Capítulo 14

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Cuando Yan Feili abrió los ojos, lo primero que le llamó la atención fue el color desconocido de la ropa de cama, seguido del rostro evidentemente aliviado de Qiu Yeyuan.

Yan Feili se sentía mareado y aturdido, y cuando movía el cuerpo ligeramente, sentía dolor por todas partes.

Qiu Yeyuan se apresuró a decirle: "General Yan, tiene demasiadas heridas por congelación y la fiebre acaba de bajar, su cuerpo aún está débil, así que no puedes moverte libremente, debes descansar bien."

Al escuchar sus palabras, Yan Feili quedó un poco confundido por un momento: "¿Qué me pasa? ¿Dónde es este lugar?"

Sabiendo que su mente aún no estaba completamente despierta, Qiu Yeyuan dijo suavemente: "Has estado inconsciente durante tres días. Este es el dormitorio del Maestro de la Puerta del Norte."

Resulta que es día cuando cayó inconsciente, Beitang Ao se dio la vuelta y lo llevó en sus brazos al interior de la casa.

Sufría de congelación en todo el cuerpo y desarrolló fiebre alta, y sangraba de la parte inferior de su cuerpo, por lo que no podía moverse libremente. Así que Beitang Ao le cedió el dormitorio y le pidió a Qiu Yeyuan que lo cuidara aquí, y se fue a vivir a otra casa.

Cuando Qiu Yeyuan dijo esto, Yan Feili recordó lentamente lo que había sucedido y sintió dolor en su corazón.

"General Yan, no ha estado comiendo, hay algunas gachas calientes aquí, levántese y coma un poco." Diciendo esto, ayudó a Yan Feili a sentarse lentamente.

Yan Feili no tenía mucho apetito, pero al ver la mirada atenta de Qiu Yeyuan, comió un poco a regañadientes.

"Doctor Qiu, siento haberle molestado tanto." Yan Feili susurró su disculpa a Qiu Yeyuan.

"General Yan, cómo dice eso. Salvar a las personas es la causa fundamental de todo doctor, no fue ningún inconveniente, y no he hecho gran cosa." Cuando Qiu Yeyuan vio el aspecto de Yan Feili, no pudo evitar sentir también el corazón roto.

Pensó que había dado a luz hace unos días y repentinamente el bebé había desaparecido, muy probablemente fue llevado por el Maestro de la Puerta del Norte.

"General Yan, como médico, tengo que decirle algo ahora. Todavía no tenía tres días de posparto cuando fue a arrodillarse en la nieve durante horas sin recuperarse adecuadamente. Aunque su físico no es como el de una mujer, aun así algunas de las causas fundamentales de su enfermedad han quedado atrás, y me temo que en el futuro, su enfermedad lo perseguirá y será difícil volver a recuperarse completamente, así que debe estar preparado."

Una enfermedad curada de forma incompleta o las secuelas que pueda dejar, a Yan Feili no le importan ni le preocupan en absoluto. Su cuerpo era una maldición, una deformidad, y no debería haber existido, e incluso se odiaba a sí mismo por tener un cuerpo así. Si no fuera por esta constitución particular, no habría dado a luz a esa pequeña cosita, y no estaría sufriendo tanto por perderlo.

Yan Feili permaneció en la habitación de Beitang Ao durante medio mes antes de que su cuerpo se curara lentamente de su enfermedad y de la congelación.

Durante este periodo, Beitang Ao fue a verlo dos veces, desgraciadamente ambas fueron cuando estaba dormido. Esta tarde, cuando Beitang Ao volvió a acudir a la habitación, Yan Feili acababa de beber su medicina y estaba despierto.

Qiu Yeyuan se retiró con el tazón de medicina, dejándolos solos.

"¿Tu cuerpo está mejor?" Preguntó Beitang Ao mientras se sentaba en el borde de la cama.

Vínculos Rotos - 断情结Where stories live. Discover now