[FANFIC/AU] Sólo es un contrato (Jinx)

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Jaekyung regresa rabioso a casa de la arena, ¡¿Cómo diablos perdió esa pelea?! Negaba internamente que había sido descalificado de la temporada, perdiendo su oportunidad de ganar el campeonato y mantener su título.

No tuvo sexo con Dan antes de subir al ring, era su culpa, tenía que ser su culpa. ¿Cómo diablos sería ignorado por él? Lo deja vivir en su casa, paga el tratamiento hospitalario de su abuela. Lo mínimo que podía hacer era estar siempre disponible para él, para tener sexo, sus sesiones de masaje y de alguna manera ser su amuleto de la suerte. Sobre todo para tener sexo.

Cuando llegara a casa iba a tener una conversación bastante larga. Y le tendría que dar muchísimas explicaciones del porque mierda no llegó a la arena, no contestó ni sus mensajes ni sus llamadas.

Casi una hora después de la llegada de Jae, se terminaron dos botellas de vino y una medio vacía. Se escucha que alguien está tecleando la contraseña de la puerta principal, y desde el otro lado, la puerta es empujada por un Dan emocionalmente destruido, una mirada sin vida y rota, con una urna en sus manos temblorosas con un nombre grabado en el metal, Kim Heena, el nombre de la ahora difunta abuela de Dan. Ha estado sollozando todo el camino a casa. Llevaba puesto su uniforme y su distintiva chaqueta gris.

El vestíbulo del penthouse solo tenía una luz encendida, no había señales de Jaekyung. O eso pensó.Apenas unos pasos adentro, un puñetazo sale del lado izquierdo de Dan, impactando ese lado de su cara. El golpe fue lo suficientemente fuerte como para tirar a Dan al suelo, pero nunca soltó las cenizas de su abuela.

— Tú, maldita perra, ingrato, ¿crees que es un momento adecuado para estar de vuelta en casa, eh? — La voz ronca profunda, y completamente llena de ira de Jaekyung hace presencia, al igual que su intimidante figura - ¿Dónde diablos estabas?

Dan, ahora aterrorizado, intentaba incorporarse solo para recibir una bofetada unos segundos después, logró hacerlo sangrar por la nariz y los labios.

— Jaekyung, por favor detente – dice la voz de Dan temblando mientras aún solloza.

— Responde a mi puta pregunta - dice Jaekyung, ahora más furioso de lo que ya estaba, tomando a Dan por el cuello de la filipina azul marino de su uniforme, cortandole la respiración — ¿¡Dónde carajos estabas!? - vociferó Jaekyung, con los ojos que parecían hechar llamaradas de lo furioso que estaba. Su voz al momento de gritar, dejó escapar un gruñido completamente cargado de ese enojo casi inhumano.

- S-su-e-e-el-te-em-e - dice Dan pataleando con tal de zafarse del agarre de Jaekyung, pero todo esfuerzo era completamente en vano — N-n-o r-es-p-i-iro - alcanzaba a enunciar con lo poco que tenía de aire en los pulmones.

Anteriormente los chicos del Team Black hablaban con Dan cuando Jae estaba en otro lado del gimnasio, casi en un tono de terror, que de por sí Jaekyung era fuerte y de pabilo corto, enojado era una bestia sin cadenas, podría matar sin piedad a alguien. Ahora más que nunca, comprendía el porque siempre hablaban horrorizados sobre como era él enojado.

Dan pateó duro el abdomen de Jae, lo suficientemente fuerte como para hacer que Jae lo soltara. Dan cayó sobre su trasero, aún con la urna en manos. Jaekyung apestaba a alcohol. Eso era aún peor. Jaekyung ya se había puesto borracho con Dan una vez, y terminó con un dolor completamente insoportable de caderas.

— Fui... Al - Dan dijo para posteriormente toser — A... Ver... A... M-i abuela.

— Mentiroso, seguro estuviste viéndote con otro hombre ¿verdad?, vendiendo el culo como la p-

— ¿¡Porqué cree eso Jaekyung!? Estoy teniendo una noche de mierda recibiendo noticias del diablo y usted viene y remata golpeándome, insultando, llamándome de puta a cosas más hirientes, pero supongo que usted ganó su pelea, así que no entiendo el enojo de s... — Antes de continuar, Jaekyung lanzó su puño en contra del rostro de Dan, Dan como Dios le dió a entender, pudo esquivar el golpe.

— ¡Ja! ¿Y ahora te toca burlarte de mí? ¡Por tu puta culpa perdí la pelea! — vociferó Jaekyung — ¡Te llamé 10 veces! ¡Y nunca contestaste, maldita sea!

— ¡Nunca me entró la llamada porque no traigo mi teléfono...

— ¡Son... — un puñetazo en el brazo — puras... — en el otro brazo — maltidas — Y otro impactando en la nariz — excusas! — gruñó Jaekyung.

— ¡Cuando yo necesite ocupar tu agujero, donde sea, lo ocuparé! ¡No está a juego tu decisión! ¿O necesito recordarte que eres mi propiedad? — tomó a Dan por la mandíbula, solo obteniendo una mirada de horror, miedo, dolor, desesperación y sin vida de Dan, algo le decía que algo andaba mal, pero el alcohol se encargó de difuminar eso, de aseguro solo actuaba — ¡Tú! ¡Tú más que nadie eres el responsable de mi derrota! ¡Te va a tocar pagar por tu imperdonable falta! — dice entre dientes buscando intimidar a Dan, pero es inútil, Dan tenía en otro lado la cabeza.

Dan solo pensaba solamente en proteger las cenizas de su abuela. Jaekyung notó que abrazaba algo con mucha fuerza, apenas si lograba ver qué era por la poca luz que había. Y de un solo jalón al tomar a Dan del brazo, haciéndolo soltar la urna, destapándose y gran parte de las cenizas se salió de ahí.

— ¡Espere! ¡N-o! Aaaaah — Dan gritó con lágrimas en los ojos, juraba que se había desgarrado la garganta, estaba intentando zafarse, pero el agarre de Jaekyung es su brazo era demasiado fuerte.

— ¡Así de fuerte te quiero oír gemir maldita sea! — dijo Jaekyung.

Aún forcejeando, ambos llegaron a la habitación de Jaekyung, estaba hecha un desastre, muchas de las cosas estaban rotas.

Jae lanza a Dan a la cama.

— Me importa un carajo si no te preparaste, ni pienses que me detendré.

Dan sentía venir lo peor. No tenía escapatoria.