Luis comienza a tocar la guitarra mientras observa como Emma reclama los brazos de su tía y le pide regazo encima de ella.
Entona una composición de Demi Lovato que no deja indiferente a nadie y con la que capta la atención de las dos chicas que lo escuchan con una sonrisa pintada en la cara.
Aitana no deja de admirar ese lado cobarde y valiente de Luis.
Cobarde como para esconderse detrás de la guitarra cada vez que un aplauso inundaba la sala y valiente para volver a empezar el mismo proceso con una canción aún más difícil.
La chica supone que eso es así.
Que las cosas que te gustan siempre valen la pena y que si por ella fuese también daría todo una vez mas por ser escritora.
Cuando alguien lleva letras en la sangre la única salida es mostrarlo al mundo para que el mundo también las disfrute.
Algunos le ponían música y otros portada.
El concierto continua y la insegura Emma se ve con coraje como para pedir a Luis que le deje subir con él.
Mientras a Aitana se le cae la baba,Luis coge a la niña y la sienta a su lado.
Emma pierde toda la vergüenza que le caracteriza.Se siente capaz y segura de si misma.
Pese a su corta edad es capaz de mirar a sus miedos de frente y abrazarlos con toda la fuerza del mundo.Quizá no los espante pero abrazandolos estarán en sintonía con ella.
Algo envidiable en los niños.
La inocencia y las ganas de comerse el mundo aunque realmente en eso se parecía a su tía.
Aitana tiene el impulso de compartir ese momento con Amaia así que sin apenas pensarlo saca su móvil y graba el concierto improvisado que está haciendo Emma con su pediatra.
Mientras los graba lo piensa mejor y tampoco es mala idea guardar ese recuerdo.
Ese vídeo en el que Luis mira embobado a Emma y pasa sus dedos por la guitarra acariciándola con todo el mimo posible.
Mientras,Emma lo mira con ternura y miedo de fallar.
Ella hubiese elegido la estampa de su sobrina todas las noches de su vida,haciendo cualquier cosa.
Cuando Emma da por finalizado el concierto por falta de voluntad y ganas de dormir,le pide a Luis que la coja rechazando los brazos de su tía.
Todo indica que Emma se ha encariñado del chico irresistible de la guitarra.
-Ya me la puedes dar.Estarás cansado y nosotras tenemos que volver a casa.
-¿Me dejas que os acompañe?
-Está bien.
Ella es la que da el primer paso y él le sigue.
Pasear por las calles de Madrid en buena compañía siempre era un sí rotundo.
-¿Te ha gustado?
-Para nada,Emma te ha salvado el concierto.
-Pues me la vas a tener que traer más.
-Me ha encantado,Cepeda.
-Gracias,Ocaña.
Aitana sonríe como una tonta y sin querer se da cuenta de que quizá ese chico provoque algo en ella.
No lo quiere meditar pero tampoco lo quiere rechazar.
Solo sabe que se siente agusto con él,que le da toda la ternura del mundo verlo con Emma y que tiene la sensación de querer siempre más.
En medio de conversaciones banales y sin sentido llegan al portal de Aitana y aunque parezca que ninguno de los dos se quiere despedir,no quedaba de otra.
-Muchas gracias,Luis.
-De nada,gracias a ti por ir a verme.
-Me hacia ilusión descubrir tu lado oscuro de la noche y sin bata.
-Los doctores también sabemos divertirnos.
-No te vengas arriba,solo has cantado baladas.
-¿Tambien me vas a querer cambiar el repertorio?
-Me encantan tus baladas,lo admito.
-Anda,que hoy he sido un amigo ejemplar.
-No te tires flores.
-Te he dado clases de guitarra,te he cuidado a la niña,te la he entretenido y la he lanzado al estrellato,te he invitado a un concierto y os he traído hasta casa.
-No me puedo quejar.
-Me debes como mínimo la continuación del amor de Sonia y Marcos.
Aitana arquea sus cejas y da a entender que no tiene nada que ver una cosa con la otra.
-Luis...
-No digas nada,era por si colaba.Es que me tienes en un sin vivir.
Aitana sonríe dándose cuenta de sus verdaderas intenciones y recordando el trágico final del libro.
-Te prometo que buscaré inspiración.
-Quizá ya la tienes cerca y no la ves.
