Capítulo 86

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第86章

Yan Feili yacía cansado en los brazos de Beitang Ao. De hecho, no se sentía muy cómodo en esta posición, por no mencionar que era extraño que dos hombres grandes estuvieran abrazados cara a cara. Sin embargo, Beitang Ao apretó sus brazos y no le permitió liberarse.

En cuanto a la forma de sus cuerpos, parece ser que los músculos de Yan Feili son más finos y delgados que los de Beitang Ao. Yan Feili tenía un cuerpo extremadamente bien proporcionado, con músculos definidos, una textura tonificada e imponente, sin embargo, sus músculos no eran afilados ni angulosos. Era muy guapo y varonil.

Pero cada vez que Beitang Ao la tomaba en sus brazos, era imposible liberarse.

El tormentoso acto amoroso de hace un momento fue tan abrumador que Yan Feili no pudo evitar pedir clemencia, esperando que se detuviera lo antes posible.

Pero, ¿cómo podría ser eso posible? A cambio, todo lo que obtuvo fue una unión aún más ávida, que lo hizo gemir incesantemente bajo el cuerpo de Beitang Ao.

Yan Feili durmió aturdido por un tiempo y cuando se despertó, descubrió que aún seguía retenido entre los brazos de Beitang Ao. Al escuchar su respiración, supo que estaba despierto, y recordando la razón por la que se había ido, preguntó: "Qianzhi, ¿está mejor el niño?"

Beitang Ao abrió los ojos, sabiendo por quién preguntaba, y respondió: "Hm."

"Escuché que parece ser viruela...." Yan Feili recordó la noticia que había escuchado cuando ingresó a la ciudad.

Beitang Ao se estremeció y dijo: "Ya no es nada grave. Por fin lo ha superado."

Al escuchar la diferencia en su voz, Yan Feili no pudo evitar estirar la mano y rodearlo con sus brazos: "Es bueno que lo haya superarlo. Si superas una enfermedad tan grave, serás bendecido más adelante."

Pero Beitang Ao recordó al verdadero Hui'er. Ese niño había nacido prematuramente y su salud era precaria desde su nacimiento, por lo que no había tenido tiempo de sostenerlo más de dos veces antes de tener que dejarlo en la Residencia Flotante y regresar al Reino de Ming. Quién iba a decir que el niño viviría una vida tan fugaz que desaparecería sin dejar rastro antes de poder dejar su huella en el mundo. Incluso su nombre restante fue sustituido por otro. Cuando pienso en ello ahora, no podía evitar sentir un gran dolor en su corazón. ¡Era realmente un padre tan cruel!

Beitang Ao tenía una mayor consideración por la decencia humana que cualquier otra persona, y era aún más terco cuando se trataba de la continuación de su línea de sangre.

Pensar en la pérdida de su querido hijo y no poder expresar su dolor, o ni siquiera poder darle un funeral decente. Este tipo de sufrimiento realmente no es humano. Por ello, podía tolerar muchas de las acciones de Yanyan, ya que ambos eran padres afligidos por una perdida.

Yan Feili vio su rostro como de costumbre, perezoso tras la lujuria, pero había un profundo dolor entre sus cejas, e inmediatamente supo que algo estaba pasando en su mente. Porque aunque se mantenía en silencio, aún podía sentir su dolor.

"Qianzhi, ¿tienes algo en mente?"

"¿Por qué lo preguntas?"

"Está escrito en tu rostro."

Beitang Ao se sorprendió ligeramente: "Por qué, ¿se ha iluminado de repente mi rostro de alegría?"

"No necesariamente." Yan Feili se estiró para mirarlo: "Los demás no podrían darse cuenta."

Beitang Ao no dijo nada y le besó el pelo de sus sienes. Por alguna razón, le gustaba especialmente besar el pelo ligeramente grisáceo de esa área. Al principio fue por aflicción, pero después fue cambiando por una desbordante ternura.

Vínculos Rotos - 断情结Where stories live. Discover now