Mi Dulce Niña (NaruHina)

CAPÍTULO 39

Sai saco un pergamino de su espalda junto a un pincel. Comenzó mover el pincel sobre el papel con rapidez antes de que lo extendiera e hiciera unos sellos.

― Arte ninja: imitación de imagen súper bestias

Del pergamino salieron quimeras en blanco y negro. Hinata abrió los ojos sorprendida. La técnica de Sai era increíble.

―Terminemos lo antes posible.

Dijo Sai dejando que sus bestias corrieran hacia Hinata, pero esta se mantuvo firme en su lugar esperándolos haciendo que la multitud se preguntara qué haría o si se había quedado paralizada.

― ¿Qué hace?

Pregunto Sasuke.

― Analiza.

Dijo naruto sabiendo que Hinata estaba pensando y viendo los puntos débiles de Sai.

― Látigo de hielo.

Hinata alzo su mano mandando su ataque y deshaciendo a tres de las quimeras y dejando libre dos. Estas la rodearon atacando de ambos lados. Hinata brinco antes de que la impactaran y cayendo nuevamente con su puño de hielo, activado no en una, sino en sus dos manos, impactando en la cabeza de ambas bestias y deshaciéndolos al instantes.

Miro hacia Sai viendo como este aún mantenía la distancia.

Hinata decidió usar unas de las técnicas que había aprendido con Jiraiya. Al parecer Sai era peligroso por lo que debía mantener también una distancia de él.

― Eres fuerte Hinata-chan. ―le halago Sai― Pero no lo suficiente.

La tinta debajo de Hinata comenzó a moverse y tomar forma de varias serpientes, las cuales la ataron al piso evitando que se moviera e inmovilizando sus brazos.

― ¿Qué?

― Mi tinta puede tomar diversas formas. Es perfecta en ataque y espionaje. ―Le explico mientras dibujaba con gran velocidad en su pergamino.― Arte ninja: Secuencia de gorriones.

Varios pájaros de tinta fueron directo a ella. Estaba atada de manos y pies por lo que le resulto difícil moverse.

Piensa.

Se dijo antes de abrir sus ojos y concentrar el chakra en sus brazos. No había practicado la fuerza bruta y quedarse herida era mala idea pero no se le ocurría otra manera.

― ¡Aaa!

Grito extendiendo sus brazos y escapando del ataque de aquellas serpientes saltando antes de realizar sus sellos.

Sai no se miraba preocupado, aunque estuviera libre sus gorriones estaba sobre ella.

― ¡Elemento hielo: lotos efímeros!

Varias flores de loto flotaron frente a Hinata mientras caía firme en el suelo antes de crear su escudo de hielo. Los lotos flotaron alrededor haciendo que las aves de Sai, explotaran cuando hicieron contacto.

Cuando las explosiones cesaron, Hinata supo que la batalla había terminado. Su ataque debió lastimarlo lo suficiente para dejarlo fuera de combate. Los pedazos de hielo que explotaron debieron herirlo.

Pero el sonido de un ave la había tomado por sorpresa. Miro arriba de ella viendo como del humo, salía una gran ave blanca.

― Creo que eres más fuerte de lo que pensé.

Hinata retrocedió mientras lanzaba otra cuchilla de hielo, pero fue esquivada por Sai. Iba directo a ella por lo que se apresuró a atacar de nuevo.