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ℌ𝔬𝔯𝔞𝔠𝔢 𝔖𝔩𝔲𝔤𝔥𝔬𝔯𝔫 𝔯𝔢𝔞𝔩𝔪𝔢𝔫𝔱𝔢 𝔢𝔯𝔞 un amante de las fiestas y reuniones, realmente parecía disfrutar organizarlas en cada situación que pudiera.
Al ser navidad, al profesor de pociones se le ocurrió la maravillosa idea de hacer una fiesta de navidad, a la que todos los miembros de su Slug-Club podían asistir junto a un acompañante.
Y allí se dirigía ______ Lestrange, en un vestido elegante, un collar de perlas y sin un acompañante. Draco caminaba con ella, pero no era su acompañante, pues ni siquiera había sido invitado. Sólo le daba ciertas instrucciones a su prima antes de perderse en el pasillo.
-Recuerda, por amor a Merlín trata de verte normal, debes prestar mucha atención a lo que sea que ocurra en ese lugar- instruyó, acomodando los botones de su traje.
-Ya sé, y tú recuerda ser cuidadoso, que nadie te vea- advirtió ella, terminando de ponerse su pulsera que combinaba con su collar -¿Recuerdas el hechizo para repararlo?
-Sí, Harmonea Nectere Passus- suspiró el rubio, tanteando en su bolsillo, pero de repente su semblante empalideció. -Maldición, la manzana- dijo en un murmullo.
-Yo la traje- suspiró _____, rebuscando en su bolso y sacando una manzana verde que le entregó a Draco -Algo me decía que la olvidarías.
-Gracias- Draco suspiró, no muy contento de tener que agradecer.
-Bueno, es mejor que vayas ya. Suerte, Draco- concluyó con un aire de tristeza.
-Adiós.
Y se fue. La idea era arreglar el gabinete desvanecedor que se encontraba en el cuarto de requerimientos, esto con la intención de que ciertos mortífagos pudieran acceder a Hogwarts desde Borgin & Burkes. Draco y _____ se habían pasado todo el año escolar aprendiendo a conjurar el hechizo para reparar el gabinete, y ahora le tocaba a Draco probarlo una vez más, ya que en ocasiones anteriores no habían logrado arreglarlo bien, lo cual era muy peligroso.
Con la mente aturdida por el estrés y el miedo de lo que ocurriría si el gabinete finalmente funcionaba, la adolescente llegó a la fiesta de Slughorn, aquel sentimiento jamás dejando su interior, pero se vio forzada a sonreír para ocultarlo.
-Buenas noches- saludó cortésmente a todos los que se encontró en aquel salón tan bien iluminado y decorado. Estaba realmente lleno.
-_____- la inconfundible voz del profesor Slughorn llamó su nombre, a lo que ella se dio la vuelta para mirarlo -Querida, me alegra que hayas podido venir.
-Buenas noches, señor- sonrió ella de manera educada -Gracias por la invitación, todo se ve espléndido.
-Qué bueno, linda, qué bueno- rió el mayor, dándole una palmadita en el hombro a _____ para luego distraerse con más invitados.
