Dc: Silencio

CAPÍTULO 181

[Raven / Rachel Roth - POV]

[Young Justice]

Después de salir del Dr. Kent y los demás detrás, fui a recoger los otros ingredientes que había dejado en mi habitación antes de empezar a prepararlos para el hechizo. Una vez que tuve todos los ingredientes en mi poder, abrí un portal a un área desolada donde tendría el espacio y la tranquilidad para preparar todo correctamente.

Lo que estaba a punto de hacer no fue fácil. Sería, sin lugar a dudas, el hechizo más difícil que había intentado usar en toda mi vida. Necesitaba una preparación cuidadosa y perfección en todo momento, ya que tenía que dibujar símbolos y runas en la sangre de Teekl, todo mientras cantaba en antiguas lenguas olvidadas hace mucho tiempo.

Pero incluso si se sintiera imposible, no le fallaría, no de nuevo.

Usando mi magia, comencé a dibujar los símbolos alrededor de la zona, cantando las palabras arcanas olvidadas hace mucho tiempo en el orden en que se requería. Una vez que terminé con los sellos y las runas, canalicé mi maná en el hechizo, iluminando las runas y los sellos en un tono rojo oscuro.

Ahora, todo lo que tenía que hacer era seguir canalizando mi maná en los símbolos hasta que se abriera el portal.

"Hm, un método bastante crudo de viajar, pero supongo que lo hará", dijo una voz, viniendo de detrás de mí.

¿Un enemigo? ¿Un amigo?

No importaba; de cualquier manera, si me moviera, todo lo que había hecho, cada paso que había dado hasta ahora sería en vano; si me detuviera ahora... no... ¡NO!

"Relájate, honestamente no quiero hacer daño", se rió el hombre desconocido antes de entrar a la vista. "El nombre es Lucifer Morningstar, y sí, el placer es todo tuyo".

Lucifer Morningstar...

Él era el diablo.

"Claro, no puedes hablar ni moverte mientras haces tu portal", dijo Lucifer, caminando por el lugar como un niño curioso. "Vamos a arreglar eso, ¿de acuerdo?" añadió, chasqueando los dedos y completando mi hechizo.

Creó un portal transdimensional con un chasquido de dedos, sin runas, sin hechizos, solo quiso que el portal existiera, y lo hizo. Este hombre era más peligroso que mi padre.

"¿Qué?" Lucifer dijo, una sonrisa enroscando sus labios mientras se sentaba en una silla que no había estado allí antes. "Quiero decir, no puedo tener una conversación agradable si no puedes hablar, así que... Me tomé la libertad de hacer tu portal. De nada".

"¿Por qué me ayudas?" Pregunté, inseguro de sus verdaderas intenciones.

Lucifer se rió antes de levantarse de la silla y caminar hacia mí con un paso seguro, deteniéndose frente a mí con una sonrisa todavía en sus labios. "Chismes jugosos, por eso".

¿Yo... qué?

"Lo siento, pero... ¿qué?" Pregunté, confundido.

"Un amigo mío y yo tenemos algunas apuestas sobre quién se confesará a quién primero", explicó Lucifer, metiendo las manos en el bolsillo y mirando hacia otro lado con una sonrisa astuta. "Personalmente creo que serás tú quien le diga a tu pequeño enamorado deprimido que te gusta más que solo como un amigo, pero mi amigo parece pensar que él será el que confiese primero".

...

....

.....

¿Qué está pasando?

"Así que", dijo Lucifer, mirándome con una sonrisa consciente. "¿Qué te parece? ¿Quién confesará primero? ¿Tú o él?"

"No tengo ni idea de a qué juegos estás jugando. Todo lo que quiero es salvarlo, nada más", dije, con mi voz firme e inquebrantable.

Lucifer se apagó, eche un vistazo que decía. Nadie cree eso. "Hm, la negación es fuerte en este". Luego sonrió, poniendo una mano en mi hombro. "Ahora, ahora, no hay necesidad de luchar contra ello. Puedes decirme los deseos más profundos de tu corazón".

"Quiero volver a ver a David, más que nada en el mundo. Él era mi hogar, la parte de mí que pensé que no existía".

"¡Y ahí está!" Lucifer dijo, aplaudiendo de deleite. "Ahora que has sido honesto contigo mismo, es hora de dejar de perder el tiempo. ¡Tenemos un futuro novio para recuperar!"

...

.....

¿Qué acabo de decir?

¿Me acaba de hechizar?

"Ahora hablemos de los arreglos de la primera cita", dijo Lucifer, con el dedo índice presionado sobre sus labios. "Vamos a ver. Sería tu primera cita, así que... algo demasiado cliché... Hmm... ¿Fresas cubiertas de chocolate y un romántico paseo por el río? ¿O tal vez una noche en la ciudad? ¿Cuál es tu presupuesto?"

Miré fijamente a Lucifer con incredulidad. Antes de decidir, sería mejor simplemente ignorarlo, incluso si pudiera sacarme de mi existencia. "Gracias por la ayuda, pero necesito traer de vuelta a David, y no puedo perder el tiempo contigo".

"Hmm, un presupuesto bajo, ¿dices?" Lucifer dijo, ignorando mis palabras y continuando con su propia agenda mientras me seguía a través del portal. "No te preocupes, tengo mucho dinero, y estoy demasiado invertido en esto, así que no hay límites".

"¿Podríamos cambiar el tema?" Pregunté con la mayor calma posible.

"¿Como arreglos de lencería?" Preguntó Lucifer, con un brillo travieso en sus ojos.

"¡No!" Casi grité. Mi magia se salió de control por un breve momento cuando perdí el control de mis emociones.

"Te aseguro que soy un experto en lencería", dijo Lucifer, su cara ahora más seria, casi insultada por mi reacción. "Puedo asegurarme sin una pizca de duda de que tu futuro novio está excitado por lo que sea que elijas como atuendo".

Lo miré fijamente, mi ceja temblando de incredulidad. ¿Cómo me metí en este lío?

"Pero supongo que podemos cambiar el tema a otra cosa", continuó Lucifer, con una pequeña sonrisa formándose en sus labios.

"Gracias", murmuré con un suspiro.

"¿Arreglos de depilación?" Lucifer sugirió con indiferencia.

"¡NI SIQUIERA HEMOS IDO A NUESTRA PRIMERA CITA TODAVÍA!" Exclamé exasperado, mi voz resonando por todo el portal.

"Oh, eso significa que habrá una primera cita", dijo Lucifer, con una sonrisa satisfecha en su cara. "Supongo que debería empezar a buscar esa lencería ahora, entonces. Será mejor que estés preparado para cualquier desarrollo".

Quiero morir.