Dc: Silencio

CAPÍTULO 93

[David Lance POV]

Para mi increíble sorpresa, después de su derrota, Superboy había decidido unirse durante el entrenamiento.

Sin embargo, se me hizo evidente de inmediato que, aunque estaba abierto a la idea de entrenar, Superboy no se sentía del todo cómodo con toda la situación.

Durante el entrenamiento, se llevó rígidamente como si esperara ser insultado o provocado en un momento dado. Más que nada, evitaría hacer contacto visual con cualquier persona en la habitación a menos que estuviéramos peleando.

Cuando hacía contacto visual fuera de las situaciones de entrenamiento, todo su comportamiento cambiaba en una dirección diferente. Mantenía la cabeza alta con un aire de desafío a su alrededor.

Uno no necesitaba ser un genio o tener la capacidad de leer la mente para saber lo que estaba pensando cuando hizo esto.

Ese aire de bravuconería demostró que, en algún nivel, él pensaba que era mejor que el resto de nosotros; incluso cuando fracasó, eso; este entrenamiento no iba a ser suficiente para él. Pude verlo en sus ojos.

No estaba enfadado por esto. Ni siquiera me molesté, en realidad; de hecho, di la bienvenida a su comportamiento con los brazos abiertos hasta cierto punto, siempre y cuando no interfiriera directamente con el entrenamiento, porque sabía que este espectáculo que estaba poniendo para el resto del mundo no era más que una máscara hecha a sí mismo para ocultar sus miedos.

Para ocultar el hecho de que en el fondo, pensó que no era suficiente.

Era simplemente una cuestión de tiempo antes de que llegara a un acuerdo consigo mismo, así que hasta entonces, era más que suficiente para mí que realmente quisiera entrenar, incluso si no creía que el entrenamiento lo ayudaría en absoluto.

Ahora.

Sobre el asunto de la Miss Martian. Bueno, esa era una lata de gusanos completamente diferente.

Ella tenía un poder inmenso, pero poca o ninguna habilidad o control sobre él. Talento como ningún otro, pero falta de confianza para capitalizarlo, en resumen, desde un punto de vista psicológico, ella era un desastre, tal vez incluso más grande que Superboy.

Había subestimado severamente lo que décadas de racismo, abuso y otros factores le habían hecho.

Sea como fuere, trabajar con ella estaba demostrando ser más fácil de lo que uno esperaría, considerando todas las cosas.

Aunque era cierto que tenía muchos, muchos problemas. Ella, a diferencia de Superboy en la mayoría de las situaciones, estaba abierta a la idea de ayudar porque, a diferencia de Superboy, estaba dispuesta a aceptar sus defectos, bueno, casi todos.

De hecho, debido a esto, estaba ansiosa por probarse a sí misma. Si tuviera que adivinar, ella no solo estaba tratando de aprender, sino de obtener cualquier apariencia de aprobación y aceptación de nosotros.

En palabras de Raven, sus emociones se sentían como las de un niño hambriento que busca afecto, una mezcla de desesperación, desesperación, esperanza y miedo, todo a la vez.

A pesar de que había deducido tanto de una simple mirada aquí y allá, en realidad fue notablemente impactante escuchar cómo se sentía M'gann.

Supongo que, de alguna manera, todavía me estaba aferrando al M'gann que había visto en Young Justice, una chica que, aunque no sin sus problemas, se enfrentaría a ellos con bastante facilidad.

Bueno... Esa es la diferencia entre la realidad y un espectáculo. Ambos pueden compartir mucho, pero la realidad siempre golpea más fuerte.

"¡Lo hice!" M'gann alamó.

¿Qué?

Confundido, me di la vuelta para encontrar a M'gann y Raven entrenando en combate cuerpo a cuerpo sin poderes.

"Felicidades", dijo Raven en un tono apenas audible. Su tono y expresión estaban en blanco, sin emociones.

Incliné la cabeza, echándole un vistazo a las chicas.

"¡Consigue bloquear cuatro golpes seguidos sin entrar en pánico!" Dijo M'gann, leyendo mi expresión y respondiendo a mi pregunta tácita, con una gran sonrisa en su cara.

Le sonreí desde mis ojos y debajo de mi máscara. ~Felicidades. ~

"¿Otra vez?" Raven preguntó.

"¿Otro spar? Claro", asintió M'gann.

Le sonreí a esto, echándole un vistazo a Raven. ~¿Desde cuándo estás ansioso por pelear en el combate cuerpo a cuerpo? ~

"Desde el momento en que me dieron a alguien por debajo de mi nivel", respondió Raven, dándome una mirada penetrante. "Tú y Black Canary siempre me golpean".

frunci el ceño. Claro, había ganado todos los combates que habíamos tenido, pero no la estaba golpeando solo por vencerla; ni siquiera la estaba golpeando. Esa era mi hermana. Todo lo que estaba haciendo era parar/bloquear sus golpes y darle mis consejos aquí y allá.

Podría haberle dado una patada, aquí y allá. Pero ella no es una santa cuando entrenamos con poderes. Diablos, estoy bastante seguro de que la última vez me envió a una dimensión demoníaca por un breve momento.

"No lo hice", dijo Raven.

Entrecerró los ojos.

"No tienes pruebas", dijo Raven.

"¿Estáis teniendo una charla telepática?" M'gann preguntó, con los ojos entre nosotros dos, confundidos en cuanto a lo que estaba sucediendo ahora mismo.

"No", respondió Raven, con una pequeña sonrisa que le adornaba la cara. "Pero he estado con Black Bolt el tiempo suficiente como para saber lo que piensa. También ayuda que sea fácil de predecir".

¿Ha... Raven me llamó una perra básica?

"Lo he hecho", asintió Raven.

...

...

... ....

Bueno, es hora de usar una de mis armas secretas.

~Acabas de ganarte un desayuno M'gann,~ dije, sonriendo a mi elección de castigo.

En esto, Superboy resopló en un rincón lejano, escapándose de su personaje.

"¿Y cómo piensas hacerme comer?" Preguntó Raven, con una de sus cejas levantada.

Sonreí, una sonrisa mala ante eso. ~Oh Fabio, la oscuridad dentro de mí me consume, porque hay dos almas dentro de mí, una mala, una malvada, ambas enamoradas de-~ No había logrado terminar lo que estaba diciendo cuando Raven se había materializado frente a mí, usando su magia para detener mis manos.

"¿Cómo te enteraste de eso?" Raven siseó, sus ojos brillando negros.

Le parpadeé un par de veces, al estilo de Disney. ~Usaste mi tarjeta de la biblioteca...~

Raven se congeló. ".... Bien jugado..."

"Yo... Ehmm... ¿qué está pasando? ¿Y por qué mi desayuno se siente como un castigo?" M'gann murmuró, confundido como el infierno con la situación.

"Es una cosa de la tierra; las parejas se pelean todo el tiempo según Internet; esto es lo que algunas personas llaman una pelea de amor o una pelea sin escándalo", respondió Superboy.

"Ni siquiera lo dignificaré con una respuesta", dijo Raven, dando la vuelta para mirar ligeramente a Superboy.

"¡¿Ustedes no son una pareja?!" M'gann jadeó. "Podría haber jurado que lo eras; quiero decir, ¡puedes leer los pensamientos del otro sin una conexión clara! ¡En Marte, solo los amantes pueden hacer eso!"

Bueno, esto se está poniendo raro; es hora de salir bajo fianza.

~¿Así que... biblioteca? ~ Le pregunté a Raven.

"Sí", asintió Raven, envolviéndonos en su magia.

En el lado bueno, M'gann y Superboy estaban mostrando algunos comportamientos que se esperaban de sus edades, como las burlas; lamentablemente, eligieron el peor objetivo para las burlas, Raven, y un mudo por elección. Pero, sin embargo, fue un progreso.