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—¡Creí que estaba claro que no quería verte!— Su madre se levanta del sillón en donde se encontraba luciendo un fabuloso traje completamente negro, al igual que ella lo estaba. De luto.

Elian suspira y traga saliva a pocos pasos de la escalera.

—Y no te preocupes que tu petición será cumplida a la perfección, sólo vine por mis cosas.— Alza su barbilla para observar como su madre le da la espalda.

Un nudo se oprime en su pecho al ver su rechazo, pero no esperaba otra cosa que aquello ante había elegido hacer, tanque claramente su padre le había dado la alternativa, o era el amante de su esposa o eran sus dos hermanos.

—¡¡Espero que tengas en claro que ya no tenes una madre!!— Aprieta su barbilla y avanza hacia el exterior de la propiedad sin siquiera mirarlo.

No podía sentirse culpable, porque él había tomado la decisión y así se quedaría. Era responsable de sus actos, y asumiría cada consecuencia de los mismos.

Elian avanza escaleras arriba en busca de la bodega donde tienen ocurrente mente sus maletas para poder tomar algunas y largarse de allí de inmediato

Buscaría un lugar donde pasar la noche y mañana por la mañana iría en busca de un piso para poder instalarse.

Estaba la opción viable de dormir en la casa de Iván sólo por la noche de hoy, ya que había sido la primer persona a la que la había llamado para contarle lo ocurrido...

No era ningún secreto para lo que trabajaba su padre ya que el mismo tenía contratado al padre de Iván para sus negocios de custodia...

Había pensado en llamar a Samantha solamente para escucharla pero luego el arrepentimiento lo carcomío por dentro y canceló aquello llamada que ya estaba  a punto de ser atendida.

—¡Hey hermano!, ¿Donde estuviste toda la mañana?— Malcolm lo frena mientras come un chicle animadamente.

Elian niega con la cabeza, su hermano pequeño era más que un dolor mental. Pero no podía culparlo, su padre lo había criado y malcolm era demasiado fácil de persuadir, ni hablar de que aún no estaba muy informado sobre todo lo que involucraba de dónde venía toda la fortuna de su padre.

—Haciendo negocios.— Responde ronco.

Malcolm sonríe ante su mirada tan tosca y rueda los ojos siguiendo al castaño hacia la bodega, observando como busca con bastante agilidad las maletas que precisa para poder largarse de allí cuanto antes.

—¿Y por eso te vas de viaje?— Señala las valijas y toma una de las mismas ya que el castaño le hace una seña con la cabeza para que lo ayude.

Ambos comienzan a caminar hacia la habitación del Castañó, la cual queda un piso más arriba.

—¡Me voy de la casa, Malcolm y vas a tener que hacer algo por mí!—  Apoya tres de las maletas que lleva consigo sobre la cama de manera brusca, y las abre comenzando a guardar los elementos que tiene en sus mesas de luz.

El del medio de los hermanos se queda parado de pie con dos maletas a un lado de su cuerpo siendo las mismas que él había traído consigo hacia la habitación del castaño.

Esboza una sonrisa por no comprender bien si es una broma o no lo que está sucediendo... —¿Cómo es que te vas?— Frunce su entrecejo al ver como su hermano va de lado a lado colocando en aquella maleta todos los artículos de manera bastante desprolija.

Elián no hace más que rodear los ojos y comenzar a guardar sus artefactos electrónicos aún en la maleta número.

—¡Me voy de casa, ya no viviré más aquí!— Vuelve a responder sin mirarlo Para no perder tiempo.

OLIVIAWo Geschichten leben. Entdecke jetzt