Capítulo 85: Escapar

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Capítulo 85: Escapar


Apretando los dientes, He Ling sacó el corcho de la botella dentro de su manga. Echó un vistazo a los tres hombres de negro que descansaban con los ojos cerrados. Con un movimiento de su mano, dispersó todo el polvo, extendiendo una niebla de polvo. 

Mientras lo hacía, los hombres de negro ya habían abierto los ojos. Sin embargo, ya estaban cubiertos de polvo y ni siquiera podían levantar las manos antes de perder el conocimiento, cayendo al suelo. 

He Ling tiró la botella de medicina. Cubrió su corazón latiendo, dio un largo suspiro de alivio y, al mismo tiempo, también lamentó en su corazón que si solo hubiera recordado esta botella de medicina antes, tal vez no habría sido secuestrado. 

Su Esposo se lo había puesto en el cuerpo después del accidente con He Fu por segunda vez, pero no lo había usado desde entonces, por lo que lo había olvidado. Sin embargo, no esperaba que fuera útil esta vez. 

Se levantó del suelo después de haberse calmado. Al pasar junto a esas personas, salió de la cueva y se enfrentó a la nieve ventosa. Ahora, tenía que alejarse de aquí lo antes posible, para que no lo volvieran a atrapar cuando se despertaran. 

Lo habían llevado por el camino durante una o dos horas. Esos varios hombres se movían rápido, por lo que ya estaba lejos del collado donde se habían detenido para descansar. Sería imposible para él caminar de regreso allí. Tampoco creía que su Esposo y los demás se quedarían allí. 

He Ling se subió la capucha de su pesada capa sobre la cabeza para proteger su rostro de la nieve y el viento. Primero tenía que encontrar un lugar más apartado para esconderse, esperando hasta que fuera seguro, luego buscaría un pueblo cercano. En un lugar así, podría esperar y encontrar a su esposo y a los demás. 

Después de varias horas de fuertes nevadas, una gruesa capa había caído al suelo y cada paso que daba era duro pero no podía parar. Se congelaría hasta morir en este lugar si no lo encontraran. 

Extendió la mano y tocó su abultado vientre, apretando más su capa para protegerlo con más fuerza. Había hecho sufrir al niño en su vientre, teniendo que soportar dificultades junto con él. En el futuro, si el niño naciera más tarde, definitivamente lo amaría y lo adoraría bien. 

El cuerpo de He Ling gradualmente se puso rígido en el clima frío. Se llevó sus dedos terriblemente dolorosos a los labios y respiró, frotándose las manos para darse un poco de calor. 

Además del cielo nocturno oscuro y la vasta extensión de nieve blanca, no podía ver nada más que esto en su visión. No pudo evitar sentirse un poco desesperado en su corazón. Si no pudiera encontrar un lugar para quedarse, ¿realmente moriría aquí? Por un momento, no supo si estaba bien o mal que escapara. Pero si no escapaba y realmente era utilizado como moneda de cambio para obligar a su esposo, entonces preferiría morir aquí ahora. 

Justo en el momento en que estaba lleno de frustración y ansiedad, el sonido de un caballo relinchando vino de muy lejos en la nieve ventosa. Se congeló y miró a su alrededor presa del pánico, pero no pudo encontrar ningún lugar para esconderse. No sabía quién venía. Si fuera alguien que albergara malas intenciones, ¿no estaría en mayor peligro? 

Con el sonido de los cascos de los caballos acercándose gradualmente a él, He Ling se cubrió el vientre y retrocedió unos pasos. La espesa nieve acumulada lo hizo balancearse y casi caer. Cuando levantó la vista de nuevo, pudo ver claramente la apariencia del caballo. En ese momento, sus ojos se iluminaron, "¿Mu Yan?" 

Regreso al campoWhere stories live. Discover now