162

24 7 0
                                    


—¿Que carajos tiene puesto?— Iván traba su mandíbula.

Deja su arma a medio poner en su espalda, y la sostiene en su mano.

Emmett palmea su espalda. —Y no viste a tu hermanita.— Suelta una carcajada.

Peter ayuda a bajar a Olivia, tenía demasiado miedo de que aquellos tacones fueran los causantes de una caída precipitada en las enormes escaleras de la casa.

Y por más que se había opuesto a los mismos, tenía qué cargar con el descargo de Olivia al mencionar qué es su fiesta de cumpleaños, una sin Elian y embarazada, por lo cuál no va a quedarse encerrada en su habitación usando zapatillas deportivas.

Todos estaban al pendiente de qué irían a cenar y luego a un pub de los qué Iván dirige, bajo la tutela qué Elian le dejó.

El único que parecía qué no había comprendido la consiga era Iván, qué todavía seguía creyendo qué Olivia iría de entre casa a celebrar su cumpleaños.

—¿¡Que?!— Demanda, torciendo su entrecejo.

Emmett se acerca a las escaleras, extendiendo su mano para ayudar a Olivia a bajar el último escalón.

—¡Te ves hermosa!— Canturrea emocionado.

Habían sido meses duros y no podía esperar el momento para ver a su hermana brillar, que pudiera tener aquella sonrisa plasmada en su rostro y pudiera disfrutar de una noche de celebración por más que estuviera embarazada.

—¿De verdad?— Muerde su labio inferior. —¡Yo me veo cómo un globo!— Admite bajando la mirada.

Peter niega besando su cabeza. —Estas hermosa.— Segundea a su hermano menor.

Y no miente en absoluto.

—¡Estás porno, y una de mal gusto para ser madre!— Iván le da una mirada furiosa, y deja su arma detrás de su espalda.

Emmett alza sus manos cuándo se retira hacia la cocina.

—¡¿Pero qué carajos?!— Balbucea colocando sus ojos en blanco.

Peter niega al verlo.

Olivia baja la mirada hacia su body de encaje color rojo, y sus jeans azul oscuro. Creía que no era de mal gusto su conjunto y Marie se lo había estado diciendo todo el tiempo, incluso, su madre había apoyado la idea de que estaba hermosa con aquel conjunto.

Además de que portaba una chaqueta de jean, haciendo juego con sus tejanos, qué no la dejarían en exposición total.

—¡No le hagas caso! ¡Hoy no pudo coger y es un imbécil!— Sonríe Emmett, agregando aquello.

Ella aprieta sus labios y baja la mirada, fingiendo una sonrisa qué no llega a sus labios. Sus palabras habían dolido.

—Quizas deba de cambiarme, una persona embarazada no tiene porqué vestirse sensual.— Admite con las lágrimas al borde de sus ojos.

Peter niega.

—Olivia...— Comienza.

Emmett traga saliva, apretando su mandíbula, mientras qué las ganas de golpear a Iván se hacen cada vez más presentes en su cuerpo.

—¡Estás de infarto! ¡Y me alegra qué este la familia reunida para celebrar tu cumpleaños y tengamos custodia de más!— Le guiña un ojo.

Dándo un pequeño latiguillo a qué realmente se ve hermosa y tendrán qué tener ojos en la espalda para quiénes la quieran consquistar está noche.

OLIVIAWhere stories live. Discover now