rostro, suspiró tranquilamente y dijo: "No te lo ocultaré, de hecho, el viejo maestro del que hablaba antes es Ming Zun de la Secta Demoníaca".

"¿Secta Demoníaca?", Tao Mo se sobresaltó.

Aunque sabía muy poco sobre el mundo, la palabra "Secta Demoníaca" no era nueva para él. En la actualidad, el culto al diablo estaba en auge, así que ¿en qué lugar de las casas de té y los restaurantes no lo mencionaban los narradores? Nunca se lo había tomado en serio, pero no quería que Lao Tao, que llevaba dos años con él, fuera un miembro de la Secta Demoníaca. "Entonces, ¿qué pasa con Mu Chun?"

Lao Tao: "Su apellido original es Duanmu, su nombre es Huichun, y es de la nueva generación de ancianos de la Secta Demoníaca".

El aliento de Tao Mo era ligeramente entrecortado, aparentemente incapaz de aceptarlo por un momento: "Entonces tú..."

Lao Tao: "Mi nombre original es Lu Qiyuan, y era un anciano de la Secta Demoníaca. Si no fuera por mi...", hizo una pausa. Esa parte del pasado le resultaba insoportable de recordar.

Aunque Ming Zun era una persona tranquila y no le importaba lo que hacía Lao Tao, lo que había hecho que la Secta Demoníaca sufriera un gran daño en su vitalidad e innumerables daños en sus discípulos. Lamentablemente, su odio a sí mismo era inútil, y sólo podía hacer lo mejor para servir a la Secta Demoníaca. Pero ahora, después de haber regresado a esta, no había hecho nada por ellos, sino que había estado utilizando a sus hombres para que trabajaran para él.