CAPÍTULO 57

1.7K 142 14
                                    

Sentía como la respiración de su hermana seguía en armonía. Era de las pocas cosas en las que podía concentrarse para mantenerse algo cuerda, aunque no estaba funcionando.

La dejo aun lado, intentando no despertarla. Ya casi amanecía y no había podido conciliar el sueño en ningún momento. Los recuerdos no la dejaron toda la noche.

Aun cansada por los días trabajados en el hospital y el subir y bajar de sus emociones, decidió irse a su casa. Era el único lugar donde estaba segura que se sentiría bien.

Salió con cuidado del lugar sin que nadie se diera cuenta, pero al aterrizar se sintió un poco mareada, y sabía que era el agotamiento tanto físico como mental.

Así que decidió solo correr un poco hasta llegar al bosque que la conduciría a su casa.

Sus pensamientos estaban inundados de ciertos ojos azules, que intentaba con insistencia alejarlos de ellos, para reemplazarlos por la manera en que tendría que hablar con su papá para que la considerara una vez más como del clan.

Pero entonces se detuvo.

— ¿Qué es lo que quieren?

Dijo sin mirar atrás. Los había sentido hacia mas de unos minutos cuando entró en el bosque. Pero pensó que las trampas los detendrían, pero al ver que no caían en ninguna se dio cuenta que no eran ninjas normales.

No recibió respuesta y activo su Byakugan viendo que ambos salían de los árboles. Se extraño cuando estos venían con unas capas negras con imágenes de nubes rojas. Uno con una guadaña de tres filos, mientras el otro, cubría su rostro, de las mejillas hacia abajo.

Les miro intentando ver de dónde conocía el chakra de uno de ellos, porque por su apariencia, era claro que no recordaba haberlos visto antes.. entonces abrió sus ojos al ver de donde creía conocer ese chakra.

— El ninja de la mañana.

­— Por Jashin, la niña no solo supo quien era, si no que me descubrió en un segundo. Es impresionante ¿no Kakuzo?

Dijo el de la hoz burlón. Hinata permanecía con su Byakugan observandolos y fue cuando miró que realmente no eran ninjas comunes.

— Tal vez por eso Orochimaru la quiere.

Aseguro el otro en tono aburrido, pero haciendo abrir los ojos perlas con preocupación, por la mención del Sannin que la había atacado años atrás.

— quizás. Aunque no nos quiso decir bien el porqué, solo que llevarla era clave para la misión. Y si pain dijo que si, no veo porqué no hacerlo.

­— Cállate de una vez y capturala.

Hablo kakuzo molesto.

— Pero que amargado. Esta bien. Terminemos con esto. —estuvo de acuerdo el peliblanco acercándose aburrido a hinata. — Niña, te lo pondré fácil. Jashin sabe que soy bondadoso, así que eres alguien con suerte. O te vienes con nosotros por las buenas o te iras con nosotros por la mala. Creeme, no será bueno la segunda opción.

Hinata les miró como si pensara en su oferta, y entonces ella levantó sus manos, dando una clara señal de rendirse.

— Bien, eres inteligente niña.

Dijo Hidan acercándose a ella para capturarla, pero entonces, bajó sus manos dando un fuerte aplauso y haciendo salir una ráfaga de aire helado y furioso de sus manos, que hicieron retroceder al peliblanco y provocando cortes en parte de su capa y mejillas.

— Si que eres estúpida.

— No se quienes sean, pero les pidos, me dejen en paz. No soy lo que buscan. —aseguró Hinata aun tranquila, pero en guardia con su Byakugan activado.— y si lo fuese, no me pienso ir con ustedes

Mi Dulce Niña (NaruHina)Where stories live. Discover now