[FANFIC/AU] Sólo es un contrato (Jinx)

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Durante el camino hasta allí, Dan y Jihoon estaban hablando de cosas al azar, una de esas fue el capítulo del drama que estaban viendo el fin de semana pasado, faltaba uno para el episodio final.

— Y Daniela ahora espera gemelos, me hizo llorar la maldita escena — decía Jihoon mientras manejaba — Y de los dos el más llorón eres tú.

— Pues mira, el que lloró más fuiste tú — dijo Dan, riéndose porque Jihoon parecía que se le querían salir nuevamente lágrimas de los ojos — Hoon, fuera de cualquier broma o algo por el estilo, ¿estás bien? Has estado bastante llorón estos días.

Jihoon suspiró lentamente, para luego tragar saliva y empezar a explicarse.

— Bueno... ¿Recuerdas la vez que me dijiste que no tuviera esperanzas en Heesung?...

— Sí... ¿Ocurrió algo?

— Bueno... creo que lo hice... La última vez que nos vimos nos cuidamos mucho el uno al otro, no sólo en el... ámbito sexual, sino en el... ¿romántico? — dijo Jihoon, doblando a la izquierda en una calle —  Me emocioné bastante, no es que tenga miedo de salir con él, bueno, un poco, porque ya sabes lo duro que es ser homosexual en el país.

— Comprendo.

— Pero siento que para él, solo soy más que un tipo con el que simplemente coge, y apuesto a que no sou el único durante este plazo — dijo Jihoon — Y lamentablemente me hice un montón de ilusiones imaginándome ciertos escenarios con él...

— Bueno... no sé qué decir en esos casos... No es que haya estado en una situación similar, todavía.

— Continúa 1km por la calle y frente a ustedes estará su destino — sonó el teléfono de Jihoon, en el que se mostraba la ruta para llegar.

— Pero en fin... Espero este malestar se acabe pronto... Dios… Estamos cerca — dijo Jihoon, arreglándose el cabello con una de sus manos — Oh Dios… Se ve majestuoso desde aquí.

Dan, que estaba jugando con sus manos, se giró para ver frente a él, a unos varios metros de distancia, estaba la gloriosa mansión, las luces eran violetas y blancas.

— Bueno... Dan... Yo... necesito hablar contigo de algo, un poco importante. Sé que estarás con Jaekyung toda la noche y casi nulo tiempo juntos tú y yo, así que quiero aprovechar el tiempo, sería mejor que lo hablemos ahora antes de que llegar allá.

— ¿Hablar acerca de qué? — dijo Dan con una mueca de duda en su cara.

Lapso de tiempo...

Dan estaba esperando en la entrada junto a Jihoon, la mansión Frost era como un palacio moderno, tan majestuoso pero imponente.

Dan estaba jugando un poco con sus manos en lo que esperaba a Jaekyung para poder ingresar, mientras que tenía el abrigo negro que el pelinegro le prestó. Heesung ya había llegado por lo que Jihoon entró con él, aunque antes de irse, Dan le dijo que lo mejor que puede hacer Jihoon es hablarlo con el actor, y a su vez Jihoon le dijo que pensara un poco en su respuesta de lo que hablaron en el auto.

Heesung se sorprendió al ver que Jihoon y Dan eran amigos, y se alegraba de tener a alguien en común.

— Eh ¿Disculpe? ¿Está esperando a alguien? — menciona uno de los encargados en la entrada al final de la escalinata, viendo a Dan.

— Estoy esperando a Joo Jaekyung — dijo Dan, mirando al chico, era pelinegro con ojos azules.

— Oh ya... Si gustas, para que no pases frío, puedes pasar al vestíbulo y esperarlo, es que el frío ya empieza a mostrarse — dijo el chico, quitando el cordón que llevaba a la escalinata principal de la mansión — Eres invitado de Joo Jaekyung, entonces ¿Tu nombre cuál es?

— Sí, Kim Dan — dijo el castaño, algo nervioso, acomodando el cuello de aquel abrigo.

— ¿Kim Dan? — dijo el chico mientras veía en la libreta que vendría a ser la lista de invitados, y así, el nombre de Dan aparecía a lado del nombre del azabache — Oh, sí, te tengo anotado, perfecto, pasa chico.

— Gracias ehh... Gyeongjoon.

— No hay de qué chico, disfruta el evento — dijo el ojiazul.

Dan empezó a subir por la escalinata que llevaba a la entrada principal de la mansión, llegando así al inmenso vestíbulo, en donde había mucha gente en vestidos de noche, palazzos, trajes elegantes, se percibían los millones de wones en cada prenda.

Dan no reconocía a casi muchos, bueno, solo logró reconocer a Matthew Raynor, un escultor bastante popular acompañado de un chico algo pálido. Su última exposición en Moscú, Rusia, le otorgó muchísimos reconocimientos. Y a Baek Nakyum, un pintor que logró varios premios en Francia.

— Dan — el castaño escuchó una voz familiar, alzó la mirada.

Y ahí estaba, Joo Jaekyung en su forma más elegante y formal. Y para su sorpresa, llevaba puesto el traje que había visto en el escaparate de la tienda, aunque no traía la corbata puesta, acompañado de unos zapatos negros. Se veía tan bien.

— Oh, Jaekyung — dijo Dan acercándose a él — Te ves bien.

— Gracias, tú también, te ves muy guapo esta noche — le dijo Jaekyung a Dan, sonrojándose, mientras que el otro se estaba sonrojando por las palabras de Jaekyung — Bueno, siempre te ves así pero esta noche estás más guapo que nunca.

La cara de Dan terminó por pintarse se un color rojo.

— Sí... Gracias, y... — dijo Dan mirando hacia abajo, mirando el bolsillo del saco de Jaekyung, había una corbata — ¿Y esa corbata?

— Casi llego tarde porque no pude hacer el puto nudo— dijo Jaekyung sacando la corbata, que era azul y roja — así que decidí no usarla.

— Dime, ¿no sabes anudar una corbata? – dijo Dan en un tono más bajo.

— Creí que lo sabía, supongo que no — dijo un poco nervioso — Pero aquí no, la gente siempre está criticando.

— Bueno... ¿Hay una habitación cerca? Puedo ayudarte con el nudo.

— Creo que hay una por allá.

Dan tomó de la mano de Jaekyung, caminando hacia esa habitación para poder hacer el nudo de su corbata.