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Jaekyung llegó a casa de su trote diario, esto lo ayudaba a olvidar sus pesadillas y algunos pensamientos pesimistas, a veces. Pero esto no le estaba quitando el susto que tenía respecto a ese sueño. Era demasiado real para ser un sueño, o tal vez es algo que teme que haya sucedido, espera un momento, ¿miedo? Un hombre como él nunca debería tenerlo.

De regreso en casa, se dio una ducha y aprovechando el tiempo, el peleador comenzó a hacer los ejercicios que Dan le indicó que hiciera para aliviar la rigidez de ambos brazos. Todo estaba doliendo como el infierno, pero era esto o operarme y estar en rehabilitación por mucho tiempo.

Ya unos momentos después, Jaekyung regresa a su habitación y se pone a revisar su closet repleto de pura ropa en blanco y negro. Cómo ese día en el orfanato iban a ver varios eventos de deportes, el azabache se puso su ropa normal de entrenamiento, leggins negros sobre un short blanco, que acentuaba sus piernas de dios griego, una playera de licra gris de manga corta, y aparte traía en una maleta otro conjunto pero de ropa más casual para después.

Solo se miró en el espejo deteniéndose, al dirigir fijamente su mirada a los ojos. No podía sacar de su cabeza aquella imagen. Por alguna razón la expresión de miedo de Dan ahora le estaba causando preocupación. Todavía se sentía inquieto por ese sueño, todavía esperaba que ese sueño fuera falso. Esperaba que lo fuera. La intriga lo estaba carcomiendo hasta que sonó la alarma en su teléfono, recordándole que tenía que estar en camino al lugar al que tenía que ir ese día. Por contrato con uno de los patrocinadores tenía que ir. Pero no esa precisamente la razón por la que iría.

Jaekyung tomó sus cosas y, ya una vez listo para irse, a un lado de las llaves de su auto, Jaekyung notó la hoja de papel doblada que ponía que era para él, con la letra de la abuela de Dan. Jaekyung solo se limitó a tomar las llaves, pero se quedó viendo aquella hoja. No sentía que fuera correcto leerla desde ese día que la encontró adentro de la urna. Solo se quedó mirando la caligrafía de la ya fallecida Heena que ponía "Para el paciente de mi Dan". La guardó en su bolsillo, tomó su maleta y se hizo camino hacia el orfanato.

[Lean con voz de Fedelobo]
Y mientras tanto mi poderosisimo Dan glúteos parados y Jihoon pechos de oro...

Ambos amigos estaban en el auto de Jihoon, de camino a un lugar que estaba fuera de la ciudad donde vivían ambos amigos. Hace una hora, llegó un mensaje al teléfono de Jihoon, y luego, rápidamente, el samoyedo y el hámster se dirigían a su destino.

- ¿A dónde vamos Jihoon?

- Cuando lleguemos lo sabrás - dice Jihoon quien iba manejando muy concentrado para no desviarse porque era una ruta que desconocía, todavía.

- En 2 km, de vuelta a la derecha, y en frente tendrán su destino - dijo la voz del teléfono de Jihoon que estaba indicando la ruta.

Dan se rió un poco con la cara de Jihoon, estaba demasiado concentrado conduciendo, parecía un juguete articulado que hace movimientos bruscos con la carretera y su teléfono con la ruta.

— Ni sabía que había un orfanato en esta parte de la ciudad? — dijo Dan mientras observaba el edificio al que se acercaban.

— Yo tampoco, la dirección marcaba aquí — dice Jihoon — Pero ni idea porque me mandaron mensaje, solo decía que necesitaban unos médicos.

— Es el que van a cerrar para remodelarlo, creo, lo ví en las noticias — dijo Dan reconociendo el nombre que había visto en la cápsula del noticiero, y que estaba grabado en una placa de metal "Orfanato Bit".

Lapso de tiempo...

Los niños del orfanato armaron equipos con la gente que fue invitada a participar, celebridades, bomberos, policías, doctores y deportistas. Desde la mañana hubo muchísimas actividades en dónde los equipos que ganaran recibían puntos que equivalen a wones para parte de la educación de los pequeños huérfanos.

En un juego de jalar la cuerda, todos los invitados formaron equipos, Jaekyung y Dan encabezaron sus equipos, Dan se sorprendió mucho por ver a Jaekyung ahí, ya que él no era de venir a este tipo de eventos. Los niños iban a participar en una ronda aparte. El equipo donde estaba Jaekyung ganó. Al momento de el jalón que les dió la victoria, Dan y su equipo se cayeron, ensuciándose de tierra y lodo. Los encargados del orfanato les ofrecieron darse una ducha en el área de regaderas.

Dan y Jihoon caminaron hasta donde Jihoon había estacionado su auto para cargar su mochila que solía usar cuando trabajaba con el Team Black, donde tenía su ropa de repuesto y algunas cosas para ducharse.

— Aquí tienes, champú, jabón, compré un zacate aquí cerca — dice Jihoon, quién tenía una diadema de orejas de perro puesta en la cabeza. Regalo de uno de los niños. Y se acercó a Dan y lo olió — Hueles a tierra.

— No, huelo como ese perfume de Dior que promueve Johnny Depp — respondió Dan con sarcasmo, haciendo que él y Jihoon se echaran a reír.

Jaekyung, quien los siguió, solo vio en la distancia la forma en que Dan miraba a Jihoon, podía decir que la mirada era cálida. A decir verdad, se sintió celoso de eso, porque Dan nunca lo miró de esa manera, ni siquiera en las últimas citas que tuvo. Cuando vio que ambos regresaban al orfanato, Jaekyung se dirigió a su auto por sus cosas, estaba sudoroso y necesitaba ducharse también.

[FANFIC/AU] Sólo es un contrato (Jinx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora