Marbella Vice 〰 Anya

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Holi ❤ este es un pedido de @its_sugar_RaaY  espero que te guste :D❤


El sabor del hierro recorría toda tu boca, sentías pesadez en los ojos pero intentabas mantenerlos totalmente abiertos a la espera de lo que pudiera pasar, el dolor de tu cuerpo ayudaba a mantenerte consciente pues con un simple movimiento hacías que el dolor aumentara, intentaste soltarte de aquellas bridas que tan apretadas estaban, tanto que jurarías que perderías tus manos de un momento a otro.

Allí tirada de rodillas en el suelo miraste hacia el techo rezando a todo lo que conocías que alguien llegara y te sacara de aquella situación en la cual en ese instante no sabias ni como habías llegado ya que tu único recuerdo era haber parado a comprar una botella de agua para después seguir patrullando. Escupiste con las pocas fuerzas que tenias y en ese mismo instante supiste de donde venía aquel sabor a hierro, suspiraste y no supiste de donde vino aquella fuerza para intentar levantarte de tu sitio.

Con todo el dolor del mundo lo conseguiste pero duró poco ya que no estabas sola en ese sitio, una patada en tu espalda hizo que volvieras a caer haciendo que tus rodillas se golpearan contra el cemento, conforme tus huesos tocaron el suelo tu gritaste de dolor.

El hombre que estaba a tus espaldas te cogió del pelo y te enderezó, de un golpe te dejó arrodillada otra vez en el mismo sitio.

- Quédate quietecita

Tu no respondiste ya que estabas más centrada en el dolor que tenias por todo tu cuerpo, tu respiración agitada se aceleró más al ver la cara de aquel tipo que tanto conocías y que en el fondo creías que le caías bien pues era el amigo de tu chica. Pero las desgracias no vienen solas, la puerta de aquella sala se abrió, al principio no pudiste reconocer quien era pues era solamente una sombra en mitad de mucha luz, aquella sombra bajo las escaleras haciendo que la reconocieras en ese mismo instante y eso que llevaba una bandana en la cara

- ¿ Anya?, ¿Cielo qué haces aquí?

- Su trabajo. Dijo Hugo apoyado en la pared mientras empezaba a fumarse el cigarro de la boca

- ¿Cómo que su trabajo?. Dijiste mirando a Anya.

- Oh que no se lo has dicho, ______ ella es Anya una asesina de la mafia y tú , bueno tú en concreto no, tu trabajo más bien es el que tiene que matar, realmente tu solo eres un simple mensaje para tus superiores.

Conforme Hugo terminó aquella frase miraste a la rubia a los ojos, ella apartó la mirada y se quedó mirando un punto a lo lejos, en ese momento tu alma se había destrozado en mil pedazos, tu novia, la chica que solo creías que su mayor delito era robar en un badulaque ahora resultaba que era miembro de una mafia y no un simple peón de los que reparten pirulas o roban sino nada más ni nada menos que una asesina y al parecer a partir de ese momento una asesina de policías.

No supiste cómo pasó ya que estabas intentando asimilar todo lo que estaba ocurriendo, la chica sacó su arma y te miro fijamente a los ojos, el brillo del arma a la luz de los rayos del sol hizo que miraras en su dirección.

- Lo siento. Dijo antes de apretar el gatillo

El sonido de un pitido retumbaba en tus oídos, poco a poco fuiste abriendo los ojos, la luz de las lámparas de la habitación te cegaron momentáneamente, abriste y cerraste los ojos intentando acostumbrarte a la luz cuando ya lo conseguiste observaste toda la sala.

- ¿Dónde estoy?, ¿ Qué narices ha pasado?. Susurraste mientras te tocabas la cabeza

- Te secuestraron, te torturaron y te metieron un tiro, si te soy sincero ha sido un milagro que sobrevivieras a eso. Dijo Greco que estaba a tu lado sentado.

- ¿ Quién lo hizo?

- Todavía no lo sabemos, lo único que sabemos es que es un coche gris con dos personas las que te soltaron como un saco de papas en la puerta de la comisaría, pero es difícil encontrar algo con eso solo, ¿te acuerdas tú de algo?

- No, lo único que recuerdo es parar a comprar algo y de que antes de bajarme estaba hablando por radio con Cano, pero ya mas de eso no tengo recuerdos. Dijiste echando la cabeza hacia atrás mientras te tapabas la cara con tus manos.

- Tranquila ya lo recordarás. Dijo poniendo su mano en tu pierna para darte ánimos.

La puerta de tu habitación se abrió y por ella entró tu novia con cara de preocupación, si tan solo los de aquella sala supieran que la chica que acababa de entrar era nada más ni nada menos que la que intentó asesinarte que diferente hubiera sido todo a partir de ese momento.

One Shot Youtubers and StreamerWhere stories live. Discover now