ғᴏʀᴄᴇ ᴅᴇsᴛɪɴʏ

Capítulo 130: Revelación

― ¿Se supone que debe hacer eso?― Finn preguntó mientras Rey agitaba el sable índigo de doble hoja por el aire. Las cuchillas de plasma eran inestables y de aspecto dentado en apariencia.

―¿Creo que sí?―, se rió―. No fue completamente a propósito. Era inestable como el de Ben y no quería crear respiraderos para él. Pensé que podría hacerlo similar a mi personal de intendencia. Fue bastante sencillo. Acabo de agregar emisores de haz en ambos extremos y ajusté ligeramente los anillos magnéticos. No estaba seguro de cómo resultaría canibalizar el sable de luz de Luke y usar la electrónica de repuesto, pero funciona. Y parece estable... bastante. Y gracias a la ayuda de Rose, pudimos hacerlo bastante rápido.

Ella sonrió, admirando el arma en sus manos.

―Me gusta el color―, respondió Finn.

―Me sorprendió el color―, respondió honestamente―. Pensé que sería azul, como el de Luke, y una parte de mí temía que fuera rojo ... Pero el púrpura no había cruzado mi mente.

―Parece ... real―, sonrió Rose―. Como corresponde a la última Jedi.

Desenganchó el arma y se la colocó en la cadera.

―¿Hemos escuchado algo más sobre el éxito de la lucha de la Resistencia?

―No, todavía no―, suspiró Finn―. Pero creo que Poe lo logrará. Siempre lo hace.

Con la ayuda de los hutts y las otras fuerzas aliadas que habían jurado lealtad a su general, tuvieron una oportunidad, pero ¿contra toda la Primera Orden? Parecía inútil. Todo parecía desesperado. Rey sacudió la oscuridad de sus pensamientos. Ellos harían esto. Tenían que hacer esto.

―No podemos sentarnos aquí y esperar a que la Resistencia nos salve. Ben está ahí fuera, en algún lugar, muriendo. Lucharé contra todos ellos por mi cuenta si es necesario, pero...

Rose miró fijamente a Finn y luego a Chewbacca, cada uno asintiendo con la cabeza a su pregunta silenciosa.

―Bueno, es mejor esperar a la Primera Orden―, dijo Rose mientras desenfundaba su bláster―. Les daremos un infierno. Y luego tomaremos el Falcon y te ayudaremos a encontrar a Ben.

Rose miró a Finn mientras decía la última parte.

Él asintió con la cabeza.

―Por supuesto, te ayudaremos, Rey. Usaremos el escáner térmico. Lo encontraremos.

Chewbacca gruñó en afirmación y se fue a recuperar su bowblaster. Rey exhaló lentamente. «Ya vamos, Ben,» le aseguró. Era más de lo que ella podría haberle prometido antes. Las probabilidades estaban en su contra; estaba la batalla de las fuerzas aliadas furiosas sobre sus cabezas, estaban las tropas de la Primera Orden que los mantenían prisioneros, estaba Ben muriendo lentamente en la oscuridad, pero les quedaban armas, esperanza, lucha y la Fuerza. Era todo lo que necesitaban.

Mientras esperaban a que Chewbacca regresara, Rey pensó más en esas probabilidades.

― ¿Puedo preguntarles algo? ― El tono de Rey era más serio que antes―. He estado pensando en el ataque de la Resistencia. Algo me ha estado molestando y, al principio, no podía entender por qué. Pero cuanto más lo pensaba, más no podía evitar la sensación de que algo no cuadraba. ¿Les parece extraño que Poe nos haya enviado a un mundo que es un centro minero para la Primera Orden? Ben actuó como si fuera algo que la mayoría de la gente sabría. Seguramente, Poe debería saberlo entonces, ¿verdad? Quiero decir, los Hutts de alguna manera descubrieron que necesitaríamos ayuda. Y luego la Resistencia organizó un ataque contra el Finalizador, casi como si supieran que nos estarían esperando. Pero, ¿cómo lo sabrían, cuando ni siquiera sabíamos que estaban allí arriba?

Rose miró nerviosamente a Finn, y Rey sintió un escalofrío a través de ella. Sabían más de lo que le habían estado diciendo. La rabia se encendió instantáneamente, dibujando en la oscuridad.

―Será mejor que alguien empiece a hablar ahora ... ―Ella gruñó a través de los dientes apretados.

―Creo que ... ― Finn comenzó nerviosamente, ―. Que puede haber tendido una trampa para Kylo ... usándote.

«No... No, no puede ser. La Primera Orden lo derribó, no la Resistencia.»

― ¿Qué quieres decir?

― ¿Recuerdas cuando te dije que era importante que me dijeras si estabas enamorado de Kylo?― Ella asintió, preguntándose a dónde podría ir con esto, ―Bueno, eso fue porque Poe me ordenó asesinarlo. Dijo que eras cebo para una emboscada. Estaba seguro de que Kylo sabría dónde encontrarte. Cuando vi a la Primera Orden aquí, pensé que él sabía que ellos también estaban aquí. Obviamente, los soldados de asalto notarían la tierra del Halcón Milenario e informarían a Kylo. Poe sabía que Kylo tenía... tiene sentimientos por ti, y sabía que vendría por ti. Creo que su plan era que yo lo matara mientras la Resistencia atacaba al Finalizador. Ninguno de nosotros tenía forma de saber que Kylo desertaría de la Primera Orden.

Rey lo miró fijamente, temblando, mientras absorbía toda la información.

«Todo esto es culpa mía. Ben se está muriendo por mi culpa. Si lo hubiera escuchado cuando me advirtió sobre Ilum, nada de esto habría sucedido.»

―Quiero que lo sepas, Rey. No podía matarlo. Tuve mi oportunidad en las cuevas. Tenía el bláster en la cabeza y todo. No pude hacerlo.... a ti... o él. Él realmente se preocupa por ti. Lo siento.

Ella sacudió la cabeza con incredulidad.

―Pero nunca me lo dijiste, Finn―, gritó entre lágrimas―. Deberías haberme dicho. No sé qué hacer. Me siento tan traicionada. La causa por la que estaba luchando no es mejor que la Primera Orden. Debería haber escuchado a Ben. Trató de decírmelo, pero yo no escuché. Estaba tan seguro de que tenía razón. Pero ahora Ben morirá, y podemos unirnos a él ... todo por mi culpa. Poe me usó para llegar a Ben. Él nos usó a todos. Nos puso a todos en peligro como si no fuéramos nada. Y ahora nos deja en manos de la Primera Orden. Si lo vuelvo a ver, lo mataré.

Se secó las lágrimas de los ojos y reunió fuerzas.

―La Resistencia nos ha abandonado. Todo depende de nosotros ahora― Rey susurró.