ғᴏʀᴄᴇ ᴅᴇsᴛɪɴʏ

Capítulo 102: Té

Su búsqueda de los compartimentos ocultos había sido exitosa, y Rey y Rose habían estado trabajando en un silencio comprensivo, arreglando lo que podían del sable de luz, cuando la nave salió tambaleándose del hiperespacio. Fue una parada no planificada, por lo que o el barco estaba roto o necesitaban cambiar de rumbo. Rey temía saber qué podría haber requerido un cambio de rumbo. ¿Un ataque a Dantooine? ¿Piratas? ¿Un motín dentro de la Primera Orden? Ella había sentido que las emociones de Kylo alcanzaron un punto de ruptura antes sobre el vínculo, pero eso no era necesariamente infrecuente. Había habido una ausencia de dolor, algo que se había asegurado a sí misma que habría sentido si hubiera un motín. Ella revisó el vínculo y se sintió aliviada al encontrar su fuerte energía allí. Sin embargo, sus racionalizaciones hicieron poco para calmarla cuando sintió temblores ominosos en la Fuerza.

—¿Por qué crees que abandonamos el hiperespacio? —, le preguntó a Rose suavemente. Se negó a mirar a su amiga, pero Rose debe haber notado su expresión afligida, porque colocó cuidadosamente el arma en el banco de trabajo. Su amiga esperó pacientemente a que ella continuara.

—Si hubo un ataque a Dantooine, ¿crees que...

—Creo que Finn ya nos tendría de vuelta en el hiperespacio en un curso trazado hacia la base. Creo que tú también lo sabes—, Rose la tranquilizó, pero había una pregunta en sus ojos cuando Rey se encontró con su mirada. Estaba esperando que Rey hiciera la verdadera pregunta que plagaba sus pensamientos.

—¿Qué crees que haría si hubiera noticias de un motín dentro de la Primera Orden?

Rey forzó las palabras más allá de sus labios, dando vida a sus miedos, esperando que Rose la tranquilizara nuevamente. Ella no lo hizo.

—Lo sentí, antes. Estaba muy molesto y pensé... pero ¿y si él ...

—Vamos—, dijo Rose, ofreciendo su mano manchada de aceite a su amiga—. Vamos a hablar con Finn.

Rey agarró sus dedos con fuerza y siguió a Rose hacia la cabina. «Está vivo,» se recordó a sí misma. «Nunca es demasiado tarde mientras esté vivo.» Sus seguridades internas fueron interrumpidas cuando escuchó un ruido de la galera. La Fuerza estaba llamando su atención allí. Soltó la mano de su amiga y se detuvo. Rose la miró, vacilante, antes de que Rey hiciera un gesto hacia el repaso. Cuando su amiga desapareció a la vuelta de la esquina, Rey retrocedió hasta que estuvo parada en la entrada de la cocina. ¿Por qué la Fuerza la había atraído allí? Ella había estado esperando a su compañero de vínculo, pero se encontró mirando a Poe Dameron. Estaba parado en el mostrador, preparándose una taza de café o té.

—¿Qué estás haciendo aquí?

Poe casi deja caer el utensilio que estaba usando para revolver la bebida. Se recuperó rápidamente y continuó su proceso sin enfrentarla.

—¿Finn no te lo dijo? — Poe preguntó, la inflexión de su voz sospechosamente alta—. Estaba en la zona: tuve que dejar un... paquete con Maz, así que quería reunirme con todos ustedes antes de que se dirijan a Ilum.

«¿Qué paquete?»

Rey se burló y murmuró: —No sabía que Kamino estaba 'en el área.

—Entonces, has hablado con tu novio el Líder Supremo, ¿eh?

Los latidos de su corazón se aceleraron cuando se dio cuenta de su error, pero antes de que sus pensamientos pudieran girar en espiral, él sonrió por encima de su hombro.

—¿Está enojado?

Había una inquietud en el edificio que le picaba la piel. No era el hecho de que Poe supiera que había vuelto a ver a Kylo después del incidente en la sala de guerra lo que le preocupaba (sabía que estaban unidos), sino porque estaba bromeando al respecto. Este era el hombre que había fingido asesinarla para darse cuenta de su venganza contra el Líder Supremo. Cuando ella no respondió, él se volvió hacia ella, limpiándose las manos con una toalla.