Vínculos Rotos - 断情结

Extra 6

El viejo árbol florece.

Yan Feili tiró de él, maldiciendo a Beitang Ao en su corazón. Su hijo sólo tenía doce años, aunque acabe de convertirse en un artista marcial, no puede precipitarse en la Formación de los Cien Bambúes, una de las tres formaciones famosas del Valle Lingyin. La Formación de los Cien Bambúes es una formación que ha sido transmitida de generación en generación por el pueblo Moye, y ha sido modificada y perfeccionada por los predecesores a lo largo de los siglos. Incluso con la habilidad de Beitang Ao, tuvo que permanecer dentro de la formación durante un día y una noche antes de salir.

(Valle de las Almas Ocultas.)

Lo pequeño se esconde en la naturaleza, lo mediano se esconde en la ciudad, lo grande se esconde en la corte imperial. El Valle Lingyin es claramente un valle, pero en realidad estaba escondido entre las fronteras del territorio del Reino de Ming y el Reino de Wen. La gente está en el valle, pero el valle está en el corazón de toda la gente que vive en él.

Temiendo que Li'er entrara realmente en la formación antes de tener la edad suficiente, Yan Feili lo tomó de la mano y cambió de tema mientras caminaba: "¿No dijiste que ibas a venir hace un mes? Por qué te has retrasado tanto en llegar."

Beitang Yaori dijo: "No tampoco pensé que tardaría tanto tiempo, y luego simplemente quería venir a fin de año para recoger a mi padre y a mi papá y volver juntos a la residencia real para celebrar el Año Nuevo."

Tras una pausa, Yan Feili dijo: "No volveremos este año."

Beitang Yaori preguntó con curiosidad: "¿Por qué?"

Yan Feili no habló. Beitang Yaori dijo de repente: "Papá, has subido mucho peso." Beitang Ao escuchó esto con una sonrisa fruncida.

Yan Feili estaba avergonzado y todavía no sabía cómo responder. Pero Beitang Yaori no lo pensó tanto y dijo con una sonrisa: "Papá y padre viven libres y tranquilos en este hermoso lugar lleno de montañas frondosas y aguas cristalinas. Parece que padre ha cuidado bien a papá, y por eso ha subido un poco de peso." Mientras decía eso, miró su abdomen, que no podía ocultarse debajo de la pesada túnica negra, y dijo: "Un practicante de artes marciales no puede ser perezoso. Papá, no has sido diligente."

Beitang Ao reprendió ligeramente: "Li'er, no utilices los consejos que tu padre te ha dado para darle una lección a tu papá."

"Este hijo no se atrevería."

Yan Feili se rió y dijo: "Papá ha sido realmente perezoso en los últimos días." Después de decir eso, no pudo evitar echar una mirada de reojo a Beitang Ao.

Los tres rieron y bromearon mientras volvían a la casa. Molei, el semental de Beitang Yaori, los seguía lentamente. Beitang Yaori lo llevó al patio trasero, lo desensilló y lo dejó salir a pasear para que comiera hierba. Cuando regresó al interior de la casa con su equipaje, Yan Feili ya le había ayudado a ordenar su habitación.

"Li'er, ¿cuál es el motivo de tu visita esta vez?" Le preguntó Yan Feili mientras se sentaba en el borde de la cama.

Beitang Yaori se estaba limpiando la cara con una toalla de tela húmeda cuando dijo: "¿No te lo dijo padre?"

"No."

Beitang Ao nunca diría nada delante de él que no quisiera que Yan Feili supiera. Yan Feili tenía tacto y era muy discreto, rara vez hacía demasiadas preguntas. Especialmente desde que salió embarazado de nuevo, aunque gozaba de buena salud, estaba envejeciendo y aún tenía secuelas de su anterior enfermedad. A menudo su cuerpo se sentía débil y agotado, y su fuerza física y energía no eran tan buenas como antes, por lo que Beitang Ao no diría mucho delante de él. Pero esta vez, Li'er llegó solo al valle y atravesó la Formación de los Nueve Círculos, por lo que Yan Feili tuvo que preguntar si había pasado algo.