Regreso al campo

Capítulo 59: La verdad

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Capítulo 59: La verdad

Qian entendió que He Tian no quería llamar la atención, pero ella simplemente no podía controlar su ira, "¿Qué quieren decir con que Ling Ge'er se ha casado con una buena familia, por lo que todos lo quieren mucho y ahora él es una persona de estatus y si los ancianos que lo criaron hubieran sido cambiados a otras personas, los ancianos también habrían podido disfrutar de la bendición? ¿Significa que lo he tratado mal? Lo he criado con esmero. ¿De qué manera lo he agraviado?" 

"Vamos, solamente es hablar, solo necesitas escucharlo e ignorarlo. ¿Por qué tienes que ser tan seria?" La cabeza de He Tian ahora estaba hecha un lío. Era un hombre con mucho orgullo. ¡Pero se había casado con una mujer que era una desgracia para él, incluso los más jóvenes (generación) no le dieron ninguna cara, causando un incidente tras otro, pisando su rostro sin cesar! 

"¡Humph! ¡Si hubiera sabido que criaría a un lobo de ojos blancos, debería haberlo echado de la casa cuando mamá falleció y luego habría ahorrado algo de comida!" Estaba tan molesta, viéndolo mejorar cada vez más, sin que su familia pudiera obtener nada de la gloria, ¿por qué fue tan suave? ¡Si su condición no hubiera sido tan poco confiable, no habrían casado a He Zhen como una pequeña esposa(concubina), lo que causó que ahora se los despreciara! 

Cuando ella dijo esto, He Tian se molestó mucho. ¿De qué servía hablar de algo que ya había sucedido? Si hubiera sabido tanto, su familia no estarían en la situación en la que se encontraban. Él la miró molesto, "¡Basta! Si no hubieras cometido un error en ese entonces. ¡No habría nacido prematuramente y no habría pasado tanta mierda ahora!"

Al escucharlo mencionar esto, Qian se emocionó un poco: "No fue mi intención. ¡Solo le di un empujón suave, no se quedó quieta!" 

"Gritaste muy fuerte. ¿Quieres que todos te escuchen?" He Tian miró a su alrededor, después de ver que no había nadie, se volvió hacia ella y la reprendió: "¡Si no te avergüenzas de ti, yo me avergüenzo!" 

Qian frunció los labios y cedió: "Está bien, está bien, está bien, no diré nada más, ¿de acuerdo? Te escucharé, terminemos nuestra comida y luego nos vamos, ¡pretenderé que no escucho nada más!" 

Al ver que ya no era terca, He Tian también se calmó un poco y miró a su alrededor nuevamente, diciendo: "¡Vamos!" 

El sonido de sus pasos se desvaneció. No pasó mucho tiempo antes de que desaparecieran entre los sonidos un tanto ruidosos de la gente en el patio delantero, para nunca más ser escuchados. 

He Ling se acurrucó en un rincón. Sus brazos se envolvieron con fuerza alrededor de sí mismo, sus ojos muy abiertos y rojos, lágrimas de cristal rodando de sus ojos, una por una como cuentas rotas. Se mordió los labios hasta la muerte, sin permitirse hacer ningún sonido. 

Pensó en los días en que su padre yacía en la cama, sin poder levantarse, y decía innumerables veces lo arrepentido que se había sentido cuando abrió la puerta y vio a su madre tendida en la nieve con el vestido manchado de sangre. No debería haberla dejado quedarse sola en casa, dejarla caer y dejarla morir. 

Pero esta fue la historia que hizo llorar al joven He Ling tantas veces con él en el pasado. ¡La tragedia que pensaron que era un accidente fue el resultado de las manos de su tía mayor! 

Ella había matado a su madre. Ella también mató indirectamente a su padre. Cada vez que miraba su rostro, que se parecía al de su madre, ¿no sentía ni un poco de culpa? ¿Por qué todavía puede mantener la cabeza en alto, justificarlo y regañarlo con confianza por ser una calamidad para su padre y su madre?