amor sin fronteras

Capítulo 125. Entre nubes.

Mmm... Ahora si me quieres agarrar a besos dijo Samuel haciendo pucheros, hace un rato andabas de enojona y no me diste mi beso. Andrea le apretó la cara y empezó a darle besos por todo el rostro. Samuel se quedó mirándola fijamente a los ojos y le dijo ¡Gracias por tanto mi amor!. Cuando me miras así siento como si una burbuja me protegiera y desaparecen todos mis miedos dijo Andrea. ¿Ah si? Preguntó Samuel; pues fíjate que a mi me pasa lo mismo cuando tu me sonríes.

Ellos se empezaron a dar besos calentando inevitablemente el ambiente, Andrea se detuvo y dijo amor ya habiamos quedado que no. Samuel la abrazó y de nuevo gruñó ya sé que no podemos estrenar NUESTRO departamento como corresponde le dijo, Andrea se acurrucó entre los brazos de Samuel y le dijo extrañaba tanto tus gruñidos. Y aunque yo también me muero de ganas por hacer el amor contigo, lo siento mucho pero no se va a poder.

SAMUEL: ya lo sé brujita, están tus papás y nuestros hermanos.

ANDREA: si mi amor, pero además de eso debemos seguir las recomendaciones médicas y debemos aceptar que no fue muy responsable lo que hicimos en el hospital.

Bueno pues responsable no, pero si delicioso dijo Samuel con picardía. Andrea le agarró la cara y besó sus carnosos labios. Lo fue mi amor, y como lo fue, ahora nos vamos a dormir muy juiciositos.

SAMUEL: está bien brujita pero este "régimen" se termina apenas pisemos Croacia. Ahí ya no te me escapas.

Andrea sonrió y luego abrazados ambos se durmieron. Pasaron los dos siguientes días en familia tratando cuidadosamente a Samuel y ultimando detalles del viaje, Jose Antonio y Victoria también volverían al día siguiente a Londres, Sofía a México y Arturo a Colombia mientras que Flavio e Irina se quedarían a esperar a Andrea y Samuel, mientras su viaje los ayudarían a tener listos los eventos para dar arranque oficial a la gira promocional del disco de Andrea.

FLAVIO: ¿Siempre se van en el jet privado?

SAMUEL: pues toca carnal. Aquí mi brujita insiste en que debo ir con un "hospital" en el avión o no hay viaje.

ANDREA: no exageres amor, solo te estoy cuidando.

IRINA: pues cuñado yo estoy de acuerdo con mi hermana, es un viaje muy largo. Van al otro lado del mundo.

JOSE ANTONIO: pues si, así todos estamos mas tranquilos.

VICTORIA: y sabemos que quieren desconexión total, pero una reportadita no nos vendría nada mal.

ARTURO: si por favor, porque ustedes dos cuando están solos olvidan hasta como se llaman.

¿Alguna otra recomendación? Preguntó Samuel bromeando, Sofi ¿Algo que agregar?

Todos se echaron a reír. Ya Samuel no seas pesado dijo Sofía sonriente, pásensela muy bien; todos sabemos lo que han sido estos meses para ustedes, cuídense mutuamente y disfruten mucho.

VICTORIA: nosotros ya nos vamos, nuestro vuelo sale en un par de horas.

SOFÍA: y nosotros también; nuestros vuelos tardan unas horas mas pero queremos acompañarlos y de paso nos acompañamos nosotros unas horitas mas ¿Cierto mi rey?

ARTURO: claro que si mi reina, tengo que aprovechar cada segundo, porque después nos espera una larga semana separados.

ANDREA: ah! Bueno ¿Ves mi amor? Luego nos andan criticando por melosos.

SAMUEL: si es cierto mi amor; pero lamento decirles que les vamos a dañar el plan, porque mi brujita y yo vamos a llevar a José Antonio y Victoria.

FLAVIO: bueno pues vamos todos.

IRINA: si ya y si quieren ya luego nos devolvemos apenas mis papás se vayan.

Entre risas fueron todos juntos al aeropuerto en donde los seis recibieron la bendición de Jose Antonio y Victoria, los Del Junco los sentían realmente como sus segundos padres.

FLAVIO: y de ustedes nos despedimos de una vez, porque ya nos dejaron claro que quieren quedarse solitos.

Ya crespito dijo Arturo riendo me cuidas a mi hermana.

FLAVIO: de eso no tengas la menor duda cuñado, yo vivo por y para mi muñeca.

SAMUEL: bueno ya manada de cursis, mi brujita y yo nos vamos.

Arturo y Flavio abrazaron a Samuel y empezaron a jugar con él, por haberlos llamado cursis mientras Sofía, Irina y Andrea no pararaban de reír al verlos divertirse como niños.

SOFÍA: ¿Será que los niños ya dejaron de jugar?

Los tres empezaron a acomodar su ropa que se había desordenado un poco y fueron a los brazos de sus novias.

ARTURO: bueno ahora si. Nos despedimos. Crespito ya te dije me cuidas a mi chiquita. Y a ustedes dos, no me queda más que repetirles lo que ya les hemos dicho estos días, recuperen todo el tiempo; cuidense mucho y vamos a dejar atrás este mal sabor.

SOFÍA: ya escucharon a mi rey, cuentan con todo nuestro permiso.

Andrea, Samuel, Irina y Flavio se devolvieron al apartamento. Pasarían la tarde muy tranquilos, luego cenarian e irían a descansar, al día siguiente Andrea y Samuel saldrían muy temprano y Flavio e Irina los llevarían al aeropuerto.

Finalmente llegó la hora de irse, así que tras despedirse de Irina y Flavio, Samuel y Andrea tomaron un jet privado con rumbo a una nueva aventura para su amor; viajaban acompañados por un médico y dos enfermeras, aunque para Samuel seguía pareciendo muy exagerado para Andrea significaba tranquilidad.

SAMUEL: amor está un poco grande el avión ¿No?

ANDREA: ¿Te parece? A mi me parece que está perfecto para pasar 12 horas de vuelo. Ahora te voy a enseñar la parte que más me gustó y en la que vamos a pasar la mayor parte del tiempo.

El avión contaba con una sweet privada espectacular que a su vez tenia baño privado, Samuel maravillado recorrió el cuarto y luego vió a Andrea con picardía encontrándose con que ella ya estaba semi desnuda y sonriente le decía ¿Creíste que me iba a esperar hasta pisar Croacia? Como me hechizas dijo Samuel acercándose envuelto totalmente por el deseo. Hazme tuya mi amor y júrame que nunca mas nos vamos a perder, que se acabaron las "Catalinas" las "Patricias" y los "Mateos" y "Diegos" nunca mas quiero estar lejos de ti. Ni yo de ti mi amor y te juro que voy a dedicar cada segundo de mi vida a cuidarte a hacerte feliz, a amarte y a volar contigo una y otra vez a donde nuestro amor nos lleve.

Pues prepárate mi amor dijo Andrea desnudando a Samuel porque esta vez literalmente volaremos entre nubes.

Nuevamente los besos y las caricias se apoderaron de la habitación, Samuel tan dulce y delicado y a la vez tan salvaje, Andrea tan entregada eran la mezcla perfecta el "eclipse total del amor"...