Imperio caído, amor destruido [YoonTae +18] {Omegaverse}

Capítulo XVI

Los días comenzaron a pasar, YoonGi se esforzaba por hacer feliz a HoSeok puesto que, desde el día en el que les contó todo, se deprimió demasiado, ya no comían juntos, el menor salía a cazar desde antes que YoonGi y regresaba después que él, casi no se veían. TaeHyung también se esforzaba por quitarle peso de encima a HoSeok, cuando se quedaba solo hacía todos los deberes del hogar, escombraba tanto su habitación como la de Jung, preparaba la comida, entre otras cosas, sin embargo, su mayor no comía ahí, llegaba una que otra vez entre sus horarios de trabajo, le daba una que otra sonrisa al menor, pero de nuevo salía por horas. Se arrepentían de haberle insistido tanto.

En la tarde YoonGi llegó exhausto, al entrar lo primero que hizo fue saludar a su amado con un beso en los labios.

-Te extrañé tanto- dijo al separarse de los labios de su contrario.

-Y yo a ti, Yoonie, dime ¿te fue bien hoy?- sonrió para después tomar la mano de su contrario y llevarlo hasta la mesa para que pudieran comer.

-Hoy estuvo demasiado bien, cacé 5 animales, me fue demasiado bien- respondió con una sonrisa mientras ponía la comida en el plato de su amado.

-Me alegra saber eso- también sonreía, sin embargo, se veía nervioso a lo que Min lo miró con atención y dijo:

-Te sucede algo, ¿qué tienes?- pudo sentir lo que su contrario así que no le podía ocultar nada.

-Quería hablar contigo sobre... Algo- tras decir eso miró hacia otro lado, tal y como si estuviese evitando la mirada de su contrario, sin embargo, YoonGi dejó lo que estaba haciendo y tomó las manos del menor el cual le regresó la mirada.

-Dime lo que sea, cariño- animó a su contrario a hablar el cual soltó un pesado suspiro y continuó:

-Me ocupo de todas las cosas del hogar, pero me sobra demasiado tiempo libre, me aburro demasiado, entonces quería saber si me das permiso de trabajar como costurero- temía por la respuesta de su contrario el cual soltó sus manos y le acarició el rostro.

-Querido, no tienes que pedirme permiso de absolutamente nada, no porque estemos enlazados y tengas una marca significa que puedo hacer todo a mi antojo contigo, eres libre de hacer lo que quieras y si deseas trabajar como costurero hazlo, tienes mi apoyo- respondió algo serio, no le gustó para nada que TaeHyung le pidiera permiso para algo que quería hacer.

-Mi mamá me contó sobre cómo eran los esposos o parejas alfas, me dijo que siempre querían controlar a los omegas desde que se comprometían, entonces creí correcto el hacerlo- explicó avergonzado.

-No, amor, me conoces de toda la vida, yo no soy así, siempre te he dado tu libertad, no porque tengamos una relación significa que tengo que decidir por ti, así que, por favor, no lo vuelvas a hacer, eres una persona, no un esclavo- revolvió el cabello de su amado- Si quieres terminamos de comer y vamos a buscar por todo el lugar, he visto varios lugares de costura- sonrió.

-¡Sí! Gracias, cariño- dijo el menor con entusiasmo para después comenzar a comer lo que su amado había servido en su plato, este lo miraba con atención, estaba recuperándose muy rápido, los moretones estaban desapareciendo también, eso hacía muy feliz a Min...

...

En otro reino el rey Min salió de su habitación por fin después de varios días, dejó a su esposo dormido mientras él fue inmediatamente a los calabozos para ver a TaeHyung, caminó de prisa pues "no quería ser descubierto por JiMin", habían guardias en todos lados, sin embargo, al llegar a los calabozos no había ninguno cosa que le pareció sumamente extraña.

Llegó al calabozo de TaeHyung con una enorme sonrisa, no lo había visto en tantos días que se alegraba de por fin hacerlo, sin embargo, esa sonrisa se borró instantáneamente al ver aquel calabozo vacío, su corazón comenzó a latir rápidamente, por un instante se sintió mareado, ¿a dónde había ido el menor en su ausencia?