Imperio caído, amor destruido [YoonTae +18] {Omegaverse}

Capítulo LXXVII

JiMin abrió los ojos con dificultad, la luz del sol entraba por la ventana de la habitación, parpadeó un par de veces y después frotó sus ojos, pronto le vino un fuerte dolor de cabeza seguido por una sensación de angustia.

Se puso de pie con cuidado, estaba dispuesto a salir de la habitación cuando notó que no reconocía el lugar donde se encontraba.

-¿Qué rayos? ¿Dónde estoy?- se preguntó mientras miraba a su alrededor. La habitación era muy diferente a la de su palacio, principalmente porque el lugar en donde se encontraba era más pequeño y tenía menos cosas.- No puedo salir de aquí si no tengo idea de dónde estoy, es mejor quedarme aquí- pensó para después volver a recostarse en la cama.

Se sentía mareado y le dolía la espalda, estaba hambriento y con un fuerte dolor de cabeza, también el pecho le dolía un poco y el sentimiento de angustia crecía a cada segundo que pasaba. En su lugar dio una pequeña vuelta para quedar del lado contrario al que se encontraba y, al hacer esto, un sonido llamó su atención, era un claro sonido de hojas de papel, inmediatamente comenzó a buscar en sus bolsillos encontrando así una carta. Inmediatamente la abrió y comenzó a leer el contenido, recordó que ya la había leído cuando la confusión sobre lo que hacer volvió a él.

-Mierda, Agust, ¿qué debo hacer contigo? ¿Será prudente perdonarte y darte una nueva oportunidad?- antes de siquiera poder pensar una respuesta, alguien entró a la habitación, persona que JiMin reconoció inmediatamente a la vez que sus ojos se iluminaban.- ¿Kookie?- cuestionó con notable emoción.

-¡JiMinnie hyung! Has despertado ¿Cómo te sientes?- se acercó a su mayor y tomó asiento a su lado.

-Física y mentalmente no me encuentro muy bien, ¿pero qué sucedió? ¿Por qué estoy aquí?- cuestionó con la esperanza de obtener una respuesta que le ayudara a comprender mejor la situación.

-Viniste hace una semana, nos mostraste una carta que te envió Agust y nos pediste algunos consejos, cuando ya lo habías decidido saliste de aquí, HoSeok y NamJoon te acompañaron hasta la salida de Goguryeo, sin embargo, caíste de tu caballo y te golpeaste fuertemente la cabeza, estuviste inconsciente todo este tiempo- intentó no estar nervioso pues eso lo delataría, no obstante, al parecer JiMin lo creyó todo.

-No recuerdo nada de eso, solamente recuerdo cuando esa paloma blanca llegó con la carta de Agust, nada más- respondió con sinceridad- Por cierto, ¿cuál fue la decisión que tomé? Es decir, estoy muy confundido y el ya haber tomado una decisión de me hace sorprendente- dijo tras una risilla.

-Dijiste que le pedirías que regresara para poderse tratar más, que se quedara un tiempo aquí y, si te convencía su nueva forma de ser, lo acompañarías a buscar a su hija hasta que se rindiera- se sentía culpable por haber decidido por él lo que haría, aunque lo decidió junto con los demás sentía que la culpa caía completamente sobre él, pero sabía que era necesario hacerlo, no quería perder a HoSeok y sus demás amigos.

-Es un buen plan, supongo que me ayudaron a decidirlo, ¿no?- sabía que él sólo no podía idear algo como eso por lo que dedujo que todos lo habían ayudado.

-Sí, nos pediste nuestra opinión y te dimos varias opciones, tú decidiste esa como la más viable- el menor respondió mientras jugueteaba con sus dedos, se sentía demasiado nervioso, no quería que JiMin recordara lo que había sucedido.

-Gracias- sonrió- Ahora que ya está decidido creo que iré a Silla, debo escribirle la carta cuanto antes- tras decir aquello se puso de pie con dificultad, enseguida JungKook se puso de pie.

-¿Estás seguro? ¿Ya te sientes bien?- cuestionó notablemente angustiado, el golpe que YoonGi le dio estuvo muy fuerte como para que ya se sintiera mejor.

-No estoy del todo bien, pero necesito regresar, no puedo descuidar el palacio tanto tiempo, dices que ya pasó una semana, eso es demasiado- explicó mientras se apoyaba en la pared pues se sentía un poco mareado.

-¿Seguro que es eso o es porque quieres escribirle a Agust?- cuestionó en tono burlón a lo que el rostro del mayor se tornó de un color rojizo de inmediato.

-N-no, no es por eso, Kookie, de verdad me...- hizo una pausa al ver la burlona expresión de su contrario- ¡No, JungKook! Me preocupa dejar tanto tiempo el palacio, Agust me pidió que lo cuidara, no que lo dejara a su suerte- se excusó.

-Sí, claro, como digas, entonces ya ve a Silla, seguramente la hoja de papel, la tinta y la palomita te están esperando- continuó burlándose de su mayor el cual guardó silencio por algunos segundos, decidió cambiar de tema pues se sentía demasiado nervioso por las cosas que el menor le decía.

-¿Alguien me ha venido a buscar?- cuestionó con la esperanza de que alguien haya notado su ausencia en el palacio. Jeon soltó una risa seguido de:

-Uff, la pregunta correcta sería ¿quién no te ha venido a buscar? Al segundo día en la mañana comenzaron a venir guardias y sirvientes, el único día que no han venido es hoy, supongo que porque es muy temprano, de ahí en fuera han estado aquí todos los días- informó a su mejor amigo el cual, por unos instantes, se sintió la persona más importante que pudiera existir.

-Eso significa que se angustian por mí al igual que yo por todos ellos- dijo casi en un susurro. Ambos guardaron silencio por unos instantes, hasta que JungKook se atrevió a decir:

-Oye, hablando de tus visitas y ese asunto, hay un hombre en especial que me llama la atención y...- su amigo lo interrumpió:

-¿Qué? ¿Te gusta?- se burló a lo que Jeon se hizo el ofendido.

-¡¿Qué?! ¡No! No digas esas cosas, yo amo a HoSeok, ¿qué te sucede?- soltó una risita- Lo que quiero saber es  ¿por qué tiene más de la mitad del rostro quemado?- cuestionó en tono serio. Esas palabras dejaron a JiMin en total silencio y sin expresión alguna en su rostro a lo que JungKook complementó- Fue Agust, ¿cierto?- notó que su mayor se tensó al escuchar aquello por lo que, sin recibir afirmación o negación, supo que estaba en lo cierto.

-Eso fue hace mucho tiempo, fue cuando me fui con mis padres al palacio de Baekje y aún estaba embarazado, ¡pero te juro que está cambiando! Él es diferente ahora, ¡te puedo asegurar que es un hombre nuevo! No creo que se atreva a dañar a alguien de nuevo, por favor créeme- JungKook, al escuchar aquello, acarició el cabello de su mayor y respondió:

-No te estoy pidiendo explicaciones, JiMinnie, creo que eres un adulto como para saber con quién sí o no estar, dices que Agust ya cambió, pero muchas personas tenemos heridas por su culpa, aunque él trate de enmendar el pasado será un tanto difícil pues ha cometido terribles actos, por ejemplo, la ejecución de toda la clase baja, entre ellos la familia de Jin hyung, ¿crees que él pueda aceptarlo algún día? Honestamente me sería complicado seguir conviviendo con el asesino de mi familia, pero si es algo que te hace feliz no puedo hacer más que aceptarlo y apoyarte, porque eres mi mejor amigo- esas palabras hicieron que el mayor regresara a la cama y tomara asiento, en su rostro se reflejó el daño que le hicieron las palabras de Jeon, sin embargo, muy en el fondo lo sabía.

-¿Crees que soy un estúpido por querer en mi vida a alguien que me hizo daño de mil maneras anteriormente?- cuestionó mientras se cubría el rostro con sus manos, de nuevo la confusión había vuelto a él.

-No, JiMinnie, no lo creo, tú eres libre de amar a quien desees y, si Agust está dispuesto a reparar sus errores, ¡qué mejor para ti!- expresó con notable alegría por su amigo- Yo solamente quiero verte feliz, Minnie, y si Agust te hace feliz nadie tiene por qué molestarse por ello, SeokJin lo dijo, la única vida que va a cambiar es la tuya y quien estará con Agust eres tú, así que ya deja esa expresión triste, ¡alégrate porque tu esposo quiere cambiar para bien! Y no solo eso, quiere tenerte en su vida y hacer las cosas bien- explicó mientras apartaba las manos de su amigo de su rostro y entrelazaban sus dedos, el menor lo sujetó con firmeza y sonrió- Cualquier decisión que tomes la voy a apoyar- y tras eso, una pequeña sonrisa apareció en el rostro del mayor el cual, sin perder tiempo, abrazó con fuerza a su mejor amigo.

-Te quiero tanto, Kookie, gracias- expresó con notable alegría.

-Y yo a ti, Minnie, no tienes que agradecerme, para eso soy tu amigo, ¿no?- Park soltó una risilla para después decir:

-¿Crees que HoSeok me deje quedarme unos días aquí contigo?...