Un accidente, dos mundos que colisionan uniéndose en uno.
Bybee no ha tenido precisamente suerte en la vida, sobre todo teniendo a la hermana que le ha tocado. Bianca ha intentado por todos los medios arruinarle la vida, lo que no sabía ella era q...
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ÁLBUM: Pintando corazones CANCIÓN: Everlasting Love - Jamie Cullum
—¿Qué te parece si nos quitamos la ropa?— pregunté señalando a la parte de atrás donde los chicos habían instalado un biombo y dejado un par de prendas, entre otras cosas que necesitaríamos a lo largo de la noche.
Se echó a reír y yo enarqué una ceja. ¿En qué estaría pensando esa cabecita loca? No recordaba ser tan malpensado con su edad.
—¿Ya? ¿Tan rápido quieres quitarme la ropa?
Me reí y seguí el camino hacia el biombo.
—Creo que de los dos, tú eres la que más ganas tienes de quitarme la ropa.
—¡Que te lo has creído, chato!
Entre bromas y carcajadas nos despojamos de la ropa. A veces la vida con ella parecía tan fácil, tan llevadera, otras era como estar en medio de la tormenta sin estar preparado para una.
—No sé si te quedará bien el bikini, no supe decir tu talla a Mason.
Le entregué la bolsa con un bikini y un albornoz de algodón blanco.
—¿Has pedido a Mason que me comprara un bikini? Creía que no delegabas ese tipo de cosas.
¿Cómo explicarle que pese a ser algo «íntimo» no había tenido tiempo para hacerlo todo yo?
—Últimamente no he tenido mucho tiempo, ya sabes cómo está la empresa con los nuevos proyectos y... a veces, necesito que los chicos echen una mano.
Ella asintió e inspeccionó el bikini floral y, encogiéndose de hombros se lo colocó. Tenía parte del cuello lleno de pintura amarilla y los dedos también, empezaban a ser una capa de pintura seca. Una vez listos ella me ayudó a desenrollar uno de los rollos de papel y extenderlo por el suelo.
—¿Cuál es tu idea?—preguntó ella mirando a las pinturas, buscando algún color en concreto.
—Quizá no sea fácil, pero...—pensé unos segundos antes de proponérselo—, ¿qué te parece si pintamos con los pies mientras bailamos Everlasting love?
Sonrió con dulzura.
—¿Jamie Cullum?
Saqué el móvil para ver mi lista de canciones.
—A menos que tengas otra en mente...—susurré bajando la lista mientras leía los títulos buscando otras opciones.
—No está mal, pero creo que prefiero Someone Like You de Van Morrison—musitó.
Por el rabillo del ojo le vi hundir el índice en uno de los cubos y luego frotárselo contra el pulgar como si comprobara la calidad del producto.
Negando con la cabeza, tecleé el nombre y la bajé en un segundo.
—¿Cómo lo quieres hacer?—pregunté una vez tuve la canción lista, sólo tenia de darle al play.
