Mi Dulce Niña (NaruHina)

CAPÍTULO 77

Sabía que algo como esto pasaría. Debí alejarte aún más de él. Pero creí que, si se iba lejos de ti, estos estúpidos sentimientos que sientes por él desaparecerían. Eres tan débil en comparación con las demás. Ellas dieron su vida por lograr la paz de este mundo ¿Y tú? Casi mueres por salvar solo a una villa que no tiene nada de importancia. En esta guerra hay sacrificios y debes aprender a asumir.

Es hora de que intervenga.

Hinata tosió cuando la falta de aire fue demasiada, pero al menos seguía viva, aunque lo que más le preocupaba eran los demás y sus hermanos.

— Hinata-sama ¿se encuentra bien?

Le hablo Yuki preocupada de haberla tomado con brusquedad y haberla herido sin que esa hubiese sido su intención.

Pero Hinata no pudo responder porque su tos no paró, incluso esta estaba acompañada de sangre, haciendo que Yuki entrara en pánico, pero no tanto como lo hizo cuando la miró completamente.

— ¡Hinata-sama resista!

En cambio, Hinata, intentaba sostenerse con sus manos para recuperar el aire, pero con cada movimiento que sacudía su cuerpo, parecía que este se encontraba en llamas. No podía siquiera gritar porque debía guardar sus pocas fuerzas para seguir, además no quería dar su localización a su enemigo tan fácilmente.

Miró a sus manos y notó como la piel de esta, parecía estar cortada en varias partes, y que sus poros en vez de sudor destilaban sangre.

— Da...dame un informe...dame un informe Yuki

Pidió sin todavía poder levantarse y con el corazón agitado de lo que podía haber pasado.

— Pero Hinata-sama...

— Solo hazlo, Yuki.

Exigió sin darle pie a que la cuestionara más. Yuki asintió sin poder apartar la preocupación de ver a su ama en ese estado. Y más por las noticias que le daría.

— Tsunade-sama ayudo en respaldar a otros civiles. Su hermana se encuentra bien. Jiraiya-sama está siendo atendido por uno de nuestros sanadores, hasta ahora se encuentra estable. También Itachi-san está ayudando a sacar de los escombros a los nuestros... -Yuki callo un momento para no revelar la otra noticia aún. - Toda la población fue protegida del ataque y los que no están con vida fue antes de este. Pero Hinata-sama, hay alguien murió...alguien cercano a usted.

La peli negra fue entonces cuando por fin pudo elevar su cabeza para hacer frente a Yuki, quien le miraba con ojos compasivos.

— No...por favor no. ­-Sus lágrimas no se hicieron esperar y salieron causándole una quemazón por sus mejillas y sus ojos, pero el dolor no era nada comparado con la opresión que estaba en su pecho. - ¿Quién?

— Kakashi-san

Hinata tomo con fuerza la tierra bajos sus manos antes de que un fuerte sollozo saliera de sus labios. Sus lágrimas no pararon al igual que el sonido de tristeza que no podía dejar de emitir.

— Kakashi-nichan

Y es que ella solo pensaba en algo.

Falle. Falle. ¿Por qué tuve que fallar?

Golpeo la tierra con fuerza, pero sin causar daño en esta porque ya no podía usar demasiado chakra a esas alturas. La mitad de sus invocaciones habían desaparecido una vez que las personas estuvieron a salvo y los demás ayudaban a sacar a varios de los escombros.

Y por eso, que, sin saber cómo paso, fue que pudo mirar a través de uno de los ojos de sus zorros el cuerpo de Kakashi. Este estaba enterrado en la tierra, o al menos medio cuerpo lo estaba. Y eso hizo que su llanto fuese aún más fuerte. No había llegado a tiempo y eso la estaba carcomiendo por dentro.