Mi Dulce Niña (NaruHina)

CAPÍTULO 48

― No lo encuentro, tendré que esperar a que vuelva Jiraiya.

Tsunade le dijo a Itachi, quien estaba en el comedor esperando que ella saliera de su biblioteca. Hinata estaba dormida y fue cuando Itachi aprovechó para decirle que había pasado esa tarde.

― Entonces tendremos que esperar.

― Eso parece. Pero si estaba dudosa por aquellas invocaciones, ahora estoy segura de que son peligrosas.

― De hecho... ―Itachi recordó― ...aquella entidad me dijo que, si queríamos su confianza, debíamos ayudar a Hinata a convertirse en alguien fuerte.

― ¿Alguien fuerte? ―Se preguntó Tsunade dudosa. Pero a la vez no era tampoco muy diferente a su plan original. Y si esa era la prueba que necesitaban, para ganarse la confianza de lo que sea que estaba dentro de Hinata, lo aceptaría. ― bien. Podemos con eso.

― ¿No le parece extraño que pida específicamente eso?

Cuestiono Itachi confuso.

― Claro. Pero aun así es un beneficio doble. Si entrena ella y se fortalece, nada malo le pasará porque estará en condición de defenderse.

―Sabes bien, que no es necesario...

― ...que ella esta protegida... lo sé, pero no me pienso a arriesgar. No pienso perder a nadie más otra vez. Y menos a ella. Todo se perderá si ella muere.

― Lo sé.

Dijo el Uchiha sabiendo que después de todo lo que habían perdido y sufrido, el ultimo pilar de ellos era Hinata. Ya fuese como hermana, nieta o como algo más, todos estaban para defender y protegerla...pero como todo... no podían confirmar su seguridad.

――

Hinata había salido por unas cosas a la que ahora era su nueva casa. Caminaba tranquila junto a Tonton mientras una ligera lluvia caía en la aldea. El cerdito permanecía pegado a ella desde el momento en que la conoció y eso le extrañaba, pero no se quejaba. Le agradaba su compañía.

Llego al lugar y se quedo parada un momento mirando la casa. Las luces estaban apagadas y el lugar estaba silencioso a excepción de la lluvia.

― Oing Oing

­― Si. Vayamos, hace algo de frio ¿No?

Intento calmarse. Era la segunda vez que volvía desde que había recuperado la memoria. Por lo que mirar el lugar después de saber que había pasado tanto le provocaba mil emociones.

Avanzo hasta la casa abriéndola y sintiendo menos frio el lugar. A pesar de no haber estado en más de dos días fuera, se sentía cálido.

Sin extrañarse cerro el paraguas, y fue por mas ropa. Tsunade le había insistido que se quedara mas tiempo en su casa. Aunque ella había dicho que estaba bien, pero Tsunade le había dicho que ella estaría mas tranquila.

Por lo que solo planeaba quedarse una semana más, antes de aventurarse a quedarse por fin en esa casa.

― Oing, Oing.

― Deja enciendo la chimenea. Limpiare un poco y guardare unas cosas.

Aseguro Hinata abriendo la puerta para ir por leña, pero la luz que se filtró, hizo que notara que ya había leña lista en la chimenea.

Extrañada, cerro la puerta y se acerco con cuidado a donde el montón de madera, estaba específicamente acomodada a lado de la chimenea. se agacho viendo que la madera estaba perfectamente seca.

Movió sus ojos a la mesa de la sala tras de ella y noto una caja de fósforos.

Yo no puse eso ahí.