ғᴏʀᴄᴇ ᴅᴇsᴛɪɴʏ

Capítulo 189: Dados

La puerta explosiva se abrió y Kylo supo quién era sin mirar. Por lo que valía, Ben tuvo suerte de haberse ganado su amor, porque era ferozmente leal y decidida. La mujer obstinada siempre visitaba a la misma hora todas las mañanas para entregar su comida. Ella lo miraba comer mientras apenas tocaba el suyo. O era increíblemente exigente o no tenía un gran apetito. La mayoría de los días ella le ofrecía su porción después de que él terminara la suya. Él siempre lo rechazó, la mujer parecía demacrada, como si pudiera usar la comida, pero ella se la ofreció de todos modos. Había algo que decir sobre su obstinación. "¿Puedo entrar, Kylo?"

No había estado durmiendo bien. Él estaba irritado con la situación, y ella, y estaba preparado para responder con algo agudo y despectivo en la línea de que nunca antes te había detenido, cuando se dio cuenta del nombre que había usado. Sus ojos se encontraron con los de ella cuando ella le entregó su comida.

― Me llamaste Kylo.

― Tú no eres ...

Ella comenzó, pero hizo una pausa, eligiendo sus palabras cuidadosamente.

― No es el hombre que pensabas que era? ―, finalizó.

Ella sacudió la cabeza con tristeza.

―Quería que lo fueras; Traté de convertirte en él, pero no lo eres. Y eso es... realidad.

―¿Me dejarás ir?―, Dijo, demasiado ansioso. Él la atrapó con una mueca y trató de recordarse a sí mismo que esto requeriría paciencia. Finn había hablado de lo difícil que sería esta separación para ella; había hablado de largos en los pasos que estaban dando para darle a Kylo su libertad. Había tomado más tiempo de lo que todos esperaban, pero esto fue un progreso. Podía esperar. Quería poner fin al sufrimiento, pero era muy consciente de que el final de su tormento señalaría el comienzo del suyo. O, al menos, señalar una nueva fase de su sufrimiento. No se podía negar el dolor que le causaba cada vez que lo veía.

― ¿Qué pasa si ... ¿Quería conocerte en su lugar?―, Preguntó, retorciéndose las manos. Era esperanzador de una manera que no lo había sido desde que se había despertado en el medbay. Cuando sus ojos encontraron los suyos, también irradiaron esperanza. Había algo en sus ojos. No eran familiares, exactamente, pero había algo que lo atraía a ellos de todos modos. Habría sido tan fácil, pensó, enamorarse de esta mujer. A pesar de sus afirmaciones, él sabía que el problema era que ella nunca podría enamorarse de él. Ella todavía estaba enamorada de otra persona. Debería haber dicho lo mismo, pero eso no fue lo que salió.

― ¿Por qué?

Era la pregunta más significativa que Kylo le había hecho.

«¿Por qué? ¿Por qué hacer esto más difícil de lo que tiene que ser?»

―Nunca he dejado entrar a nadie como lo hice contigo ... con quien solías estar―, respondió ella―. Encontramos pertenencia el uno en el otro antes, porque nos entendíamos de una manera que nadie más podía. Podríamos hacerlo de nuevo. Incluso la Fuerza nos quería juntos; Es por eso que teníamos un vínculo.

Kylo cerró los ojos decepcionados. Ella realmente no quería conocerlo. Todavía se aferraba al pasado; Ella no dejaría ir lo que había sido. Su ira se centró en la idea de que la Fuerza era su excusa para negarse a dejarla ir, como si fuera sensible en la prolongación de su sufrimiento.

― ¿La Fuerza es un ser vivo ahora?

Parpadeó como si hubiera olvidado con quién estaba hablando.

― Es la energía entre todos los seres vivos. La energía de cada ser está conectada por un hilo, y todos esos hilos están conectados en un gran diseño del destino que está oculto para todos nosotros. Aunque somos sensibles a ella y podemos manipularla, la Fuerza todavía nos guía a su voluntad.