Epílogo 6/?

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Después de sentir más frío y de que la nevada empezaba a hacerse más intensa, ambos chicos caminaron con dirección al penthouse del más joven, no tardaron mucho en llegar.

— No ha cambiado mucho el lugar, pasa — dijo Jaekyung dejando entrar a Dan a su penthouse. Y tenía razón, todo seguía igual, salvo por adornos que iban acorde a la temporada, incluso un bello árbol de Navidad adornado con cosas de colores neutros dando con el ventanal.

El espacio estaba decorado con un gusto exquisito, donde cada detalle parece cuidadosamente seleccionado para crear una atmósfera acogedora y sofisticada al mismo tiempo.

La sala de estar, iluminada por la luz suave que se filtra a través de las cortinas blancas. Los tonos neutros se combinan con toques sutiles de color que aportan vida y personalidad al ambiente.El suelo reflejaba la luz cálida de las lámparas de pie.

En una esquina, una mesa de cristal estaba adornada con velas perfumadas y pequeños detalles decorativos, agregando un toque de encanto y elegancia. Las cortinas largas y fluidas se mecen suavemente con la brisa, creando un ambiente de serenidad y calma.

— ¿Adornos navideños?... A decir verdad... nunca te imaginé como alguien que decoraría su hogar para la Navidad.

— Bueno... Es apenas la segunda vez que lo hago — comentó Jaekyung, tomando el abrigo de Dan y dejandolo en una pequeña perchera de acero que tenía — Desde que te fuiste sentí que mi casa se veía un poco lúgubre durante las festividades, así que decidí darle... Algo de vida en este año.

— Lugubre... ¿Qué te hizo cambiar de opinión? — dijo Dan, acercándose a dónde estaba Jaekyung, tomando su bufanda y colgando esta en el perchero.

— El año pasado fue el primero en el que realmente me sentí solo durante las fiestas, antes del año pasado no era algo que realmente me importase, pero,... decidí adornar para alegrar un poco el lugar y mi ánimo.

— Entiendo... Te seré honesto, me sorprende, pero me gusta. Le da un toque elegante al lugar.

— Ah, ¿de verdad? Pensé que no te gustaría — dijo Jaekyung, mirando a Dan, mirando que tenía una cara de "¿En serio?", y en seguida, rompió a reír — Estaba bromeando...

— Me encanta. Además, incluso si fueran solo dos adornos, este lugar se vería elegante. Es todo tuyo.

— Mío no del todo... Y tal vez las festividades no sean tan malas después de todo.

Ambos comparten una risa mientras exploran el penthouse adornado. El ambiente festivo y la decoración cuidadosamente elegida crean una atmósfera acogedora en el hogar de Jaekyung, dando inicio a una nueva tradición que ambos podrían compartir en las festividades.

Jae guiaba a Dan por la casa, dónde finalmente, llegaron a la habitación principal, donde la luz suave de las lámparas de noche baña la habitación en un resplandor acogedor.

— Lo único que al parecer se mantiene íntegro es la habitación... No tiene muchos adornos.

Dan observa alrededor, admirando la sencilla elegancia de la habitación. La cama del lugar seguía siendo grande y acogedora, cubierta con sábanas suaves y acogedoras, y alguna de las cobijas extra que tenía Jae guardadas en su armario.

Jaekyung se acerca a Dan, su proximidad cargada de electricidad mientras sus miradas se encuentran.

— Si no te importa... Puedes pasar la noche aquí... La nevada no parará hasta mañana por la mañana — dijo Jaekyung — Hay mucho espacio para los dos, y... bueno, me encantaría tener tu compañía.

Dan siente un cosquilleo de emoción recorrer su cuerpo ante la sugerencia de Jae. La idea de pasar la noche juntos, en la cálida intimidad de la habitación de Jaekyung, le llena de un cálido anhelo.

— De hecho sí me gustaría — dijo Dan — Pero dame unos minutos, todavía necesito acostumbrarme a la zona horaria.

— Tómate el tiempo que necesites — dijo Jaekyung admirando a Dan una vez más, estaba tan guapo y atractivo como el día que se fue.

Jaekyung devuelve la sonrisa de Dan con una mirada llena de cariño y anticipación.

El aire se carga con la promesa de una noche llena de amor y conexión, mientras Jae y Dan se preparan para disfrutar de la cálida intimidad de su compañía mutua.

Un rato más tarde...

Después de unas horas acostumbrándose un poco ya, y de que viera un rato la nieve caer tras el enorme ventanal, Dan se hallaba de pie, frente al espejo mientras se colocaba su mameluco de hamster que traía en su maleta. La tela suave y esponjosa lo envolvía y le abrigaba del frío, creando una imagen adorable y cómica a la vez.

Mientras tanto, Jaekyung se asomó por el marco de la puerta del vestidor de la habitación, su rostro formó con una expresión de ternura al ver a Dan en su atuendo peculiar, amaba ver a Dan tan alegremente con el mameluco puesto.

— ¿Qué estás mirando Jae?

— A tí y lo lindo que te ves usando eso.

— Soy un hamster ¿No es adorable? — dijo Dan, girándose, viendo a Jaekyung, haciendo una pose de hamster cuandonesta asustado, Jaekyung solo asomaba su cabeza — Lo compré hace como un año... ¿Te gusta?

— Me gusta y me gustas, dos de las cosas que me gustan en una — dijo Jaekyung — No entiendo por qué un hámster se viste con un mameluco de hámster... — dijo Jaekyung, obteniendo un puchero de Dan.

— ¿Por qué solo estás mirando a través de ese marco? Sal de ahí.

— Me gustaría pero... me da un poco de vergüenza... Prométeme que no te burlarás de ello.

— ¿Por qué tendría que hacerlo? Sal.

Jaekyung se acerca tímidamente, saliendo de su vestidor con un mameluco de lobo que parece más orejas de perro que de lobo. Se siente un poco avergonzado por la situación, pero la diversión brilla en sus ojos.

— No suelo utilizarlo mucho, sólo cuando me apetece... Creo esta vez lo ha de ameritar — dijo Jaekyung, sonrojandose ligeramente, encogiendose de hombros con una sonrisa cómplice — ¿Cómo me veo?

— Adorable — dijo Dan, teniendo una cara de asombro y de ternura — Muy adorable.

Las mejillas de Jae se tiñen de un ligero rubor ante el cumplido de Dan, pero su sonrisa se amplía aún más. Se acerca a Dan y comienza a darle besos suaves en la cara, haciéndolo reír con ternura.

— Siento que me veo ridículo...

— No... Pero contrasta con tu imagen ruda — dijo Dan, obteniendo un puchero de parte del azabache — Y ese contraste... me encanta.

Dan se acercó a Jaekyung para abrazarlo y darle un beso mientras se paraba de puntitas.

— Bueno... solo soy así para ti — dijo Jaekyung, quien lo alzó, tomándolo de los muslos, y caminando hasta el sillón de la habitación.

Después de aquel momento de ternura, Dan y Jaekyung se acomodan juntos en la cama, preparados para disfrutar de una película juntos.

Con el ambiente, se sumergieron en la pantalla, compartiendo risas y abrazos mientras se dejan envolver por la magia de la película y el amor que ahora, habiendo sanado sus heridas emocionales, iba a florecer como una hermosa flor después de una fuerte tormenta.

[FANFIC/AU] Sólo es un contrato (Jinx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora