Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
𝔈𝔩 𝔭𝔯𝔦𝔪𝔢𝔯 𝔡í𝔞 de clases llegó con prontitud, pero nadie parecía estar emocionado, ni siquiera los niños de primer año que habían ansiado la entrada al colegio de magia cuando les llegó su carta. ______ se levantó junto con el cantar de un ruiseñor en su ventana, y se golpeó la frente con una de las vigas en el techo al sentarse en su colchón tan de prisa. Afortunadamente no despertó con arañas ni ratas a su lado, que era lo que más miedo le daba al principio.
Esperó a que todos estuvieran en clases para bajar del ático y dirigirse al baño para darse una ducha, tal vez eso le despejaría un poco la mente. Se deslizó por las paredes con sumo cuidado, asomándose al pasar por cada pasillo para no toparse a nadie.
Logró su cometido de llegar al baño y ducharse, cambiándose en una capa oscura que arrastraba al caminar. Guardó su máscara de mortífaga en uno de sus bolsillos en caso de necesitarla y salió de nuevo, con el cometido de observar cómo se daban a cabo las cosas.
-No es de buena educación husmear por los pasillos, Lestrange- una voz monótona y grave la hizo sobresaltarse.
-Profesor Snape- suspiró la adolescente, con algo de alivio. Snape sabía porqué estaba allí, no debería darle problemas. Aunque profesor ya no era, ahora era el director de Hogwarts, una decisión con la que muchos estaban en desacuerdo.
-Le recomiendo que use su máscara en todo momento, no querrá ser reconocida por sus antiguos amigos ¿o me equivoco?
-No, señor.
-Eso pensé. Ahora apúrese antes de que suene la campana.
______ corrió para esconderse detrás de alguna columna, apenas le dio tiempo para esto antes de que la campana que anunciaba el cambio de lección sonara. Varios estudiantes salieron de sus aulas, todos en silencio, con la única misión de dirigirse a la siguiente.
Todos subieron y bajaron escaleras, completamente inadvertidos de que unos ojos los observaban con tristeza, y tal vez un poco de envidia. _____ quería ser uno de ellos, pues aunque igual tendría las preocupaciones de la guerra, no estaría participando en su formación.
🪴🪴🪴
Una semana había pasado, una semana realmente atareada para la joven ______. Las cosas estaban mal en Hogwarts, y todo específicamente por unos hermanos mortífagos que se habían unido al colegio como profesores: Alecto y Amycus Carrow. Alecto había tomado la enseñanza de Estudios Muggles, que ahora se había transformado nada más en odio y discriminación hacia ellos. Amycus era el nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, pero ahora se ocupaba solo de las Artes Oscuras y había dejado la defensa de lado.
Pero eso no era todo. Los hermanos Carrow compartían la misma crueldad y gusto por el sufrimiento. Tenían la costumbre de ejercer disciplinas demasiado fuertes, inclusive en los pequeños de primer año. Practicaban hechizos como Crucio a forma de castigo, y era muy fácil hacerlos enojar para recibir uno.
