Abyss [m-preg]

-31-

Pasaron un par de horas contemplando cómo Jackson se debatía con la mordedura. Scott había tenido que volver a su casa para cenar con su madre, y Stiles intentaba dejar de mirar el móvil nerviosamente esperando una llamada de su padre que no llegaba.

Un rato después, Jackson abrió los ojos confuso y miró alrededor. Derek se inclinó sobre él.

-Parece que se te ha curado la herida -comentó el moreno rascándose la barba.

-Ya estás listo -dijo Stiles sonriendo, aliviado de que hubiera salido bien-. ¿Te notas distinto?

-No demasiado -repuso el capitán extrañado. El otro alfa enarcó una ceja.

-¿No hueles ni oyes mejor? -preguntó Derek.

-No...

-A lo mejor tiene retraso -comentó Isaac encogiéndose de hombros-. Es decir, sabemos que mentalmente lo tiene, pero quizás los poderes le lleguen más tarde.

-Debe de ser eso -murmuró Stiles mirando a Derek-. ¿No? de lo contrario estaría muerto.

-En teoría, sí, si no se convierte tendría que estar muerto, pero es muy raro -inquirió frunciendo el ceño-. Nunca había pasado nada así.

-Joder... -Stiles chasqueó la lengua, caminando de un lado a otro del comedor-. Derek, ha tenido que funcionar. La herida se ha curado.

-Lo sé, lo sé... -suspiró y miró el reloj-. Ya no es hora, pero mañana nada más terminar el instituto iremos a ver a Deaton para preguntarle en el caso de que aún no haya mostrado sus poderes, ¿de acuerdo? Ahora será mejor que nos vayamos a casa.

Se levantaron y se despidieron de Isaac. Jackson montó en su coche, algo desilusionado por los resultados, mientras que Stiles y Derek montaban en el de este último.

-No lo entiendo. ¿Qué he hecho mal? -preguntó Stiles apesadumbrado.

-No has hecho nada mal Stiles. Jackson ha pasado por lo mismo que ustedes, pero no ha obtenido el mismo resultado que vosotros. El problema es él, me temo.

-¿Problema? Oh... No me gusta esa palabra. Espero que mañana me diga que nos ha oído mientras teníamos sexo desenfrenado esta noche.

El mayor enarcó una ceja con una sonrisa y se mordió el labio.

-¿Es una promesa implícita, Stilinski? Porque si no es capaz de cumplirla me voy a sentir muy decepcionado. -Stiles lo miró de reojo y sonrió.

-Tenerte para mí sólo los fines de semana me sabe a poco, así que estos días pienso dejarte seco.

El moreno luchó por no jadear y sonrió más ampliamente, acelerando un poco. Llegaron y fueron a la puerta de entrada, y mientras Derek le sostenía la puerta a Stiles, distinguió una figura, adivinando que era Peter, que los observaba. Vio los ojos rojos de su tío y se apresuró a entrar. Abrió su puerta y nada más cerrarla besó con ansias a Stiles, que gimió contra sus labios ante tal ataque.

-¿A qué ha venido eso? -preguntó Stiles jadeando-. Pensaba esperarme a después de la cena.

-Lo necesitaba -murmuró suspirando frente a los labios de Stiles, y se separó de él-. Hoy es un día que me apetecería olvidar, pero tú eres lo único estable que siempre es bueno, no algo que me intenta matar ni nada -comentó dejando las llaves a un lado y descalzándose. Caminó sin zapatos sobre la moqueta y cogió el teléfono-. ¿Pedimos unas pizzas?

-¡Sí! -respondió, contento con la idea-. Y vemos una peli. Hagamos que sea una buena noche.

-Mira en aquel armario que hay muchos DVDs y yo pido las pizzas, quieres la barbacoa, ¿no? Nada de verduras que toquen tu pizza bendita. -Stiles le sacó la lengua y se dio la vuelta para mirar en el armario.