CAPÍTULO 78

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— Dios mío ¡Tsunade-sama!

Grito Itachi mientras se agachaba para ver el estado de la Sannin. Se miraba un poco envejecida, y sabia que era por el uso de chakra. Había visto como sus invocaciones habían ayudado a proteger a las personas de Konoha. Y es que, si no hubiese sido por Hinata, quien sabe en qué estado se encontraría la Hokage.

— Se repondrá pronto Itachi-sama. -Aseguro Shizune al ver la preocupación en el Uchiha. – Pero por favor díganos ¿Dónde está Jiraiya-sama?

— El esta bien. Fue protegido también y Katsuyu junto a unos zorros, lo mantienen estable. No deben preocuparse.

— El chakra...el chakra de Kakashi ¿Por qué...?

Intento preguntar Tsunade, pero entonces miro como Itachi solo cerro los ojos y negó.

— Se enfrento a Pain para sacar información de el y usarla en su contra. Descubrió que tiene un lapso, cinco segundos. En cinco segundos Pain no puede usar su poder. Su sacrificio no debe ser en balde, debemos usarlo para ganar esto.

Tsunade sintió como una lagrima caer de sus ojos.

— Ese niño imprudente, siempre queriendo ser el héroe...pero no debía ser de esta manera. Hinata no se lo perdonara.

— Pero sabemos que lo hizo por ella. Nuestro sueño es que ella viva la vida que nosotros no pudimos. Y prometo que haremos lo posible para que eso pase. Pero antes, iré a ayudar a Naruto-kun, pero ¿Usted estará bien?

— Ve, yo soy la Hokage ¿Recuerdas? Dame unos minutos, e iré personalmente a matar a Pain.

— Entiendo. Shizune, te la encargo.

— Hermano.

Miro detrás viendo a Sasuke acercar a ellos. Se miraba sin herida, a excepción de que alguna que otra parte de su ropa estaba rota y sucia.

— Que bueno que estas bien.

Aseguro Itachi abrazándolo.

— Si, un zorro me envolvió de repente. Eso me protegió del desastre, pero, aun así, eso no importa ¿Qué está pasando?

— Es difícil de explicar, te lo contare luego, ahora debo irme.

— iré contigo.

— Sasuke por favor.

— No, déjame ayudar, no me puedo quedar con las manos cruzadas. Papá y los otros están ayudando a los civiles a encontrar un refugio. Yo quiero ayudarte a ti.

Itachi lo pensó y solo asintió.

— Tu sacaras a Hinata y la llevaras a un lugar seguro, yo me quedare a pelear, si no podrás acatar esa orden dímelo ahora y vete.

Sasuke no dijo nada y solo asintió.

— Bien, vamos.

— Hinata fue la que invoco a los zorros ¿Verdad?

Pregunto Sasuke mientras corrían a donde se supone era el centro de Konoha, aunque ahora solo era un inmenso cráter.

— Si, ella nos dio su apoyo, por ella llevamos ventaja, aunque nadie se esperó que algo como esto sucediera.

— Se debe necesitar mucho poder para lograr algo así.

Itachi lo miro de reojo, y es que no noto envidia ni coraje en su tono. Su hermano menor siempre había querido ser mas fuerte que todos, pero ahora, parecía triste, incluso tranquilo al ver que debió ser protegido.

— Ella no es alguien común Sasuke, a estas alturas debiste darte cuenta.

— Si. Ahora me doy cuenta.

Mi Dulce Niña (NaruHina)Where stories live. Discover now