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—¡Voy a matarlo!— Elían sonríe cínico.

Olivia cierra los ojos, dándose cuenta que Iván perdió el conocimiento. Pero, aún, sigue manteniendo la calma porque su pulso es estable.

—¡Pensa en Iván, Elían, ahora mismo no es momento de ponerte en guerra con Malcolm!— Le hace saber.

Elian, chasquea la lengua, dándose media vuelta para observarla, Morek, la observa, mientras tanto, por el espejo retrovisor coincidiendo completamente para con ella, aúnque, lamentablemente no dice ni una sola palabra al respecto, primero y principal porque no se quiere involucrar y meter en la conversación y como segunda medida porque conoce perfectamente a Elián y sabe que no es recomendable que ahora mismo le rompan los esquemas, no cuándo se encuentra así de desesperado.

—¡No me podes decir que no estoy pensando en Iván, cuándo tan solo basta verlo como lo dejó para no necesitar fundamentos para irlo a buscar!— Suelta elevando el tono de voz.

—Ivan te necesita.— Repite.

Pero, el castaño, no le hace caso en absoluto y vuelve a tomar su teléfono celular para poder contactarse con Franco, necesitaba quedarse tranquilo y seguro de que la familia de su mejor amigo estaba al resguardo, y que en estos momentos se estaba ocupando de manera inmediata del traslado de los mismos, aúnque, sabía perfectamente que Franco se encontraba en la clínica junto a Sebastián esperando por la llegada de los dos, no obstante, eso no le impedía ocuparse de esa petición.

Siendo que la misma era primordial.

Olivia, muerde su labio inferior, observa a Morek que la esta mirando, y él mismo le niega con la cabeza, tan solo dos segundos, para luego volver a prestar atención al frente.

Olivia, tuerce su entrecejo, queriendo poder descifrar qué es lo que él le estaba diciendo, de todos modos, no vuelve a decir nada, se concentra en Iván, y en pensar qué apenas bajará del auto, tendría que activar su plan b, siendo completamente necesario llamar a su hermano.

—¡Nosotros lo cargamos!— Morek le anuncia a Elían, cuándo ya estan en la entrada principal.

Queriéndole hacer entender a su jefe, qué se ocupara de lo que se tuviera que ocupar.

Olivia suspira cerrando los ojos y observando prácticamente en cámara lenta como todo pasa a su alrededor y cómo es el ingreso a los estacionamientos de la clínica.

En otras circunstancias si ella lo hubiera vivido desde otra perspectiva, probablemente se hubiera dejado y hasta Incluso se hubiera burlado del castaño, primero y principal por lo alevoso que solía hacer todas las cosas y cómo es que siempre parecía que todo el mundo estaba a su disposición.

No obstante, ahora mismo estando ella misma dentro de esta perspectiva se daba cuenta de que Elián lo daba absolutamente todo por las personas que le importaban de su pequeño círculo cerrado cercano, era prácticamente como si su vida dependiera de que todas esas personas que formaban a que el pequeño círculo estuvieran sanas y salvas, pero por sobre todas las cosas, qué también estuvieran felices y contentas en cómo transcurría su vida.

Y era justamente ahora en este momento tan desagradable, y en esta situación que jamás se le hubiera deseado de ninguna manera a Iván, que se daba cuenta de lo mucho que él ya no hacía tanto por sus empleados cómo así también por su círculo.

No se necesitaba hacer un genio para darse cuenta de lo mal que él lo estaba pasando, y que probablemente en estos momentos le gustaría tener una máquina primero principal del tiempo para que esto no sucediera, y segundo pero no menos importante, poder leer la mente del castaño y saber en este preciso instante qué es lo que está pasando por la misma.

OLIVIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora