|ogdónta|

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Disclaimer: sí, sí es el capítulo más largo de la historia con este libro.

No les diré con exactitud cuántas palabras fueron porque se me espantan, pero si de verdad quieren saber pregúntenme por privado jeje:D

Pero hey, sí les digo que fueron menos palabras que los cuatro capítulos de maratón pasado y esos se los devoraron en cuestión de nada

Por favor comenten mucho si pueden o mínimo compartanme su opinión por mensaje, hagan memes o lo que sea, voten por favor, me esforcé muuuuucho🥺🥺

Las amo y gracias por la espera

Ah y por cierto, si por ahí escuchan algo malo de mí o algo por el estilo, pregúntenme primero.

Lo que diga cualquier persona de otra habla más de esa persona que de la que está hablando.

Es toda una historia con esto, en serio, dos personitas por aquí sí saben qué está pasando y con quién y todo, pero en fin, igual le cuento por mensaje a quien quiera. Yo nunca he buscado ofender a nadie y mucho menos drama, simplemente se me fueron a la yugular por nada.

Sin más, disfruten en capítulo y gracias por esperar.

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Capítulo octogésimo
¿Feliz navidad?

—¡Esther, ven! ¡Vamos a hablar de sexo!

—¡Voy!

Mañana del veinticuatro de diciembre.

Ahora no recuerdo con exactitud  cuántos días habían pasado desde que Esther y y mi mamá habían llegado a la casa, pero más de cuatro no habían pasado.

Y pues, al parecer, al menos con Esther, Ares y yo las cosas estaban bien.

Al parecer, Esther había superado la prueba de confianza de Ares. Y Ares, bueno, digamos que la tomaba en cuenta.

¿Eso era mucho avance, no? ¿O algo significativo, mejor dicho?

Quizá Ares estaba un poco abierta a su melliza por el momento en que llegó a nuestras vidas. Un momento en el que estábamos jodidamente solos.

Qué triste, ¿no? No tener amigos. Pero en fin.

Lo que les importa aquí creo que es el por qué íbamos (o más bien, yo necesitaba) a hablar de sexo.

Pues, en resumidas cuentas, resulta que yo me había decidido.

Yo hablaba con Geovanni ya fuera por mensaje, por videollamada o por una llamada normal prácticamente todo el día, ya que seguía castigado en su habitación como todo un recluso y no podía verlo en persona, todo el día, todos los días.

Bueno, algunas conversaciones se volvían bastante sugerentes y calientes. Y realmente, deseaba tener ese tipo de... ¿interacciones? con él.

No lo pude decir más poético.

Phantasy // COMPLETAWhere stories live. Discover now