Imperio caído, amor destruido [YoonTae +18] {Omegaverse}

Capítulo XXX

JiMin se encargó de contarle todo a sus hermanos, detalle tras detalle. Se había encargado de reunirlos a los 3 en su habitación a espaldas de su padre, no dejaría que él se enterara, no hasta que tuviera un plan para que Agust no pudiera dañar Goguryeo.

-¡Es un hijo de puta!- HaYan expresó mientras llevaba sus manos a su rostro y lo cubría con ellas, se sentía impotente.

-¡¿Por qué no nos dijiste inmediatamente?! ¡Hubiéramos exterminado con nuestras propias manos a esa escoria!- Sandara se sentía igual que su hermana, jamás se hubiera imaginado que Agust se atreviera a tanto.

-JiMin hyung, ¿por qué te callaste? Hubieras enviado una carta, nosotros pudimos evitar muchas cosas, ¿por qué preferiste aguantar todo eso?- SaeByeok intentaba mantenerse tranquilo, tenía tanto coraje por dentro, pero debía contenerse por lo menos un rato más.

-Ya les conté todo, es un maldito y si hubiera actuado en su contra seguramente no estaría aquí con ustedes, si se intentó oponerse a que viniera ¿qué otra cosa no hubiera hecho?- respondió a sus hermanos los cuales tenían el rostro rojo por la furia que sentían, a Sandara le resaltaba una vena del cuello y la frente, HaYan tenía puños con sus manos, quería matar a Agust.

-Se va a morir ese hijo de puta, vámonos, Sandara, tú quédate con JiMin, SaeByeok- HaYan indicó, sin embargo, el mayor de los hermanos la tomó fuertemente de la mano.

-No, HaYan, no vayan a ningún lugar, los va a matar- su angustia era demasiado notable.

-¡Tenemos que hacerlo! Nadie se mete con nuestro hermano, y ese hijo de puta no va a ser la excepción, así que suéltame que tenemos que recorrer un largo camino de aquí a Silla- la mujer tenía tanto coraje que solo quería ir a matar al esposo de su hermano.

-Por favor, no lo hagan, lo de menos es que lo maten o solamente lo asusten, pero si los mata me va a ir mal a mí porque no solo los voy a perder sino que puede maltratarme peor de lo que ha hecho, además, puede mandar a hacer un desastre a Goguryeo, cualquier acción que tengamos puede afectar a más de una persona, por favor, no lo hagan- suplicó. Por unos momentos HaYan se quedó en silencio e intercambió miradas con Sandara, no sabían qué hacer.

-¿Él vendrá por ti en 3 meses?- Sandara cuestionó con seriedad.

-Sí, él vendrá por mí, ¿por qué?- fue la respuesta de un JiMin confundido.

-Ese día le diremos hasta de lo que se va a morir, será una buena idea ir un día de estos a Goguryeo para advertirles de lo que posiblemente Agust puede hacer- fue lo que Sandara dijo mientras abrazaba a su hermano en cual soltó a HaYan.

-¿Entonces iremos a Goguryeo?- el mayor cuestionó mientras su corazón latía con fuerza, le emocionaba el saber que volvería a ver a JungKook y los demás.

-Sí, pero para eso tendremos que hablar con nuestro padre sobre esto- Sandara respondió mientras pensaba qué y cómo hacer las cosas.

-No, él no debe enterarse- fue la respuesta de JiMin el cual imaginaba el caos que se haría si el rey Park se llegara a enterar.

-JiMin hyung, él tiene que saber, si algo te hace ese desgraciado y nuestro padre se entera de que nosotros sabíamos como te trata se va a enfadar con nosotros, le debemos decir todo ahora, podemos darle una buena solución a todo- SaeByeok respondió apoyando a sus hermanos, no quería que las cosas empeoraran.

Por unos minutos los hermanos se quedaron en silencio, JiMin lo pensó durante unos segundos y lo analizó detenidamente, soltó un pesado suspiro y respondió:

-De acuerdo, hablemos con él...

...

En otro reino, el rey Jeon vigilaba desde lejos a su hijo menor el cual paseaba por el pueblo de la mano con el hombre que le gustaba, Jung HoSeok.

El hombre no quería que su hijo menor tuviera una relación con algún plebeyo, ahora quería comprometerlo con Park HaYan o Park Sandara, con cualquiera de ellos dos a que estuviera con HoSeok.

-Kook, ¿quieres que vayamos a cenar algo?- HoSeok cuestionó con una sonrisa a lo que el menor asintió, entonces HoSeok lo comenzó a guiar entre calles hasta un pequeño lugar, por fuera era sencillo, pero al entrar el olor a comida inundó las fosas nasales de los jóvenes.- Señor y señora Seong, soy HoSeok- informó con una sonrisa mientras caminaba hasta una de las mesas del lugar, ambos jóvenes tomaron asiento y, casi enseguida, la mujer llegó.

-¡HoSeok! Qué gusto verte aquí de nuevo, hacía casi medio año que no te veía por aquí, ¿qué te has hecho? Escuché que un cazador alfa comenzó a vivir contigo junto con su pareja, un costurero omega- la mujer dijo al acercarse a los dos jóvenes.

-Sí, mis amigos de Silla, YoonGi y TaeHyung, una feliz pareja que espera un cachorro- respondió con una sonrisa.

-¿Y tú, muchacho? ¿Piensas formalizar algún día? ¿Tener una pareja e hijos?- el hombre cuestionó desde la cocina. HoSeok soltó una risita tras escuchar aquello, miró a JungKook y respondió con una hermosa sonrisa:

-Quizás una pareja dentro de poco tiempo- fue su respuesta a lo que los mayores soltaron una risita al ver el rostro rojo del menor.

-¿Qué van a comer, chicos?- el hombre cuestionó a lo que HoSeok miró al menor esperando su respuesta el cual se apresuró a responder:

-¿Tendrá seon? Muero por probarlo después de tanto tiempo- sonreía de una manera tan tierna.

-Claro que sí, joven príncipe- la mujer se apresuró a responder.

-Yo quisiera lo mismo que él, de beber quisiera sikhye, ¿tú qué quisieras, cariño?- cuestionó al menor al cual se le subió la sangre al rostro de nuevo, su cuerpo entero comenzó a temblar.

-E-eh l-lo mismo que tú- se limitó a responder, no podía hablar por los nervios que sentía.

-En unos momentos les traigo su orden- y tras la mujer decir aquello regresó a la cocina con su esposo. HoSeok recargó su rostro sobre su mano mientras observaba a Jeon el cual no sabía cómo ocultar su nerviosismo. Desde hacía algunos días Jung había estado pensando si lo que sentía era verdadero o solamente era porque, al estar con JungKook, sentía como si estuviera con su difunta YangMi, había estado confundido, sin embargo, aprovechó el día que YoonGi y Tae fueron con un Chamán a leer sus cartas para él también ir a que le leyeran sus cartas, con esa lectura se convenció que, lo que sentía por JungKook, era real.

-¿Por qué eres tan hermoso?- cuestionó mientras miraba con atención al menor el cual soltó una risita y respondió:

-No lo sé- fue su simple respuesta, no sabía qué decir.

-¿Sabes? Llevo algunos meses enamorado de ti, supongo que es algo de lo que te diste cuenta desde hace algún tiempo, pero no quería decir nada hasta no estar loco por ti...- hizo una pausa para sentarse adecuadamente y, después, tomar la mano del menor-... ¿Tú sientes lo mismo?- cuestionó sabiendo la respuesta.

-¡Sí! Siento lo mismo desde hace tanto tiempo- respondió sin dudarlo, había estado esperando esa declaración desde hacía mucho.

-Entonces, si ambos sentimos lo mismo, ¿por qué no comenzar a salir? Hemos tenido tantas "citas", nos conocemos muy bien ahora, creo que es momento de dar un paso más, ¿no lo crees?- sus ojos brillaban intensamente al igual que los del menor el cual se apresuró a responder:

-Claro que lo creo, necesitamos avanzar- su cuerpo entero temblaba aún más de lo que ya lo hacía cosa que inundó de ternura a HoSeok.

-Entonces ¿quieres ser mi novio?- cuestionó con una enorme sonrisa a lo que Jeon soltó un pequeño gritito y asintió, inmediatamente HoSeok lo atrajo hacia él y lo besó profundamente, como hacía algún tiempo lo hizo en el palacio. Ambos jóvenes disfrutaban de los labios del otro, comenzaron a transmitirse amor, amor puro.

Sin embargo, detrás de ellos el rey Jeon observaba lo que hacía su hijo menor, no podía sentirse más furioso, quería entrar para golpear a HoSeok y llevarse a su hijo, afortunada o desgraciadamente uno de sus guardias lo detuvo, no quería que él rey hiciera una estupidez, un escándalo.

-Esto no se quedará así, Jeon JungKook...