Capitulo 46. Reencuentro

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El viaje estaba programado para dentro de dos días, Andrea al enterarse de esto, buscó por mar y tierra la manera de estar presente en aquel lugar; tenía que encontrarse con él, habían muchas cosas que aclarar y ya que él no atendía sus llamados, ni mensajes; esta era su oportunidad.

Buscó la manera de estar muy cerca en el escenario y luego tendría que hallar la manera de estar frente a frente.

Como cosa del destino, uno de los empresarios patrocinador de la gira, tenía negocios con Arturo, así que Andrea habló con su hermano para que le consiguiera acceso de algún modo a la producción del concierto.

ARTURO: flaca no me pidas eso, sabes que no me gusta pedir ese tipo de favores.

ANDREA: por favor. Ayúdame esto es muy importante para mi.

ARTURO: ya vienes con tus caritas a convencerme.

ANDREA: es lo único que te pido, por favor.

Arturo sonrió y le dió un beso en la frente, luego le dijo trataré, pero no te prometo nada; Andrea lo abrazó y le dijo te amo mi rey Arturo.

Dos días después Samuel llegó a Bogotá junto con Flavio, la banda y por supuesto Catalina, sus fans en Colombia ya eran bastantes. Así que fueron recibidos por un gran número de personas en el aeropuerto.

Andrea estuvo allí y lo vió a lo lejos, se había vuelto muy buena para camuflarse y no ser reconocida, verlo le iluminó el corazón y la hizo sonreír como hacia mucho no lo hacia, pero pronto la sonrisa se terminó; cuando vió a Samuel tomar de la mano a Catalina y luego por petición de los fans se dieron un beso.

Los celos la reventaron, dió media vuelta y fue a su auto, donde sobre el volante lloró desconsolada. Al llegar a casa se encontró con Arturo, que al verla triste le dijo cambia esa carita mi flaca; conseguí lo que me pediste, eso si solo para el segundo concierto.

Andrea lo abrazó muy fuerte y le dijo gracias te amo, ahora depende de mi.

ARTURO: te apoyo, pero no te quiero ver sufrir, así Samuel haya demostrado ser un caballero si veo que esto se esta saliendo de control, lo voy a parar.

ANDREA: es un riesgo que quiero y debo correr.

Tendría que esperar cuatro días para ejecutar su plan, así que se dedicó a preparar lo que sería el lanzamiento de su segundo sencillo.

El primer concierto pasó y fue muy exitoso, fue de gran ayuda el hecho de que Mateo estuviera en Miami, porque así la prensa le quitó el morbo a la estadía de Samuel en Bogotá.

Para Samuel era muy difícil estar en Bogotá, pues le traía todos los recuerdos, Andrea era una orgullosa de su ciudad y se la mostró con mucho orgullo. Estaba muy distante y Catalina lo notaba y sospechaba el por qué de su comportamiento. Sin embargo, le daba pavor preguntarle o reclamarle, pues temía que Samuel reaccionara y decidiera buscarla. Así que solo rogaba que el tiempo pasara pronto para volver juntos a México y hacer ese viaje de vacaciones que tenían planeado.

Los dos días previos al segundo concierto, Samuel estuvo recorriendo los lugares a donde Andrea lo llevó y lo hizo solo, recordando en cada paso que daba, cada beso y cada caricia que se dieron.

El 23 de octubre sería el segundo concierto una fecha muy anhelada para Andrea, tanto que la tenía marcada en su calendario con besos y corazones, después de todo era lo que esperaba que pasara.

Para pasar desapercibido estaría en la logística del concierto, así que tuvo que verlo de lejos hasta después del concierto; pues la idea era sorprenderlo en el camerino. El concierto iba terminando Catalina estaba en escena y ella sabía que Samuel siempre era el ultimo en salir del camerino.

Flavio y los muchachos de la banda salieron para tocar junto con Catalina la canción de cierre del concierto. Así que cuando los vió salir a todos de inmediato entró al camerino y cerró la puerta.

SAMUEL: oye, discúlpame, tu no puedes estar aquí.

Andrea estaba de espaldas y vestida de una forma particular, por eso Samuel no la reconoció, ella respiró profundo y volteó diciendo lo siento, tenía que verte.

Samuel al verla quedó pasmado y luego trató de poner una barrera entre ellos.

SAMUEL: ¿Qué haces aquí?

ANDREA: tenía que verte, Samuel tenemos que hablar.

SAMUEL: ahora no, debo salir al escenario.

ANDREA: por favor no me rechaces. Necesito que hablemos.

SAMUEL: lo siento, pero no tengo nada que hablar contigo; debo salir te lo repito.

ANDREA: claro debe ser por ella ¿No? Debes correr al escenario a estar con ella y cerrar el concierto con un gran beso.

SAMUEL: pues si, tu lo has dicho, exactamente eso haré.

Andrea reventada de celos no encontró mejor arma que romperle la boca de un beso, tal como él hacia cada vez cuando eran novios, quería recordarle sus besos. Samuel correspondió a ese beso aunque se quemara el alma con ello. Pero luego reaccionó y se separó de ella.

SAMUEL: esto no puede ser, yo estoy con Catalina.

ANDREA: claro que puede ser, en ese beso me demostraste que me sigues amando.

SAMUEL: ¿Lo dudabas? Mi promesa sigue firme Andrea Gallardo, te dije que te amaría siempre y así es. Pero ahora yo estoy con Catalina, no le puedo hacer esto. Además, a ti no se te dió nada estar con tu ex solo una semana después de separarnos.

ANDREA: eso no es verdad. Es de lo que quiero que hablemos, también cumplí con mi promesa. Yo lo sabía, después de estar contigo no podría estar con nadie mas.

SAMUEL: lo siento Andrea, pero me es muy difícil creerte. Ahora me voy.

Andrea una vez más lloró desconsoladamente mientras lo veía irse, estaba completamente rota y Samuel también lo estaba, pero ahora pensaba que si volvía con Andrea, le estaría haciendo a Catalina lo mismo que Andrea le hizo a él.

Andrea salió del camerino y pudo ver el cierre del concierto, justo cuando Samuel besaba a Catalina, lo que le destrozó el alma, pues el mensaje era claro. Le había querido decir que así como ella había podido estar con Mateo en la cama justo unos días después de haber estado con él. Ahora el podía besar a Catalina justo después de haberse roto el alma con ella en un beso...

amor sin fronterasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora