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— Mira mamá, el guante de plastilina que hice — dijo un pequeño Jaekyung mostrando completamente orgulloso su escultura.

— Ahora no Jae, mamá está viendo algo del trabajo — dijo aquella mujer.

Jaekyung solo se quedó cabizbajo, y se fue de la cocina, y emprendió camino a dónde estaba su papá, que tenía su laptop encima de una mesa en la sala de estar.

— Papá, mira, lo hice en la clase de arte — dijo el pequeño Jaekyung extendiendo sus brazos.

— Ahora no Jae, estoy en una reunión — dijo aquel hombre — En 10 minutos me lo enseñas.

— Pero papá — dijo Jaekyung.

— Jae, por favor, estoy trabajando, ahora no, tal vez más tarde — dijo el papá de Jaekyung.

El pequeño, cabizbajo, corrió a su habitación, con unas pequeñas lágrimas en los ojos.

Fin del flashback

— ¡SEÑOR JAE! ¿Está bien? — preguntó el pequeño Jun, quien estaba frente a él en la mesa del comedor, sacando a Jaekyung se sus pensamientos.

— Lo siento, no sé que estaba pensando, estabas diciendo algo ¿Verdad? — dijo Jaekyung mirando los ojos inocentes del peliplateado.

— Si señor, Jun estaba hablando del día en que crezca — dijo la pequeña Eunbi — será un luchador como usted señor — dijo el pequeño.

— Eso es bueno de oír, pero ahora, no se enfoquen en eso, enfoquense en lo importante aquí, que ahora es su escuela, créanme que es muy importante ahora.

— Pero es difícil señor Jae

— No me llamen señor por favor chicos, no soy tan viejo, solo llámenme Jae o Jaekyung — dijo el azabache viendo a los niños — Creer que es difícil es algo en la cabeza, uno tiene que aprender a su propia manera, a unos les sirve leer, hacer esquemas, hacer un apunte, hay diferentes formas de aprender, una vez encontrando la forma de como aprenderlo, todo será fácil.

— ¡Wow! — dijeron Jun y Eunbi al unisono — ¿Usted cursó la universidad señor?

— No... Y me hubiera gustado. En la preparatoria fue cuando empecé en las ligas profesionales, y de ahí empecé, y llegué hasta donde llegué antes de... De perder — dijo Jaekyung antes de dar un bocado a la comida — Pero les prometo a ustedes dos que me encargaré de recuperar el título de campeón de peso semipesado.

— Lo hará señor, todavía es invencible — dijo el pequeño Jun, comiendo el ramyeon de su plato.

— Lo sé Jun, pero gracias de todos modos — dijo Jaekyung sonriendo de manera ladina a los niños.

Lapso de tiempo...

Luego de unas palabras de los cuidadores, se supo que el fondo alcanzó el objetivo de dinero, por lo que el orfanato iniciaría la remodelación el próximo mes, y los huérfanos tendrían dinero para su educación y su subsistencia. A petición de los niños del equipo de Jaekyung, que ganaron la mayor cantidad de juegos en las actividades, el luchador entregó el cheque por el dinero de la remodelación a los cuidadores. Uno de los cuidadores, el Sr. Lee Hwa, que cuidó a Jaekyung durante algún tiempo fue quien lo recibió. Jae hizo todo lo posible para no derramar una lágrima en ese momento. Nunca se sintió en deuda con nada más que el orfanato, el lugar que lo vio crecer y le dio un hogar.

Después de que todos hicieran un brindis por los niños y su futuro, los invitados regresaron a sus hogares.

Jaekyung llegó a casa después de una hora de viaje, no se sentía cansado, necesitaba calmarse un poco, porque no le gustaba ver a Dan junto a ese hombre. Deseaba que fuera él. Pero todavía necesitaba la respuesta sobre las noches que Dan menciona.

Y ahora le vino a la cabeza una pregunta más, ¿por qué ha vuelto a recordar su infancia? Específicamente su infancia antes de quedarse huérfano. No recordaba nada de ella. Había muchos pensamientos y dudas dentro de su cabeza, que juraba que en cualquier momento la cabeza le iría a explotar.

Una vez que dejó en un bote para su ropa sucia. Jaekyung se colocó su traje de baño ajustado, y se dirigió a la piscina de su penthouse para nadar y despejar su mente. Además del sexo, también nadar lo relajaba. Tenía una pelea, dentro de 2 meses, así que tenía que empezar a prepararse, no iba a mentir que sentía un peso más grande en los hombros, porque será su primera pelea después de su descalificación, así que sabía que los medios se irían sobre él a pesar de las declaraciones que dió después de la pelea con Grant.

Después de una hora hora nadando, ya con la cabeza más despejada, el peleador se regresó a su habitación para darse una ducha que duraría al menos 10 minutos, empezando a realizar los ejercicios para la rigidez de sus hombros, que ya había disminuido bastante ya que con un medicamento que Dan le recetó y la crema que el ocupaba para sus masajes estaban haciendo efecto, si antes no podía elevar su brazo a 30°, ahora podía elevarlo hasta los 60°.

Y ahora venía la parte que menos le gustaba, abrir el agua fría para relajar los músculos. Odiaba bañarse con el agua fría. Tenía sus motivos. Al abrir la perilla del agua fría, solo suspiró pesadamente, dejando correr el agua por todo su cuerpo.

Después de la ducha, secándose el cabello, solo dejándose el pantalón de dormir puesto, Jaekyung empezó a caminar por su enorme casa. A pesar de ya vivir ahí un muy largo tiempo, llegaba a perderse a veces. Se dirigió a la cocina para tomar un vaso de agua.

Mientras hacía esto, el azabache dirigió su mirada a su reserva de vino que tenía en casa, empezó a mirar cada una detalladamente, la mayor parte de las botellas fueron compradas por él, unas eran de colección, otras eran algo recientes.

Pero algo que lo sacó un poco de onda fue que donde se supone que estaban 5 botellas, que eran de sus vinos favoritos, ya no estaban. No podía ser que las hubiesen robado, la puerta a su penthouse tenía dos cámaras de seguridad, y en cualquier intento de robo, se contactaría con la policía inmediatamente.

No te lo diré porque lo recuerdas demasiado bien, pero aparentemente estabas demasiado borracho — sonó la voz de Dan en su cabeza.

Todo indicaba que el se las tomó. Y que esas botellas de vino están relacionadas a aquellas noches.

[FANFIC/AU] Sólo es un contrato (Jinx)On viuen les histories. Descobreix ara